Tenemos que construir una agenda de relaciones binacionales que ponga en el mismo nivel a todas las naciones y pueblos de la región, su centro las personas. Implica cambiar el modelo de relación binacional basado hoy en la militarización, exclusión y muerte.
La alianza entre la Alianza de Medios Independientes AMI, la Red Interuniversitaria por la Paz y el Grupo de Investigación Kavilando continúa profundizando sobre los temas relevantes de Nuestra América. En esta oportunidad Marco Castillo codirector de Global Exchange, nos brinda su reflexión sobre la crisis de la frontera EEUU-México una mirada desde los pueblos en lucha, quienes trazan agenda de acción 2023-2024 producto del acuerdo de la reciente Cumbre Binacional de los Pueblos por la Paz: México EEUU que busca presionar la agenda electoral binacional 2024.
La entrevista completa la puede ver y escuchar acá: https://youtu.be/NqFcimd-IY0 A continuación una versión editada para su lectura.
Alfonso Insuasty: (AI)
Bien sean, todos bienvenidos, bienvenidos a esta nueva emisión de entrevistas para profundizar sobre los problemas centrales de nuestra. La frontera entre Estados Unidos y México tiene toda una larga historia, marcada por episodios de violencia. Hoy tenemos unas tensiones fuertes entre los dos países y lo que podemos analizar pensando en el presente y el futuro desde los pueblos y de las organizaciones sociales que allí habitan. Migrantes, tráfico de drogas de uso ilícito, trata de personas, acaparamiento del agua, entre las múltiples problemáticas que tensionan las relaciones y que hace necesario que los pueblos se encuentren y busquen soluciones. Hace poco, en febrero de 2023, se realizó precisamente La Cumbre Binacional de los pueblos, convocada por las organizaciones sociales para tratar rutas de acción en torna a la anhelada Paz en la Frontera. ¿Cómo llegar a esa necesaria paz Fronteriza entre Estados Unidos y México desde la mirada de los pueblos? Para ahondar sobre este tema hemos invitado y agradecemos que nos haya aceptado la invitación a Marco castillo Codirector de Global Exchange., marco, gracias por aceptar la invitación y bienvenido.
Marco Castillo (MC)
Muchísimas gracias a ustedes. Por la oportunidad de conversar sobre estos temas.
AI: Bien Marco, cuéntanos sobre la Cumbre Binacional de los pueblos en la Frontera México Estados Unidos ¿Por qué se realizó? ¿qué se espera a mediano y largo palzo?
MC. Si, mira, esta realidad como tú mencionas, de la relación México – Estados Unidos y el tema de frontera es muy, muy compleja. Es una representación de la crisis que vive la región, es una franja territorial que representa algunas de las violaciones más graves a los derechos humanos, entonces por no hacerte la historia larga, solamente te diría que la frontera México, Estados Unidos, está diseñada para detener el flujo de personas, pero este modelo ha sido un rotundo fracaso para detener el flujo de fentanilo, de armas de los Estados Unidos hacia México, trata de menores, trata de personas, vale decir que esta esta frontera una de los puentes comerciales más grandes del mundo. Millones de transacciones en dólares diarias, entonces es una frontera que sólo está hecha para detener personas y violentar los derechos humanos de las personas que ahí transitan o que ahí viven.
Pero no sólo es la frontera, es toda la relación México – Estados Unidos, que está trastocada por la imposición de los EEUU que desde el período de Donald Trump obligó a México a detener a las personas migrantes que intentaban llegar a los Estados Unidos y desde entonces hemos visto una creciente política de criminalización, de detención y deportación por parte de México. Después de ser un país que por muchos años fue campeón de la hospitalidad, del asilo en Latinoamérica.
Así mismo, vemos que en México no se detienen los homicidios, estamos en los niveles más altos históricamente y el 70% de las armas recuperadas en escenas del crimen provienen de los Estados Unidos.
Lo mismo sucede con la crisis del Fentanilo, que es una gran crisis de usuarios en los Estados Unidos pero que es surtida desde las fronteras de México, donde muchas comunidades están produciendo obligadas por la pobreza y a la par, México se ha convertido en un puente de paso de drogas que vienen de otros países.
Es una realidad muy violenta, es una relación muy compleja y para nosotros resulta urgente cuestionar la forma en la que hasta ahora se orientan las relaciones binacionales y tratar de plantear un modelo nuevo.
El año que viene (2024) los dos países van a celebrar elecciones presidenciales y será un año fundamental para definir la continuidad de este modelo de muerte o el diálogo que permita la construcción de nueva relación.
AI: Marco es muy claro lo que estás diciendo, dinos ¿Cómo se preparó la cumbre Binacional? ¿Cómo llegan a la cumbre? ¿Cómo fue ese proceso previo para llegar a la cumbre?
MC: El objetivo metodológico y político que tuvo la cumbre fue tratar de poner las voces de las comunidades históricamente impactadas por la violencia regional y las voces de las comunidades históricamente marginadas de la discusión binacional, entonces por eso es que la cumbre fue todo un proceso de diálogo que comenzó en barrios y comunidades de Estados Unidos y de México, recorrimos desde el sur del Bronx hasta el sur de Los Ángeles, la frontera, México, las comunidades indígenas de México donde sesionamos, escuchamos las voces de las comunidades impactadas por la pobreza, por la violencia armada, por el tráfico de personas, por tráfico de drogas, por la migración forzada y entonces a partir de estos insumos constituimos un documento con más de 340 propuestas de todas estas comunidades con las que arribamos a la Cumbre por la Paz el pasado 23 y 24 de febrero de 2023 en México.
Ya en la Cumbre, pusimos en el centro de la discusión a comunidades indígenas, nativo americanas, afrodescendientes, afromexicanas, afroamericanas, afrocolombianas, que nos acompañaron durante estas sesiones, así como también a víctimas de la violencia Armada de México y de Estados Unidos.
En este sentido, tanto víctimas de este de violencia armada como víctimas comunitarias ocuparon el centro de la cumbre por la Paz y durante los dos días nos reunimos a discutir cuál es el futuro que queremos, cuáles son las propuestas para articularnos con una voz para fortalecer nuestras agendas mínimas de demandas para transformar la relación México – EE. UU.
Resultó muy claro que las comunidades de color, como se le llama en los Estados Unidos, están Unidas en el dolor, están Unidas en la historia de discriminación, pero que también están Unidas en la claridad de que tiene que cambiar la relación México, Estados Unidos, se debe tener como centro a las personas, por ahora lo que hacen es dividirlas. Sí, las divide en diferentes compartimientos en donde les impide unirse y este y en ese sentido es claro que la gente quiere vincularse para construir un futuro distinto.
AI: Bien hay un objetivo muy claro y es llegar con una agenda popular, una agenda organizativa y étnica a las próximas elecciones binacionales y esta agenda en términos de soluciones a los graves problemas que ahora describías bien llegan a la cumbre. En este sentido cuáles son las conclusiones y tareas trazadas en esta cumbre Binacional de los pueblos por la Paz.
MC: Por supuesto, bueno, mira, primero les comento que además de haber tenido un diálogo extenso y estratégico entre grupos que no se han reunido históricamente, tuvimos un diálogo con el Gobierno de México hicieron presencia distintos representantes del Gobierno con quienes dialogamos algunas de nuestras preocupaciones y de nuestros intereses con el objetivo de comprometerlos a tomar acciones inmediatas frente a esta realidad que pesa en la región.
Luego, además de este diálogo político, que esperamos que sea el primero de muchos, también, pues más bien articulamos una serie de plataforma que nos permitirán avanzar en acciones concreta de la agenda. Constituimos así, varias plataformas: de afrodescendientes, indígenas, nativo-americanos, de víctimas de la violencia, de periodistas entre otras. Estas plataformas van a discutir y van a impulsar acciones públicas, un activismo binacional estratégico, así como también se va a refinar una agenda que tendría que estar lista para hacerse pública en los próximos meses.
Entonces, tendríamos una agenda binacional y una suma de estrategias para impulsar esta agenda.
AI: Marco a la frontera llega buena parte de migrantes de toda Nuestra América, buscando mejores condiciones de vida, huyendo de la pobreza, huyendo del conflicto, es así como ¿Esta acción no se circunscribe sólo al componente Binacional, sino que tendrían una mirada también más regional?
MC: Sí, claro, mira, el asunto es bastante claro, la cumbre ha puesto en el centro la relación México Estados Unidos, porque a través de dicha relación se definen las políticas binacionales y de paso con toda Latinoamérica.
Estados Unidos ha intentado hacer de México su patio trasero, ha intentado mantener su bota militar encima de México y desafortunadamente en los tiempos de Trump pues, la administración del plan del Gobierno estadounidense logró impulsar una agenda y logró un avance trágico para nosotros los mexicanos y latinoamericanos, las consecuencias las está pagando toda Latinoamérica. Entonces para nosotros es bastante claro que Estados Unidos tiene que dejar de mirar al sur como su botín por un lado y por otro México tiene que solidarizarse y mirar hacia el sur, tiene que fortalecer la solidaridad latinoamericana.
Nuestros hermanos y hermanas en Latinoamérica tenemos que construir algún frente de lucha juntos que permita impulsar acciones para que Estados Unidos dé un paso hacia atrás, nos trate con respeto, nos trate como iguales y que se construye una agenda de relaciones binacionales que ponga en el mismo nivel a todas las naciones de la región y obviamente que ponga las personas impactadas por la violencia, a las comunidades, en el centro y no solo a los empresarios, las empresas de armas, las empresas mineras.
Entonces, esto de centrarse en la relación México, Estados Unidos es solo un paso estratégico frente a un problema más largo, más grande y complejo como es la relación de Estados Unidos con Latinoamérica, entonces, por supuesto que por eso tuvimos participación de gente de Honduras, de gente de Colombia, este que estuvo ahí como testigo, como escucha y también con la posibilidad de empezar a discutir cómo expandimos esta discusión hacia el sur.
AI: Hay una agenda que se está construyendo desde los pueblos ¿Cuáles serían los puntos claves a resaltar?
MC: Sí, claro, mira, en México hemos llegado a un punto muy desafortunado, muy doloroso y trágico en niveles de violencia y presencia de armas de gran calibre, el crimen organizado tiene gran capacidad de fuego y hoy se han expandido y diversificado pues se dedican a una amplia gama de negocios ilegales tráfico de drogas, trata de personas, migrantes, y bueno sus acciones como tu lo dices, también alimenta en ultimas negocios legales en EEUU.
Lo que quiero decir con esto, es que la Guerra que vivimos en nuestra región, en nuestros países, está justificando la presencia militar y esta presencia es inaceptable, no puede ser permanente, la gente expresa con claras evidencias que los cuerpos militares no cumplen una función de protección si no que cumplen la función de acentuar los conflictos, de acentuar la guerra, de responder al fuego con fuego y este responder a la violencia con violencia pues no permite atender problemas del ámbito civil.
Es el fracaso del diálogo político que ha obligado a que los militares estén en las calles frente a la gran capacidad de fuego que tienen los grupos del crimen organizado que hoy se dedican no sólo el tráfico de drogas, sino que están totalmente diversificados y expandidos, están metidos en los mercados ilegales, en el tráfico de personas, migrantes, etc., entonces, como tú lo dices, con sus acciones también alimentando una industria legal de EEUU.
Entonces el llamado que hace la cumbre es por la paz, quiere decir, discutir y encontrar las salidas urgentes a problemas centrales. Regresar al Ejército a sus cuarteles a cumplir sus funciones a que fueron mandatadas constitucionalmente y fortalecer la policía comunitaria barrial, la policía civil con un enfoque de Derechos Humanos.
Es muy claro que, desde la policía de Illinois de Chicago hasta la policía en el sur de México en Tapachula, comparten esta historia de criminalizar, de perfilar como criminales a ciertos grupos, actores y sectores. Articulados a la corrupción con sectores establecidos de la industria armamentista, de la industria de las drogas, entonces es necesario discutir el papel de los militares y de la policía.
Por otro lado, para desmilitarizar, necesitamos tener una discusión sobre la regularización de las drogas, un enfoque de salud mental, un enfoque de prevención a la violencia, invertir más en prevención de violencia en el sector educativo. Invertir también fuertemente en limitar los flujos de armas de los Estados Unidos a México, entonces hay muchas áreas que se tienen que trabajar de manera inmediata y no solamente es un tema de sacar militares a las calles para contener la violencia, se necesita regular los flujos migratorios, se necesita legalizar, se necesita reconocer el derecho de los pueblos, se necesita a tener un enfoque de salud comunitaria, de salud mental para prevenir y trabajar con las adicciones. Y así es cómo podemos dar pasos a cambiar el modelo.
AI: Perfecto. Marco, La CELAC hace poco retomó y recordó el mandato de hacer de la región una zona de paz. ¿Estaríamos en la misma lógica, en la misma sintonía?, ¿de qué Paz estamos hablando?
MC: Por supuesto, estamos hablando de múltiples Paces. Por supuesto que lo que la cumbre concluye está muy en consonancia con las conclusiones de la CELAC y, por supuesto que miramos una oportunidad de fortalecer la colaboración sur – sur, la colaboración de México, Centro y Sudamérica para tratar de hacer un contrapeso al enfoque militarista que Estados Unidos siempre está impulsando en la región.
Me parece que la narrativa de la CELAC es una narrativa que está en consonancia con muchas de las cosas que la cumbre por la Paz propone y también hay que reconocerlo, parte del Gobierno de México también se han hermanado con la CELAC, que están en consonancia con la CELAC. Nosotros lo que queremos es sumar, en donde haya llamados hacia la paz y la justicia allí estaremos. Creemos que hay otro camino cuando se pone la militarización como la única vía posible, entonces ahí solamente quiero agregarte este anuncio que mucha gente nos comentaba porque hay mucha frustración en el ambiente.
Mucha gente nos decía, hablar de Paz es un tema hippie, es un tema de los sesenta en los tiempos de la guerra de Vietnam, ahorita el lema es no hay Paz si no hay justicia. Estamos en un momento de combate, estamos en un momento no solo de resistencia, sino tenemos que dar pasos hacia adelante porque el gobierno del Estado, los poderes fácticos no van a ceder ni un ápice. Si nosotros solamente convocamos a la Paz y no luchamos por la justicia social pues no hacemos nada, la vía para alcanzar la justicia siempre está vinculado a la Paz, no es elegir una, no es elegir la otra, ambos caminos se tienen que explorar. Ahora bien, la lucha por la justicia social requiere capacidad de diálogo, capacidad de interpelación.
Nosotros lo que queremos es ganar y en ese sentido creemos en el diálogo. La Paz para nosotros es sinónimo de dialogo, dialogo entre actores de la sociedad civil, con actores religiosos, políticos, económicos, pero dialogo franco, incómodo, donde se diga lo que se tenga que decir, se demande lo que se tenga que demandar y también que se vayan encontrando los acuerdos que se tengan que encontrar. El diálogo no se puede perder porque cuando el diálogo se muere es cuando la guerra inicia y la guerra es algo que no conviene absolutamente a nadie. Estamos en medios de la guerra en Ucrania y estamos al borde de la guerra gracias al desastre que ha provocado el pésimo diálogo entre Estados Unidos y Rusia y China. Necesitamos darnos cuenta de que si no le apostamos al diálogo, guerra se nos viene y se nos viene para acá.
AI: No puedo irme sin hacerte una pregunta en relación con Colombia y allí el papel de la OTAN. En nuestra América estamos pensando en transitar hacia condiciones de paz y abriendo escenarios de negociación. ¿Pero teniendo una alianza con la OTAN? ¿qué piensan de eso?
MC: Sí, claro, históricamente esta alianza ha demostrado ser una alianza al servicio de los intereses de los Estados Unidos.
Nunca ha sido una alianza que sostenga, que apoye o que impulsa una agenda latinoamericanista. Y bueno, pues ahora quedó en evidencia una vez más en el conflicto entre Ucrania y Rusia.
EEUU Chantajea a la mitad del mundo para exigirle que se sume a su llamado por vía de la OTAN y al mismo tiempo nos damos cuenta cómo el fin último es fortalecer los negocios de EEUU con la justificación de la guerra.
Cortándole el abasto de gas ruso a Europa, haciéndoles que pasarán un invierno de infierno y obligándolos a consumir recursos naturales de los Estados Unidos, otra vez en los números indican con claridad cómo es que la guerra es un negocio del que saca mucha ventaja los Estados Unidos, la cantidad de armamento que se ha vendido en estos meses en monumental, la cantidad de armamento que ha fluido hacia Europa, Asia, América Latina. En este sentido latinoamericano tiene nada que hacer en esas alianzas, y al contrario, tiene mucho que hacer cuestionando esos modelos de bloques armamentistas.
AI: Bien, para terminar ¿qué sigue de ahora en adelante en el desarrollo de la agenda de la cumbre? Y ¿cuál el mensaje para las organizaciones sociales, populares, étnicas para el desarrollo e implementación de esta agenda?
MC: Sí, claro, pues el único mensaje que yo tendría es que estamos viviendo tiempos muy difíciles, México, el propio Estados Unidos, Colombia están viviendo momentos de muchísima tensión política, entre otras razones en las redes sociales, la toxicidad del del ambiente político, los ultra conservadurismo, las narrativas políticas en nuestra querida continente hoy están muy afectadas por el odio, muy infectadas por la violencia, por el odio racial, por el odio anti inmigrante y estamos corriendo riesgos del resurgimiento de conflictos que se pensaban superados en la región.
Estados Unidos ha reconocido que su principal amenaza terrorista son las comunidades blancas ultraconservadoras, que se están fortaleciendo frente al estado democrático. Bueno, seudodemocrático, y lo mismo sucede en México, se han fortalecido grupos de extrema derecha, Colombia puede surgir lo mismo frente al actual gobierno de Gustavo Petro que igual que México, aunque sean presidencia, el centro, la derechos y extrema derecha siguen generando justificantes para llamarlos comunistas, come niños, caníbales, como lo hizo Trump y como lo hizo Bolsonaro sobre Lula.
Entonces estamos viviendo una polarización sin precedentes, en donde quienes pierden siempre van a ser los pueblos, los pobres, las comunidades, la sociedad de a pie y quienes van a ganar de una tensión siempre van a ser las élites políticas, las industrias privadas, en este sentido, como sociedad civil no podemos esperar que el gobierno sea quien recupere la cordura, el diálogo y el enfoque de Justicia.
Nos toca a nosotros organizarnos para ponernos al frente y decir basta de estas pugnas entre élites, respeto a los derechos de las personas y ser capaces de construir agendas que nos permiten a nosotros ocupar los espacios de lo público y de lo político.
AI: Bien, es el momento de articular las luchas desde abajo para construir otros mundos posibles que ya existen, solo que hay que hacerlos ver valer, potenciar, articular. Marco muchas gracias por este espacio, por tu tiempo.
Nota: En el mes de mayo 2023 se hará lanzamiento público de la agenda de los pueblos Binacional por la Paz (2023.24) resultante del trabajo mandatado por la Cumbre Binacional y desarrollado por comisiones.
Alfonso Insuasty Rodríguez es docente investigador Universidad de San Buenaventura Medellín (Colombia) integrante del grupo autónomo Kavilando www.kavilando.org
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.