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Abascal, Norberto y Calderón compiten como cristeros

Fuentes: Rebelión

1. El diario La Jornada publicó el 1 de abril una interesante fotografía y al pie el siguiente texto que la describe: «El traje «típico» que llevará la representante mexicana en el concurso Miss Universo 2007, obra de la diseñadora María del Rayo Macías Díaz, tiene como motivo principal la cristiada -conflicto armado que el […]

1. El diario La Jornada publicó el 1 de abril una interesante fotografía y al pie el siguiente texto que la describe: «El traje «típico» que llevará la representante mexicana en el concurso Miss Universo 2007, obra de la diseñadora María del Rayo Macías Díaz, tiene como motivo principal la cristiada -conflicto armado que el país vivió a partir de 1926-. Confeccionado con manta, en él aparecen, pintadas a mano, figuras de campesinos colgados de postes telegráficos, mujeres en misas clandestinas y, por supuesto, la imagen de la Virgen de Guadalupe; rosarios, escapularios y milagritos lo complementan. En la gráfica, una modelo muestra el atuendo». Seguramente en los próximos días surgirán aclaraciones, pero resulta interesante ver cómo la Iglesia católica mide el terreno político para lograr nuevos avances, «en este sexenio de oro».

2. Tres personajes: El padre de Carlos Abascal, el secretario de Gobernación del gabinete de Fox, hoy alto directivo del PAN, fue uno de los máximos dirigentes de la guerra Cristera. Ésta fue una enorme contienda armada que libró el clero en el centro del país -de 1925 a 1929- contra el gobierno de Plutarco Elías Calles. El objetivo de esa guerra fue recuperar los privilegios de la Iglesia frente a una Constitución política que los había limitado y confrontar un gobierno que se oponía a sus prácticas religiosas sin límite. El Cardenal Norberto Rivera es el arzobispo de la Ciudad de México que con más fuerza ha representado al alto clero mexicano, sobre todo combatiendo el derecho al aborto y Felipe Calderón, como presidente derechista y como religioso, es la esperanza de la Iglesia católica para extender el control de esa institución sobre el pueblo mexicano.

3. Al presentar a la reina de belleza mexicana con ese traje que recuerda pasajes violentos de la historia de México, esos tres principalísimos personajes de la política y la religión, ensayan el grado de aceptación que tiene ese episodio de la vida nacional. Al mismo tiempo les sirve para propagar en el mundo el poder que tiene la derecha en México. Desde el sexenio anterior los jerarcas de la iglesia católica habían venido reclamando a Fox la instalación de estaciones y canales de radio y televisión controlados directamente por el clero, además de una serie de demandas relacionadas con la educación y salud. Fox hizo todo para satisfacer esas demandas, pero enredado en otros asuntos no los pudo otorgar del todo. Con el arribo de Calderón a la Presidencia el clero se ha lanzado para cobrarle el fuerte apoyo que le otorgó.

4. La realidad es que esa terrible guerra, que abarcó estados como Jalisco, Nayarit, Zacatecas, Guanajuato, Aguascalientes y Durango -bajo el grito de «Viva Cristo Rey, Santa María de Guadalupe y México»- llevó a la muerte a miles de campesinos y trabajadores humildes. Las intervenciones del Vaticano y del gobierno yanqui fueron abiertas y profundas, pero años después fueron esenciales para que gobierno e Iglesia mexicana pudieran llegar a acuerdos. Se firmó un acuerdo de paz pero los intereses entre el Estado y la Iglesia, separados desde 1859, continuaron confrontados. Los gobiernos del PNR-PRM-PRI continuaron monopolizando la política y limitando los intereses del clero y éste, por su lado, buscó fortalecer a poderosos grupos derechistas que desde adentro controlaran al partido-gobierno y por afuera crearan otro partido.

5. Así, entre acuerdos y desacuerdos, violaciones a la Constitución y llamados de atención, visitas papales a México que se registraron en 1978, 1990,1993, etcétera, que después de sesenta años, el 10 de diciembre de 1991, el presidente Carlos Salinas cumplió sus promesas con los altos jerarcas eclesiásticos. Salinas, durante la segunda visita papal a México, recibió al Papa en Los Pinos el 6 de mayo de 1990 y al siguiente año, en su tercer informe de gobierno, convocó a promover la nueva situación jurídica de las iglesias. Fue entonces cuando encargó a Donaldo Colosio, el presidente del PRI, y éste a Mariano Palacios, la elaboración del proyecto. Fue así como Salinas cumplió entregando el texto de la iniciativa a los obispos del país. Jerónimo Prigione, el representante papal, así como los grandes empresarios, aplaudieron a Salinas.

6. Sin embargo a escasos dos meses de aquel acuerdo la Conferencia de Institutos religiosos de México (CIRM) planteó que «El reconocimiento jurídico de la Iglesia se realizó a nivel de las cúpulas gubernamentales y eclesiales , sin tomar en cuenta al resto de los católicos y va a resultar altamente peligroso para el pueblo de Dios. La Iglesia corre el riesgo de privatizarse como los empleos, los sindicatos, el campo y la educación y tendrá que para un alto costo: dar prestigio en el exterior al régimen político mexicano y enfeudarse, en el interior, en las élites de los empresarios, con abandono de las clases populares». Esas son observaciones hechas en febrero de 1992, por órdenes religiosas -jesuitas, franciscanos, dominicos, benedictinos, salesianos y todas las demás órdenes y congregaciones religiosas masculinas y femeninas de México.

7. Sin embargo, a pesar de la existencia de corrientes críticas al interior de la Iglesia que tratan de limpiar la gran corrupción que se ha extendido en  institución, el poder de la alta clerecía es gigantesco. Muchas voces en México y en América Latina han sido acalladas por el Vaticano y por las jerarquías eclesiásticas de cada país, pero a pesar de ello esa oposición crece al mismo ritmo en que el pueblo reclama un mayor apoyo en sus luchas. Al mismo tiempo que las cúpulas eclesiásticas firman acuerdos con las clases dominantes para seguir manteniendo a la población en la miseria, al interior de las iglesias -así como entre los expulsados de ella- surgen fuertes corrientes que reivindican al verdadero cristianismo, al original, que busca derrotar a esas cúpulas que de cristianas no tienen nada porque viven en contubernio con los opresores.

8. No es el traje de la joven concursante el que debe preocupar, sino el desplante del gobierno pro empresarial de Calderón, del directivo panista Abascal y del Cardenal Rivera, quienes han decidido ir adelante a pesar de las oposiciones que surjan. Al parecer esa derecha ya ha sopesado la corrección de fuerzas y está segura de que es el momento para avanzar. El gobierno de Calderón ha logrado el apoyo total del ejército, está consiguiéndole el apoyo del empresariado después de haber conquistado a los medios de información. ¿Qué le falta? Lograr la incondicionalidad de la Iglesia que le ayudaría a conseguir el apoyo de los sectores explotados. La guerra cristera, que tanto ha reivindicado la Iglesia haciendo canonizar a sus mártires, es un pasaje violento de la historia donde el catolicismo ha salido fortalecido. Por eso Calderón lo aprovecha.
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