Recomiendo:
4

Yo estaba ahí

Fuentes: El Cohete a la Luna - Imagen: "El bombardeo del 16 de junio de 1955", Daniel Santoro (Buenos Aires)

La primera bomba estalló sobre un trolebús en servicio sobre la avenida Leandro Alem, yo lo vi

El 16 de junio  de 1955 a las 12:40 del mediodía yo me encontraba en el 6° piso del ministerio de Ejército, hoy rebautizado Edificio Libertador. Cumplía mi año del servicio militar obligatorio.

La primera bomba estalló sobre un trolebús en servicio sobre la avenida Leandro Alem. Yo lo vi.

La carrocería ennegrecida y lenguas de fuego que salían por las ventanillas.

Todo fue terror. Una bomba cayó en el edificio Libertador. Los ventanales de 6° piso se venían abajo. Todos corrimos hacia las escaleras en busca de los subsuelos.

Cuando llegamos al segundo subsuelo lo vimos al General Perón rodeado de tres o cuatro oficiales que le hablaban. Un momento después Perón ya no estaba. En el  subsuelo militares y civiles nos sentíamos protegidos, pero el sonido de las bombas y metrallas nos mantenía asustados. Un rato después se escuchó con nitidez una trompeta. Uno de los refugiados, con acento alemán —idioma de certezas— dijo “cese el fuego”· Todos nos sentimos aliviados y cantamos el himno nacional. Pero duró poco. Volvieron los estallidos.

Los capitanes de la aviación naval que urdieron este acto criminal, calculaban que el bombardeo no iba durar más de 4 minutos. Duro 5 horas. El operativo era voltear la Casa Rosada a la hora de una reunión de gabinete y luego 200 comandos civiles ingresarían y matarían a Perón, si hubiera sobrevivido.

No fue así. Tremendo acto criminal y que se resiste a toda calificación, fracasó. A eso de la 7 de la tarde nos dijeron que aquellos soldados que vivíamos a 30 minutos podíamos irnos caminando a nuestras casas. Con un compañero que, como yo, vivía en Villa del Parque, levantamos la mano (una hora en ómnibus). Salimos del edificio y la imagen fue aterradora. Destrucción por todas partes e iglesias cubiertas de llamas.

Argentinos habían bombardeado la plaza central de Buenos Aires al horario de mayor actividad, mataron a más de 300 personas e hirieron a un millar en una acción alocada y criminal.

No se conocen casos iguales. Guernica fue atacada por pilotos alemanes e italianos, Hiroshima y Nagasaki por estadounidenses. Nunca los propios compatriotas cometieron actos tan salvajes.

Este hecho quedó por mucho años en el silencio.

En la noche del 16 de junio, Perón le habló al pueblo y dirigió un mensaje conciliador. Por lo tanto, se ocultó la verdadera historia y sus responsables.

Tres meses después Perón era derrocado y la historia se tapó.

Muchos años después, Néstor Kirchner y luego Cristina le dieron valor histórico.

Posiblemente por ser un partiquino siento que esta historia no ocupa el valor histórico que se merece.

A ver si nos entendemos.

Militares argentinos formados para defender a la Patria de cualquier agresión extranjera, patriotas si lo debieran ser, bombardearon la Plaza de Mayo , mataron, hirieron y mutilaron a centenares de compatriotas, peronistas y antiperonistas.

Hasta dónde puede el odio.

Fuente: https://www.elcohetealaluna.com/yo-estuve-ahi-2/