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Bolivia y la recuperación del Estado Plurinacional en la transformación económica mundial

Fuentes: Rebelión

Antes el arrocito costaba 4bs. El kilo ahora nos cuesta 8bs. Antes el litro de aceite Argentino nos costaba 8bs. Ahora cuesta 15bs. Las familias ya no pueden comer, por eso hemos venido” (Marchista de Warnes)

No tenemos proyectos de infraestructura, no hay plata, antes con 10bs. Comprabas un litro de aceite, ahora con 25bs., los niños ya no van a estudiar tienen que quedarse a trabajar con sus papás” (Edgar Zapata marchista de Villa Tunari)

Luego del mitin realizado el pasado 23 de Septiembre en la Av. Ismael Montes a la altura de la Cervecería Boliviana protagonizado por decenas de miles de marchistas que desde todo el país se sumaron a la Marcha para salvar a Bolivia, encabezada por el Ex Presidente Evo Morales y que partió desde Caracollo el 17 de septiembre, el debate se centra en torno a la principal demanda de los marchistas, esto es, la recuperación del Estado Plurinacional, por lo que exigen al gobierno de Arce terminar con el encubrimiento al narcotráfico, la destrucción de la economía del pueblo y el ataque a las organizaciones sociales, y para lo cual piden la renuncia de al menos tres ministros del gabinete del presidente Arce, entre ellos El actual Ministro de Gobierno Eduardo del Castillo; el Ministro de obras Públicas, Edgar Montaño; y el Ministro de Justicia, Iván Lima, acusados de corrupción, narcotráfico y otros.

De esta manera se le dio un plazo al actual presidente Luis Arce hasta el día 30 de Septiembre, para efectuar su remoción del gabinete. Ante lo cual los voceros de gobierno señalan que el verdadero objetivo de la marcha sería la angurria poder del ex mandatario y en consecuencia la ambición de retornar al gobierno en las elecciones del 2025 por el MAS IPSP.

Todo esto en el contexto de la disminución de las divisas de 15 mil millones de dólares en el año 2014 a 2 mil millones de dólares al año 2024 y considerando que el presidente Arce reconoció en Junio de este año la escasez de combustible en los que, según datos oficiales, Bolivia ahora importa el 56% de la gasolina y el 86% del diésel que consume. En este escenario de recesión económica Arce se niega a aceptar que existe en Bolivia una crisis económica y acusa a Evo Morales de gestar una crisis política.

No obstante, la situación en el país empeora con la finalización del contrato con Argentina el 18 de Septiembre luego de dos décadas de exportación del gas según una publicación en el sitio web de Reuters del 25 de Septiembre en tanto Argentina se convierte en exportador del combustible con el Yacimiento Petrolífero de Vaca Muerta. De ahí que el suministro haya declinado a 2 millones de metros cúbicos por día este año.

Ahora bien en el contexto global, según el reporte del OECD del 2023 la guerra en Ucrania habría provocado un encarecimiento de los precios de la canasta básica familiar así como de la energía lo cual habría contribuido visiblemente a fortalecer la inflación a nivel mundial, de ahí que la política monetaria impulsada por el Banco Mundial y el FMI se haya dirigido a constreñir la política monetaria de manera proporcional tanto en las economías más desarrolladas como en las emergentes, a fin de lidiar con el proceso inflacionario en la medida en que la guerra se extiende.

Al respecto Joseph Borrell delegado en el Parlamento Europeo habría afirmado, en una exposición reciente, que el interés de Europa en apoyar la guerra a través de la OTAN, ahora con la provisión de armas británicas a Ucrania, se debe a que el interés económico detrás de dicha inflación resulta altamente beneficioso.

Por supuesto, no solo para la industria de la guerra sino además para las grandes corporaciones financieras de Wall Street, quienes ahora en EEUU, desde el análisis de Michael Hudson en su sitio web en una entrevista realizada el 12 de Septiembre de este año con Richard Wolff, luchan por incrementar su poder monopólico, señalando por ejemplo que al nivel de la industria de la construcción esto se da con la fusión de empresas del acero desde hace años y a las que el gobierno de Biden actualmente apoya plenamente, a pesar que esto implica supeditar a sus intereses el control de los precios de la materia prima a costa de los pequeños empresarios en un claro boicot a la industria de EEUU, y que según dicho análisis, coincide visiblemente con la política que Trump desarrolló en su anterior gobierno sobre la subida de aranceles y que hoy es parte nuevamente de su propuesta electoral, ahora con respecto a la importación de los productos Chinos, lo que sin lugar a dudas pone en una situación precaria no solo a los empresarios sino a la población en su conjunto en lo que se refiere a su poder adquisitivo de bienes y artículos de consumo; en donde por ejemplo, si un vehículo chino cuesta 30 mil dólares con el arancel del 100% este valdría 60 mil dólares en EEUU, y en una suerte de política de amigos con la fábrica Tesla, ésta podría vender un vehículo a 55 mil dólares y con una calidad mucho menor, frente a otro comprador en otro país que podría adquirir ese vehículo chino, de calidad superior en 30 mil dólares, sin dicha política de aranceles.

Este ejemplo evidencia una incapacidad peligrosa de la clase gobernante en EEUU para evaluar a futuro esta política económica que no redunda en una mayor productividad y que más bien se suma al declinar de la hegemonía económica mundial de dicho país en tanto se caracteriza por ser predatoria y no generar mayor productividad en el mismo centro de su vida económica pero también a nivel global, lo que estaría dando lugar por ejemplo en Europa a un viraje hacia la Izquierda. Ya que si bien el capitalismo industrial de Marx, se afianzaba en la extracción del valor excedente a partir del pago reducido del valor que en realidad producía el trabajador y estas ganancias eran reinvertidas en expandir la producción, lo que ahora se hace es imponer una renta monopólica de la tierra y peor aún financiera depredadora y que no genera reinversión ni mayor productividad como señala Hudson; bajo una política de muerte claro está.

De ahí la necesidad de evadir el debate central por parte de la clase dominante en la actual contienda electoral de EEUU, que evidenciaría la continuidad de esta política genocida de guerra a nivel mundial que ha devastado la economía de Ucrania y de millones de Ucranianos, así como la vida de miles de niños en Gaza y ahora en Líbano con los últimos atentados en Beirut y que sin embargo es silenciada, trasladando la discusión electoral a problemas de como detener el crecimiento de China con la modificación arancelaria en la que coinciden Biden – Harris y Trump y buscando amedrentar a la población bajo un discurso de demonización hacia el otro, el inmigrante o en el caso de Ucrania contra Putin y/o de aquellos gobiernos contrarios al interés pro EEUU.

Así se deja de lado la discusión sobre esta masiva reorganización de la economía del mundo que venimos atravesando, en el contexto de un crecimiento acelerado de los BRICS mucho mayor al de los G7 y que según Richard Wolf, debería abrir una discusión necesaria sobre la Doctrina Monroe y otras políticas de largo plazo, tal y como sucedió el siglo XX, claro desde su perspectiva, como cuando se redefinió la necesidad de una alianza estratégica entre las grandes potencias y que dio lugar a una alianza estratégica global y a la formación de organismos internacionales como la OEA, FMI y el Banco Mundial entre otros, en el objetivo de desarrollar políticas monetarias que permitieran una sujeción de los países emergentes a sus intereses bajo el discurso desarrollista.

Mientras tanto la realidad de los aliados de EEUU dibuja un panorama de crecimiento desacelerado en tanto Europa pierde su capacidad de acceder a energía barata debido a las sanciones de la OTAN en un contexto inflacionario que depaupera a la sociedad y con una población en declive tanto que para el 2040 se calcula que habrían 2 millones de trabajadores desapareciendo del mercado laboral cada año y en tanto el mantenimiento de la productividad promedio de los últimos 5 o 10 años solo podría ser suficiente para mantener el PIB hasta el 2050. Lo que viene generando una tensión política en una región anciana que no juega más un papel central en la economía global cuyo protagonismo se mueve hacia EEUU y ahora hacia el Asia, como señala Wolff.

En este escenario y volviendo al caso de Bolivia cabe resaltar que a más de generar una necesaria revisión de las políticas económicas del gobierno de Arce que van dirigidas a enriquecer a una casta social familiar del mandatario; una de las principales demandas señalaba Evo Morales en su discurso era justamente que en la necesidad de generar desarrollo para el país el presidente de la Cámara de Senadores Adrónico Rodiguez habría sancionado el proyecto de Ley de la construcción de una doble vía Caracollo Colomi 2B: Confital Bombeo de 176 millones de dólares con financiamiento de la CAF, que se habría aprobado el 14 de septiembre del 2016 y que se habría actualizado el 28 de Agosto del 2024 y que hasta la fecha el mandatario “Luis Arce no promulga” y que de no ser por Añez, “la vía ya se hubiera terminado”.

Lo que evidencia un giro de la política del MAS y del gobierno de los movimientos hacia una política neoliberal de depauperización de la economía del pueblo en función de la rancia oligarquía terrateniente hoy agroindustrial, en una clara alienación de las políticas del MAS IPSP que antes iba dirigida a empoderar a las grandes mayorías del país excluídas y empobrecidas con la refundación del Estado Plurinacional, y que hoy debido a la política económica de Luis Arce se ven nuevamente relegadas y excluídas del crecimiento económico que favorece a esta oligarquía antes desplazada del aparato público durante el gobierno de Evo Morales y cuya gestión le dio a Bolivia 14 años de crecimiento económico sostenido reconocido por el FMI y el Banco Mundial.

En este escenario de luchas por intereses contrapuestos de una clase social oligárquica y de un pueblo que ve mermar cada día su economía, Bolivia comienza un retroceso económico que lacera las posibilidades de vida de quienes acuden al ex mandatario a decirle “Evo préstame 50Bs o 1000Bs para salvar mi casa, en cuarentena todo hemos perdido” , o bien para decirle “los niños ya no pueden ir a la escuela porque no hay que comer y tienen que quedarse a trabajar con sus padres” como señaló el ex presidente en su discurso visiblemente conmovido durante el mitín señalado.

Solo para concluir cabe recordar que una de las políticas de empobrecimiento del capitalismo que más resultados ha dado a largo plazo ha sido justamente la de impedir el acceso a la educación, lo que redunda en menores posibilidades de superación económica y social. Esta es la política de crecimiento de Luis Arce contra la cual Bolivia se levanta para recuperar su Estado Plurinacional.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de la autora mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.