Si la reanudación de las labores de la Comisión de Mediación (Comed) se produjo por la voluntad de todas las partes involucradas (Ejército Popular Revolucionario, Secretaría de Gobernación y el Comité de Familiares «Hasta Encontrarlos»), entonces las perspectivas para arribar a la verdad sobre el paradero de los dos eperristas desaparecidos es, a pesar del […]
Si la reanudación de las labores de la Comisión de Mediación (Comed) se produjo por la voluntad de todas las partes involucradas (Ejército Popular Revolucionario, Secretaría de Gobernación y el Comité de Familiares «Hasta Encontrarlos»), entonces las perspectivas para arribar a la verdad sobre el paradero de los dos eperristas desaparecidos es, a pesar del tiempo transcurrido, también mayor.
Además, otros sectores políticos se han manifestado a favor del funcionamiento de una mediación como medio idóneo para esclarecer lo sucedido (sin que ello refiera a alguna clase de vinculación con grupos armados o con la Comed), como es el caso de los ex presos políticos, militantes de Izquierda Democrática Popular que accedieron a responder un cuestionario escrito sobre éstas y otras circunstancias vinculadas a este tema.
A continuación, el texto íntegro de la entrevista:
Jorge Lofredo (JL). ¿Por qué considera que la COMED es una salida posible y a la vez viable para la resolución de la cuestión de los desaparecidos, si la propia Comisión se disolvió en un primer momento por falta de respuestas y voluntad política del gobierno?
Izquierda Democrática Popular (IDP). Porque la inexistencia de la COMED significaría la cancelación definitiva de una vía política para tratar de resolver no sólo ese problema específico, sino diversos problemas derivados de la existencia de organizaciones político militares revolucionarias. En cambio la existencia de la COMED implica una presión política al Estado mexicano y la posibilidad de generar una corriente de opinión que dificulte la reiteración de la detención-desaparición.
(JL). ¿Qué lectura hace si la cuestión de los desaparecidos no se resuelve por esta vía?, ¿cuáles son los caminos para la actual administración nacional y para el EPR? Si esta vía no da resultados ¿considera probable la posibilidad de una vuelta a la actividad político-militar, aunque en lo declarativo el EPR no dio por finalizada su campaña?
(IDP). Creemos que lo mejor sería que la profundización de las líneas de investigación plasmadas en la recomendación de la CNDH puede dar como resultado el esclarecimiento de lo sucedido con los dos desaparecidos. Carlos Montemayor murió convencido de que ellos están en manos del ejército y nosotros lo creemos probable. Si a través de la COMED no se resuelve el paradero de los dos eperristas, sin duda que es un mensaje ominoso para la posibilidad de que las insurgencias transiten por vías políticas y pacíficas. Pensamos que es probable que el EPR si se siente legitimado por la ausencia total de respuestas institucionales ante el tema decida volver a actuar.
(JL). IDP manifestó: «en lugar de responder a la provocación desesperándose o sacando la cabeza para ser detenidos, el grupo insurgente difundió esa misma noche un comunicado con las bases de la mediación, lo que rompió el esquema contrainsurgente armado en su contra» (El Universal, 18 de mayo de 2008). Entonces ¿esos anónimos hicieron referencia a hechos reales? Si esto es así, ¿la magnitud de la iniciativa del EPR implica la importancia del contenido de esos anónimos?
(IDP). No sabemos si los anónimos se refirieron a hechos reales que no sean del conocimiento público, pues en los intercambios epistolares entre algunas de las fracciones de la diáspora eperrista se revela diversa información, incluyendo la historia que difundió el EPR hace pocos años donde se refieren a las rupturas. También desconocemos la magnitud de la información que el Estado ha capturado al EPR, ERPI y otros en las detenciones que hubo en años anteriores, pero nuestra percepción es que los autores de los anónimos tienen información privilegiada y sin duda pertenecen a un órgano de seguridad del Estado, muy probablemente los que capturaron a los desaparecidos.
(JL). En ese mismo lugar afirmaron que «el gobierno de Calderón no tiene en su control a todos los grupos de poder que hay en el país, lo que no le permite garantizar que fuerzas de ultraderecha y extrajudiciales no sigan actuando por su cuenta». En tal caso ¿por qué cree que la administración nacional acepto la Mediación?, ¿considera que una y otra cuestión (actuación de grupos de derecha y aceptación de la Mediación) son parte de una misma política?
(IDP). Porque el gobierno actual necesitaba neutralizar la posibilidad de que las acciones político-militares de los eperristas continuaran, dado su impacto económico y político. Creemos que hoy las fuerzas del Estado son más heterogéneas que nunca y que una es la lógica del ejército y algunos organismos de seguridad del Estado -que se impone de facto a otros sectores- y otra es la lógica de la parte civil del gobierno.
(JL). ¿Con la ampliación de la COMED piensa que variará esta situación?
R. No nos parece que la ampliación de la COMED influya en el curso de los sucesos, si bien le facilita e institucionaliza aspectos operativos.
¿Por qué considera que otros partidos políticos no se han expedido oficialmente sobre el tema ni han tomado posición partidaria al respecto?, ¿o el silencio es una forma de posicionarse sobre el tema?
(IDP). Simplemente los intereses pragmáticos de los partidos se imponen, ocupados de sus intereses de coyuntura e incapaces de percibir la gravedad de la existencia de las insurgencias y su implicación a futuro.
(JL). ¿Desean agregar algún otro comentario?
(IDP). Creemos que todo ciudadano y fuerza política consciente debería preocuparse por los temas vinculados a las causas de la insurgencia armada, pues tal vez todavía podamos ahorrar a México una guerra interna como la que siguen viviendo los colombianos, sin posibilidad de los ejércitos contendientes de derrotar al contrario. Sin duda consideramos que son necesarias transformaciones profundas económicas, sociales y políticas en México, pero hemos decidido abonar el terreno para que estas se puedan dar con los menores costos sociales posibles. Contribuir a la erradicación de las causas que hacen que miles de mexicanos y mexicanas se decidan por la insurgencia armada, es un imperativo ético.
Posdata
Sigue resultando llamativo el silencio que sostienen las organizaciones que componen la «Coordinación Revolucionaria» (Movimiento Revolucionario Lucio Cabañas Barrientos, Tendencia Democrática Revolucionaria-Ejército del Pueblo y otras agrupaciones) quienes, por lo general, suelen procurar lapsos menores entre cada comunicación emitida, tanto en conjunto como en forma separada. De hecho, estas dos dieron a conocer sus últimos textos en julio del año pasado, donde expresaron su posicionamiento sobre el proceso electoral. Sin embargo, hasta hoy no han vuelto a ofrecer sus argumentos. Y temas hubieron: el profético 2010, la reanudación de las labores de la mediación, la muerte de Carlos Montemayor y muchos otros más que, aunque les incida con distinta intensidad, son de gran importancia para las organizaciones revolucionarias.