Al aplicar la segunda fase de su operativo, la Policía Federal Preventiva (PFP) liberó la salida a la carretera México-Cuacnopalan y dos arterias de la ciudad; recuperó las instalaciones del Canal 9 de televisión estatal y detuvo en esos puntos a 18 personas; continuó el cateo de casas -en algunos casos sin orden judicial-, en […]
Al aplicar la segunda fase de su operativo, la Policía Federal Preventiva (PFP) liberó la salida a la carretera México-Cuacnopalan y dos arterias de la ciudad; recuperó las instalaciones del Canal 9 de televisión estatal y detuvo en esos puntos a 18 personas; continuó el cateo de casas -en algunos casos sin orden judicial-, en busca »de guerrilleros»; torturó a un reportero local, y aplicará desde esta noche una especie de toque de queda, que incluye revisiones a vehículos »sospechosos» para »disminuir el vandalismo». En esto también participará la policía estatal.
Esta noche se confirmó que la Agencia Federal de Investigación (AFI) y el grupo de Operaciones Especiales de la PFP adelantaron la tercera fase del plan operativo y están por cumplimentar la orden de aprehensión contra el dirigente de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), Flavio Sosa Villavicencio, e inclusive contra la profesora Carmen López Vázquez, una de las conductoras de la estación de radio La Ley del Pueblo; se iniciaron cateos en la colonia El Rosario para buscarla. También se tratará de detener a los profesores Jesús Arellano, Rafael Rodríguez y Miguel Angel Shultz.
Ante esa situación, el vocero de la APPO, Florentino López, informó que al configurarse «una suspensión de garantías individuales, el movimiento recurrirá a todas las medidas legales a las que tenemos derecho como ciudadanos», específicamente un amparo.
Vecinos de la agencia municipal de Pueblo Nuevo, de Brenamiel, de las colonias El Valle y El Rosario, denunciaron que desde la noche del martes la PFP y los grupos de operaciones especiales entraron por la fuerza a sus domicilios, rompieron las cerraduras y destruyeron sus muebles.
La APPO reportó, asimismo, que continúan desaparecidas cuando menos 50 personas, y que en el operativo de esta mañana en Brenamiel -donde fue roto el bloqueo de ese punto estratégico para el movimiento- fueron detenidas 16 personas y cinco de ellas fueron trasladadas en un helicóptero de la Federal Preventiva matrícula PF305.
Una persona más, Alfonso García Martínez, fue aprehendido en la recuperación del Canal 9 de televisión estatal; se le acusó de resistencia a la autoridad y de portar bombas molotov. Sin embargo, la realidad fue distinta. Fue suficiente que una mujer le dijera a los policías que García Martínez la había «molestado» para que los federales lo retuvieran. Como se resistió, lo cargaron en vilo.
Hasta el cierre de esta edición no se sabía a qué penal fue trasladado y su historia es como la de decenas personas que, explicó la APPO, son encarceladas y horas después se les cambia de prisión para que sus familiares no las encuentren.
Esta mañana, Liliana Monserrat Angeles Cruz lloraba aún porque sus suegros, Ramón Carranza Mendoza y Soledad Reyes Lerdo, continuaban desaparecidos. Por la tarde se supo que estarían en la prisión municipal de Cosolapa.
El matrimonio fue detenido el domingo, afuera de su casa en la colonia Cuauhtémoc, cuando se asomaron a ver el operativo policiaco. La APPO reportó por la noche que otra persona fue detenida en Brenamiel y que, hasta el momento, se han cometido 64 allanamientos de morada.
Además, hoy finalmente fue liberado el reportero de La Opinión Gildardo Mota Figueroa, quien fue detenido el martes por policías preventivos en el Parque del Amor y enviado a la base aérea de El Tequio, donde fue torturado y vejado.
Para los operativos de hoy en Brenamiel, el Canal 9 y el Periférico, la PFP estuvo respaldada por grúas que retiraron los camiones incendiados, así como decenas de camionetas pick up. En ambos casos participó la Policía Militar -a cuyos elementos se les dotó de uniformes grises, pero se les dejó el chaleco antibalas y los pertrechos color verde-, así como agentes de operaciones especiales.
El jefe de la Policía Auxiliar y Bancaria, Alejandro Barrita Díaz, quien fuera escolta del ex líder del Congreso estatal, Juan Díaz Pimentel, encabezó el operativo de limpieza de basura.
La PFP y el Ministerio Público Federal ingresaron después a las instalaciones de la televisora, donde encontraron que si bien faltan cámaras y computadoras, el equipo de edición, producción y posproducción quedó inservible pues, informó el gobierno estatal, fue dañado con solventes y diesel.
Una cabina de televisión, de las dos con que cuenta el canal, está destruida, así como monitores y consolas. Un cubículo de redacción fue incendiado, pero los empleados no pudieron acceder a las áreas de noticias, administración, cabinas de radio, estudios, audioteca y videoteca, pues el Ministerio Público colocó sellos en las puertas.
Más tarde, unos mil policías preventivos y de operaciones especiales retiraron el plantón en Brenamiel, donde hubo poca resistencia, y levantaron las barricadas, autos compactos y autobuses incendiados que obstruían la salida a la carretera a México; quitaron las lonas y la basura.
Asimismo, fuentes oficiales revelaron que durante los patrullajes la PFP hará revisiones a grupos de ciudadanos que transiten por esta capital a «altas horas de la noche. Aunque sabemos que habrá quejas por estas acciones forman parte del plan para restablecer el estado de derecho. Esto es ya el inicio de la segunda fase del plan que se trazó para regresar la calma a esta entidad, y luego vendrán las acciones para ejecutar las órdenes de captura», señalaron.
Además, como parte de la «limpieza» de vialidades, hoy con apoyo de trascavos, grúas y camiones de volteo, elementos de la Federal Preventiva retiraron de diversas vialidades restos de vehículos incendiados que fueron utilizados como barricadas.
Las acciones policiacas, que cesaron durante la madrugada «para evitar acusaciones de violaciones a los derechos humanos», se reiniciaron al amanecer con la reapertura total de avenidas como Periférico, en las inmediaciones del centro, Símbolos Patrios y el Parque del Amor.
Por su parte, la plenaria de la APPO acordó seguir «en pie de lucha» y convocó al pueblo «a continuar con la resistencia pacífica en contra de las fuerzas de ocupación de la Policía Federal Preventiva y del desconocido y repudiado gobernante» Ulises Ruiz Ortiz.
Como en los dos días anteriores, supeditó el diálogo con la Secretaría de Gobernación a la salida de las fuerzas federales y la liberación de todos los presos. «La APPO y el pueblo de Oaxaca sostienen una lucha pacífica y política, y por lo tanto siempre estamos dispuestos al diálogo, pero asistiremos hasta que las fuerzas federales de ocupación se retiren de Oaxaca», afirmó Flavio Sosa Villavicencio.
Resaltó que la plenaria acordó incrementar y fortalecer las barricadas en los barrios y colonias de la ciudad de Oaxaca y municipios conurbados, «como medida de autodefensa» ante la represión y cateos.
Dijo que entre los acuerdos se concluyó establecer relaciones con la convención nacional democrática (CND) y la otra campaña, y solicitar a la organización civil Servicios y Asesoría para la Paz (Serapaz), encabezada por el obispo emérito de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, Samuel Ruiz García, la concurrencia de organismos y observadores nacionales e internacionales para que den testimonio de la violación a los derechos humanos y garantías constitucionales cometidos por las fuerzas federales.