Hay frases que sintetizan proyectos, “por el bien de todos, primero los pobres” es una de estas. Entraña la idea de la justicia social a partir de la primacía social de las mayorías empobrecidas. Este componente es uno de los elementos centrales del movimiento lopezobradorista. En el contexto del neoliberalismo en México, la frase contenía una idea de país contraria al proyecto de elites que mientras empobrecía a vastos sectores enriquecía a niveles nunca vistos a una minoría.
La ideología neoliberal ve a la pobreza como un asunto individual, los pobres son fracasados individuales. Es, para los neoliberales, un mal social sin cura. El movimiento lopezobradorista en cambio señalaba que la pobreza es fruto de una injusticia y que es deber político atenderla. Además, luchando contra la pobreza se crea una mejor sociedad. Así, atender la cuestión social se volvió el proyecto de la 4t.
Los resultados de la Encuesta de Ingreso y Gastos de los Hogares 2024 (Enigh) del INEGI publicados recientemente muestran un avance importante en el combate a la pobreza y en la mejora de las condiciones de vida de los mexicanos, sobre todo de los que menos tienen. Se calcula que en el sexenio pasado diez millones de compatriotas salieron de la pobreza. Hubo un avance importante, mostrando que el “primero los pobres” fue la guía del gobierno.
Junto a esto se observa en el movimiento amplio de la llamada cuarta trasformación contradicciones importante. Gobernadores que no marcan una diferencia con el pasado neoliberal, inercias burocráticas que obstaculizan avances, aliados de última hora cuyo marco ideológico es el conservadurismo y una corrupción que no se ha podido eliminar. Los riesgos de que el proyecto que encabezó López Obrador pueda desviarse es una posibilidad cercana.
La disputa en MORENA es por mantener “por el bien de todos, primero los pobres” como idea fuerza, identidad, proyecto y acción del movimiento y gobierno, o, por el contrario, que esta se vuelva un slogan político para ganar elecciones. Es claro que para una parte de los cuadros dirigentes de MORENA la política es sobre todas las cosas ganar elecciones, enriquecerse y tener chamba para repartir. Para otra parte se trata de transformar y de hacer justicia al pueblo. Son visiones encontradas que no pueden permanecer juntas por largo tiempo.
Aun con los nuevos datos estadísticos, la pobreza es el principal problema de este país. Hay 30 millones de mexicanos en pobreza, 7 millones de ellos en pobreza extrema. La tarea es inmensa, se ha avanzado, pero falta mucho. Echar campanas al vuelo es la actitud propia del conformismo, del que no entiende lo que significa la pobreza en las personas, del que ve fríos datos en lugar de opresión a mujeres y hombres. “Por el bien de todos, primero los pobres” es una frase vigente que hay que retomar como ideario, proyecto y acción, de lo contrario, MORENA pasará a ser un partido más de la opresión.
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