A 120 días para que finalice el año y para que el reloj marque el momento en que Costa Rica debe estar lista para la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos y Centroamérica (Cafta), un último proyecto ha puesto a sudar a los legisladores oficialistas. Se trata de la Ley […]
A 120 días para que finalice el año y para que el reloj marque el momento en que Costa Rica debe estar lista para la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos y Centroamérica (Cafta), un último proyecto ha puesto a sudar a los legisladores oficialistas.
Se trata de la Ley de Propiedad Intelectual, que forma parte de la agenda de implementación.
No fue hasta el pasado 19 de agosto que se le dio el visto bueno al proyecto para que se debatiera en la Asamblea Legislativa.
La problemática se sustenta en que ya terminó el periodo de sesiones extraordinarias y esta reforma de la ley se encuentra en los últimos lugares de la agenda.
De momento, existen dos opciones para adelantar su votación: la primera que sería mover hacia el frente el proyecto, con el fin de que se vote en una sesión ordinaria, lo cual necesitaría la aprobación de la mayoría de los diputados.
La segunda variable sería enviarlo a una comisión plena para que esta lo ratifique.
Ambas posibilidades están siendo valoradas por la fracción del Partido Liberación Nacional; sin embargo, para que alguna de las dos dé resultados, los liberacionistas deberán sentarse a negociar con las bancadas de oposición, ya que tanto Acción Ciudadana (PAC) como el Movimiento Libertario no votarán a favor de este proyecto.
«Seguiremos siendo coherentes en nuestra posición que siempre ha sido oponernos al Cafta, en este sentido la fracción del PAC no votará a favor de esta reforma», argumentó Sergio Alfaro, diputado de la agrupación rojiamarilla.
La aprobación del proyecto antes del 31 de diciembre no tiene marcha atrás, pues de no recibir el aval antes de esa fecha, Estados Unidos tendría derecho de quitarle al país algunos de los beneficios de los que actualmente goza, tanto en materia arancelaria como de normas y cuotas comerciales.
Asimismo, mancharía la imagen de Costa Rica a nivel internacional por no cumplir con los compromisos previamente adquiridos.
«Estados Unidos nos dio un año más de plazo y ese periodo se vence el 31 de diciembre, si no logramos aprobar este proyecto nos quitará algunos beneficios y además internacionalmente Costa Rica quedará como un país que no cumple lo que promete, que es aún peor», señaló Amparo Pacheco, viceministra de Comercio Exterior.
El denominado último proyecto de la agenda de implementación del Cafta, contempla una serie de reformas a la Ley de Propiedad Intelectual en materia de agroquímicos genéricos y derechos de autor en el mercado de la música.
En lo que se refiere al primer punto, quedó establecido que las empresas fabricantes de químicos no podrán registrar un producto como nuevo, si contiene un ingrediente o fórmula que haya sido registrada previamente en el país.
Mientras que en materia de derechos de autor, la reforma castigará a la personas que reproduzcan o interpreten canciones sin autorización previa de la disquera o los autores.
Asimismo, la iniciativa de ley endurece las sanciones para quienes la incumplan, por lo cual ahora la pena será de seis meses hasta cinco años de cárcel y una multa que iría de cinco a 500 salarios base.
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