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Entretelones del golpe revelan sus relaciones externas

Fuentes: Rebelión

Según van pasando los días, se van develando a la luz pública, hechos que ocurrieron en el transcurso del Golpe que aconteció en Bolivia y que al momento de producirse, la comunidad no los conocía. Estos hechos develan algunos pormenores de la conspiración golpista que tienen que ver con los factores externos de la trama. […]

Según van pasando los días, se van develando a la luz pública, hechos que ocurrieron en el transcurso del Golpe que aconteció en Bolivia y que al momento de producirse, la comunidad no los conocía. Estos hechos develan algunos pormenores de la conspiración golpista que tienen que ver con los factores externos de la trama.

En un conocido programa radial, denominado Barricada, la conductora del programa, María Galindo, conocida activista feminista, entrevistó a Waldo Albarracín, entonces Rector de la Universidad Mayor de San Andrés, a la vez de organizador del arribo a la ciudad de La Paz de los grupos paramilitares de la Unión Juvenil Cruceñista en la víspera de la estocada final golpista. En el curso de la entrevista, la conductora del programa presionó a su entrevistado para que revelara quiénes y en qué circunstancias habían decidido que Jeanine Áñez, conocida posteriormente como la autoproclamada, fuera a ser la persona que se entronara en la presidencia una vez derrocado Evo Morales. Fue entonces que Albarracín, sin ningún desparpajo, entregó la información en relación a que esa decisión fue tomada en una reunión celebrada en la Universidad Católica en la que, además de representantes de la facciones golpistas, estaba nada más y nada menos que un representante del Brasil. Lastimosamente, la entrevistadora, además de señalar la gravedad del hecho, no ahondó en la participación del representante del gobierno brasileño en Bolivia, pero es obvio que su rol fue el de la promoción del golpe y devela la participación de su gobierno en esta conspiración contra la democracia boliviana. Demás está decir, que no extraña entonces que el régimen de Bolsonaro esté emparentado con el de la autoproclamada por su fascismo, racismo y fanatismo religioso.

Por otro lado, el periódico La Razón ha entregado información adicional en una nota informativa de su edición del 29 de enero. En esta nota se da cuenta de una segunda reunión, «convocada» por la Iglesia Católica, al día siguiente, es decir, el 11 de noviembre, en la que hubieran participado representantes del MAS, vale decir, Adriana Salvatierra, Susana Rivero y Teresa Morales. Mientras estas delegadas del MAS no aclaren su rol en esa reunión, pues se puede suponer que fueron citadas para escuchar y someterse a los dictados de los golpistas, por lo que esta segunda reunión no es la determinante.

Lo fundamental está obviamente en la primera reunión en la que se decidió que Jeanine Añez sería la usurpadora. Lo que se ha filtrado también es que la futura autoproclamada hubiera requerido entre 200 y 300 mil dólares para compensar los riesgos que supondría asumir la presidencia en esas circunstancias. Esta noticia, sería obviamente el escándalo del siglo en cualquier país del Mundo. Sin embargo, en Bolivia los medios de comunicación del stablishment lo ignoran, pese a que ya es público, pues circula ampliamente en las redes sociales y varios periódicos digitales han publicado el artículo que María Galindo escribió para su columna en el periódico Página 7 y que fuera censurado por el mismo. Solamente La Razón le ha dedicado una nota informativa, misma que no ha tenido mayor repercusión en el debate público.

¿Quién pagó los 200 o 300 mil dólares?, pues obviamente lo hizo quien propició el golpe.

Otro de los acontecimientos develados mucho después del golpe está relacionado con la salida de Evo Morales de Bolivia. Una vez que renunció, presionado por la situación, se dirigió a Chimoré y, en ese momento, el avión mexicano que fue a su rescate no pudo regresar por la misma vía que ingresó a Bolivia, vale decir, el Perú, dado a que ese país le negó su espacio aéreo. Se sabe que finalmente, el avión salió por el Paraguay. Tiempo después, Jorge «Tuto» Quiroga, que fuera en su momento delfín del dictador Banzer, que en ese entonces, se introdujo en la Política Boliviana como inyectado desde Estados Unidos, pero que al momento de producirse el golpe que se relata no era absolutamente nadie, más que un opositor ciudadano de a pie, relató que fue él quien «coordinó» con la Fuerza Aérea Boliviana para que se diera finalmente el permiso de salida del avión mexicano que conduciría a Evo Morales al exilio. Entiéndase bien lo que Tuto Quiroga ha revelado: En ese momento, no había gobierno en Bolivia, pues Evo había renunciado y Jeanine Añez todavía no se había autoproclamado y, en ese marco, un ciudadano de a pie, «coordina» con la Fuerza Aérea Boliviana el permiso de salida del avión mexicano, así como la ruta que seguiría ¡¡¡ ¿A cuenta de qué Tuto Quiroga coordinaba eso con la Fuerza Aérea Boliviana?, ¿A cuenta de qué la Fuerza Aérea accedía a coordinar con Tuto ese tema? Este asunto es muy esclarecedor. Lo que se sabe por la nota informativa de La Razón es que Tuto Quiroga participó en la segunda reunión de los conspiradores en la Universidad Católica. Lo que se dice es que fueron citados los «actores políticos relevantes» que participaron en esa reunión. Sin embargo, Tuto no tiene en ese momento un partido, pues el PDC, con el que candidateó la última oportunidad, ya ha dado su sigla a otro personaje. Tuto tampoco es parte del denominado movimiento cívico. Y entonces ¿a cuenta de qué Tuto es citado a esa reunión de «altos actores políticos»?. Pues la única explicación razonable es que Tuto es el operador de los gringos en el golpe de Estado.

Ahora bien, ¿cómo se relacionan los dos acontecimientos relatados?, vale decir las reuniones en la Universidad Católica y la salida de Evo Morales en el marco del golpe de Estado?, ¿Qué interés podría tener Tuto en facilitar la salida de Evo Morales?, Pues de lo que se trataba era de generar el «vacío de Poder» del que tanto han hablado y que les serviría luego para justificar la autoproclamación de Jeanine Áñez y darle a su golpe una fachada de sucesión constitucional. Queda por esclarecer si la presencia de Adriana Salvatierra en esa reunión, estaba destinada a abrir el paso a Jeanine, pues a ella como presidenta del Senado le correspondía asumir en caso de la renuncia del presidente y del vice presidente del Estado. En torno a la renuncia del cuarto en la lista de Sucesión, Víctor Borda, entonces presidente de la cámara de diputados, su caso fue «resuelto» con el secuestro de su hermano y el incendio de su casa por parte de los grupos paramilitares que obligaron su renuncia. Esa fue la parte clave y central del golpe de Estado, realizado con la violencia delincuencial que sólo es propia de los fascistas golpistas.

Ahora bien, lo importante de estos entretelones develados es que han salido a la luz pública por declaraciones que han hecho los mismos golpistas, vale decir, Waldo Albarracín y Tuto Quiroga. No se trata de «elucubraciones» de los izquierdistas que siempre ven el «fantasma» de los gringos, en todos lados.

Los demás componentes del golpe ya son conocidos ampliamente por la opinión pública, pues obraron a cielo abierto, vale decir, el terror sembrado por los grupos paramilitares, el motín policial que abrió paso a estos grupos paramilitares y el «arreglo» con el ejército que propició el padre de Luís Fernando Camacho para que no reprimieran las protestas de los jailones y sus pititas, pero que a la vez masacraran las protestas de los humildes en Sacaba y Senkata. 

Ahí está el golpe completamente develado y las conexiones con sus promotores en el exterior.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.