La sede de la Federación Única de Trabajadores de Campesinos del Beni (FUTCB) fue atacada este domingo por las decenas de frenéticos jóvenes unionistas que armados de palos, cuchillos y petardos arremetieron contra los campesinos, mujeres y dirigentes de diferentes sectores sociales que se encontraban en el lugar. De acuerdo a los agredidos, esta acción […]
La sede de la Federación Única de Trabajadores de Campesinos del Beni (FUTCB) fue atacada este domingo por las decenas de frenéticos jóvenes unionistas que armados de palos, cuchillos y petardos arremetieron contra los campesinos, mujeres y dirigentes de diferentes sectores sociales que se encontraban en el lugar.
De acuerdo a los agredidos, esta acción violenta es una muestra de racismo y como muestra de su disgusto a la convocatoria a la abstención que realizaron los sectores sociales.
La violencia promovida por los jóvenes de la Unión Juvenil Cruceñista (UJC) y de la Unión de Jóvenes Autonomistas del Beni (UJAB) llegó hasta la sede de los campesinos donde golpearon a dirigentes, mujeres y hombres, incendiaron una motocicleta, dejando un saldo de cinco heridos.
Las instalaciones de la FUTCB ubicada en la populosa plaza Rosada de Trinidad se convirtió por más de una hora en un escenario de agresiones verbales y física entre campesinos, vecinos y unionistas. La intervención de la Policía evitó que los ánimos caldeados de la gente sean rebasados hasta llegar a acciones lamentables.
El dirigente de los campesinos, Gustavo Moreno, cuestionó que el prefecto del Beni, Ernesto Suárez Sattori, haya traído a «jóvenes delincuentes» a sembrar la violencia en Beni.
A su vez el ejecutivo del Comando de Integración Departamental, Justo Ishita Alvarado, responsabilizó al Prefecto y al alcalde Moisés Shiriqui de haber entregado Beni a los cruceños y a jóvenes vándalos.
Tras el abandono de los unionistas en varias camionetas, se quedaron en el lugar las decenas de funcionarios de la Prefectura y la Alcaldía quienes continuaban azuzando a los vecinos y campesinos para mantener la tensión y generar más enfrentamientos.
Agredieron a cuanta persona se les ocurría como a aquellos que pedían paz, a periodistas que hacían preguntas que les incomodaba y hasta a señoras que demandaban el abandono de esa gente del lugar.