El corte masivo de electricidad que afectó el miércoles a medio país tras varias fallas en el sistema interconectado habría sido originada por un incendio de pastizales en General Rodríguez, provincia de Buenos Aires, y afectó a tres cables de alta tensión de 500 kilowatts (kW) . En total, dejaron de producirse unos 10.000 megavatios, un 35% del total de la generación nacional.
El apagón afectó a 20 millones de usuarios en importantes zonas de Buenos Aires, Rosario, Córdoba, Mendoza, San Luis, Tucumán, Salta y Jujuy. Ante el colapso en la red eléctrica, la central nuclear Atucha I quedó fuera de servicio.
A raíz de la falta de energía, una de las áreas más damnificadas es la de transporte y en la estación Constitución de lka capital se produjo el amontonamiento de miles de personas que volvián de sus trabajos, tanto por los cortes de luz como por la interrupción de algunas líneas de subtes y trenes. Por los corte eléctricos, dejaron de funcionar más de mil cruces con semáforos.
El incendio de campo “perturbó una línea de alta tensión de 500 kw que une Campana con General Rodríguez”, informaron fuentes oficiales. Tras el apagón en medio país, el gobierno presentó una denuncia para que se investigue si el fuego fue provocado de manera intencional.
“Queremos que se investigue la intencionalidad de los dos grandes incendios que podrían encuadrar en el delito de “incendios y estragos”, y que dejaron a miles de argentinos y argentinas sin servicio de Energía Eléctrica”, informó el subsecretario de Energía Eléctrica, Santiago Yanotti.
“Por instrucción del ministro de Economía, Sergio Massa, hemos solicitado ante el Juzgado Federal de Campana que se disponga de forma inmediata de todas las medidas necesarias para dar con los responsables de los gravísimos hechos”, añadió.
Pero sobre la responsabilidad política de parte del actual y anteriores gobiernos de mantener el sistema de privatizaciones de las empresas de electricidad que amasan fortunas y no garantizan el servicio, por ahora no hubo ninguna palabra.
La quema de pastizales suma un perjuicio más a los varios que ya genera: destrucción de ambientes y de humedales, contaminación ambiental, afecciones respiratorias, accidentes de tránsito y ahora la pérdida de infraestructura estratégica con millones de afectados.
Nucleoeléctrica Argentina aclaró que la interrupción masiva de suministro de energía eléctrica ocurrida durante la tarde del miércoles no fue causada por la central nuclear Atucha I, que opera esa empresa, sino que una serie de fallas en el sistema interconectado trajeron aparejada la salida de Atucha I, entre otras centrales térmicas.
Consecuencias
Cuando falla el sistema de transporte, las centrales que generan la electricidad deben parar porque no hay manera de distribuir la energía hacia los lugares de consumo. De lo contrario, el recalentamiento de los generadores es inmediato y se corre el riesgo de afectarlos. Esa es la razón por la que, preventivamente, la Secretaría de Energía, procedió al apagado de algunas centrales.
Pero la falla siguió su propio curso, quizá por el pico de demanda que existía al momento de la falla, en mmentos qe el país sufre una ola de calor. Luego de la caída de las primeras tres líneas de alta tensión, se desengachó una cuarta que transporta extra alta tensión (500 kW) y conecta la localidad bonaerense de General Rodríguez –donde se habría prodcido la quema de pastizales- con la central nuclear de Atucha.
Según fuentes oficiales, el problema mayor fue que esa falla en la zona del Litoral no se pudo aislar y se extendió al resto del Sistema Interconectado Nacional (SIN). Así, terminaron por salir nuevas líneas de extra alta tensión y de media tensión, como las de Comahue y Cuyo, que surten al sur y occidente del país.
Ruben Armendariz. Periodista y politólogo, asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE)
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