1. Mientras el presidente usurpador Felipe Calderón (Fecal) -contando con todo el apoyo del gobierno de Bush- viaja a Nicaragua, tratando de establecer relaciones con los gobiernos de izquierda de América Latina, en México el incremento de los precios de productos de primera necesidad como el maíz, la leche, los energéticos, etcétera, hace más […]
1. Mientras el presidente usurpador Felipe Calderón (Fecal) -contando con todo el apoyo del gobierno de Bush- viaja a Nicaragua, tratando de establecer relaciones con los gobiernos de izquierda de América Latina, en México el incremento de los precios de productos de primera necesidad como el maíz, la leche, los energéticos, etcétera, hace más profunda la pobreza y la miseria del 80 por ciento de la población. En lugar de parar en seco a los poderosos empresarios especuladores que tienen gigantescas bodegas llenas de maíz y orillan al hambre y la muerte a decenas de millones de seres humanos, el equipo del presidente espurio busca argumentos técnicos y pone pretextos para no cumplir con su responsabilidad. Debe quedar bien claro que Calderón sólo cumple con su papel al servicio de empresarios y especuladores, que los culpables son la población que no lucha y sus dirigentes, partidos políticos, etcétera, satisfechos en el poder.
2. En tanto, la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), que ha sufrido represiones, encarcelamientos y asesinatos, así como la ocupación militar de sus espacios ordenada por el gobierno anterior de Fox y del actual presidente Fecal, no ha parado un día sin protestar y salir a la calle porque posee un altísimo nivel de conciencia, el PRD y los lópezobradoristas .-que podrían movilizar a millones y cuya repercusión podría ser determinante- no ha convocado a movilización alguna para frenar en serio al gobierno cuasi militar de Calderón. Además -debe subrayarse- es quizá el único camino que tiene la CND y el FAP para recuperar espacios perdidos y para convertirse en un auténtico gobierno legítimo de México. Los gobernadores y legisladores frenteamplistas están cada día más cercanos al gobierno de Calderón, pero serían otra cosa si existiera un movimiento de masas fuerte y vigilante.
3. ¿Teme acaso la centroizquierda a una «opinión pública» bien manipulada por los medios de información, en particular, por Televisa, TV Azteca y Radio Fórmula? O, al contrario, ¿quieren portarse bien para que esos funestos medios empresariales y monopólicos les sonrían y les abran un poquito sus puertas? Los de Nueva Izquierda del PRD, cuya política ha sido siempre negociar todo, han sido claros: «las confrontaciones deben evitarse, todo se puede arreglar mediante el diálogo y la negociación». Sin embargo las otras corrientes -aunque menos entreguistas- suelen ser muy oscuras porque no confían en el movimiento de masas y, por ello, no hacen trabajo dirigido a ellas. Quizá tengan que tomar prolongados cursos en Oaxaca, donde los profesores y miembros de la APPO podrían enseñarles a brigadear, a dormir en calle, a las pintas y pegas y a discutir acaloradamente -de igual a igual- en asambleas de 12 horas.
4. Sólo con decretos como el de Hugo Chávez pueden cambiar los medios de información, en particular la televisión. La propuesta de un tercer canal televisivo en México es interesante, pero no una garantía para lograr una TV honesta y objetiva. El tercer canal podría convertirse en otro canal Azteca que no rompió el funesto monopolio sino que se alió estrechamente a Televisa y fue más de lo mismo. Azcárraga y Salinas Pliego son súper millonarios enemigos del pueblo mexicano. En cambio en Venezuela, si Chávez lleva al final su idea de ya no dar concesiones a los medios de información golpistas y pro yanquis, las cosas pueden cambiar. No se buscan medios de información que sólo cambien de ideología para acomodarse al poder, sino medios que ayuden a elevar el nivel de conocimiento y la conciencia crítica y reflexiva de la población. TV y radio, que han penetrado en un 90 por ciento de hogares, deben ser limpios y honestos.
5. Cuando lo miembros de la APPO ocuparon radios y una televisora en Oaxaca, los programas de esos medios cambiaron radicalmente. No solo los noticieros, comentarios y entrevistas cambiaron en cuanto a interpretación, sino que también al llamado entretenimiento se le dio un contenido social. Muchos artistas que nunca habían tenido alguna oportunidad para decir sus poemas, presentar sus obras de teatro o, simplemente, para demostrar su calidad en el canto y el baile, ocuparon las pantallas televisivas. Por eso todos los medios comerciales de información pusieron «el grito al cielo» exigiendo la represión contra el movimiento y la devolución inmediata de los medios que el pueblo controlaba. Nadie cobró ningún centavo por actuar y los locutores que trabajaban más de 12 horas diarias lo hacían por la sola conciencia. Obviamente, las personas enemigas del movimiento jamás podrán entender el trabajo voluntario.
6. El pueblo oaxaqueño fue brutalmente reprimido por los gobiernos panistas de Fox y Calderón, pero ningún día ha dejado de manifestarse. Muchos de sus dirigentes fueron encarcelados y otros son perseguidos con acusaciones políticas fascistas, sin embargo ellos saben que la mejor defensa no es guardarse o sacar un «amparo» sino seguir participando en los movimientos de masas. Ellos no luchan por cargos políticos o por privilegios económicos, sino en un primer momento por la defensa de sus derechos laborales que luego se convierte -por la actitud clasista del Estado- en lucha de clases, en batallas por los intereses de todos los trabajadores. El ejemplo es el de la Sección 22 del magisterio que comenzó luchando por la rezonificación y la educación popular para convertirse luego -al ser brutalmente reprimida el 14 de junio- en una lucha política exigiendo la salida del gobernador y en lucha de clases al identificarlo con la burguesía.
7. Los militantes del PRD sólo ven lucha política porque sus dirigentes -al parecer lo hacen a propósito- les bloquean la posibilidad de ver que toda lucha política es también lucha de clases. No se les enseñan que no se pretende sólo sustituir a unos funcionarios con otros, a unos legisladores por otros de distintos partidos, ni mucho menos solo cambiar a Calderón con López Obrador. No se les demuestra que Calderón , Fox y Salinas, que hacen el trabajo político, y Slim, Azcárraga y Salinas Pliego -dueños de las más poderosas empresas- pertenecen a la misma clase social opresora y explotadora. ¿Cómo pueden distinguir un planteamiento radical de fondo de otro que simplemente critica a personas, busca sustituirlas, pero sin cambiar la estructura económica y social? La gente tiene que saber que no es problema de personas buenas o malas, sino de clases sociales y de intereses económicos que cada político o empresario defiende.
8. Los dirigentes más honestos y consecuentes del PRD y de la CND deben impulsar movilizaciones contra los aumentos de precio, la carestía, los salarios miserables, la represión en Oaxaca y la militarización del país. No se trata de luchar simplemente por los dos pesos de la tortilla o los 50 centavos de la leche, sino de salir a la calle contra una política económica que sólo beneficia a los empresarios y a los altos políticos. Es urgente que las organizaciones sindicales, campesinas y populares, así como las organizaciones políticas de izquierda, impulsen el movimiento de masas en las calles y plazas. Calderón, el presidente usurpador, dejará todo al «libre desarrollo del mercado» y tratará de mediatizar a las organizaciones sociales repartiéndoles algunos apoyos. ¿Olvidan o ignoran acaso que en los años 50 y 60, ante las carestías y falta de alimentos el pueblo acudió a saquear bodegas y comercios de acaparadores, asesinos del pueblo?