Más de alguna reminiscencia nos produce todo el trabajo musical cultivado por Illapu, pues tuvimos la oportunidad de conocerlos cuando recien llegaron a la ciudad de Santiago (1971), capital de Chile, para grabar su primer disco para la Discoteca del Cantar Popular (DICAP), después de que el grupo ganara el Festival de la Canción de […]
En ese entonces, Chile vivía intensamente su proceso de cambio, estaba construyendo ese mundo posible, en donde las lacras sociales del sistema capitalista,fueran desterradas definitivamente. Sin embargo, el cruento golpe de Estado de septiembre 1973, puso fin transitoriamente a esos sueños; y en el plano de la música con raíces en la tierra misma, lanza al exilio a Illapu y a otros protagonistas del movimiento musical de la Nueva Canción Chilena.
Los Illapu graban su primer disco que lleva por nombre «Illapu, música Andina», en donde destaca el tema «Pajaro campana», que de una u otra manera se va imponiendo en las radioemisoras chilenas, para transformarse en un gran éxito musical y junto con ello, la revelación musical de Illapu. La responsabilidad de promover su primer disco, recayó en el destacado locutor nacional, Miguel Davagnino, del periodista uruguayo Julio Lubetkin y de quien escribe está nota.
Si bien es cierto, la música con raíces andinas había comenzado a calar en la gente con grupos como Curacas, Inti Illimani o Quilapayun, con la irrupción de Illapu, se masifica y consolida este nuevo sonido musical que se encontraba rezagados en las postrimerías de lo autóctono.
Ahora el grupo chileno Illapu comenzó celebrando sus 33 años de carrera artística con un recital en el Teatro de la Ciudad, en la capital mexicana. Ante poco más de mil personas, el grupo creado en 1971 y liderado por Roberto Márquez, presentó lo más destacado de su trayectoría discográfica, en la que destacan sus letras con una poesía que reflejan determinadas realidades sociales.
Canciones como Pajaro campa, Tu propia primavera, Paloma Ausente, Lejos del amor, Negro José y Hermana de las gaviotas pusieron a cantar y a bailar al público. Con una presentación de casi dos horas, Illapu también interpretó algunas de las canciones de su disco más reciente, titulado «Ojos de niño».
El Teatro de la Ciudad, con capacidad para 1.300 personas, se vio colmado en su totalidad por incondicionales del grupo que bailaron y corearon todos los temas. Illapu (rayo de luz, en quechua) mantiene fuertes lazos amistosos con México, donde vivieron exiliados más de seis años durante la dictadura de Pinochet, actualmente se encuentran residiendo en el país azteca.
Como es su costumbre, el grupo interpretó sus temas acompañado de una gran variedad de instrumentos de distintos orígenes,especialmente altiplánicos y que han hecho de su música,un estilo muy particular. El exilio forzoso que tuvieron que vivir Los Illapu, les permitió además, que su obra musical fuera conocida en los más diversos escenarios del mundo.
El grupo que fuera fundado por los hermanos Márquez, recientemente y con motivo del Festival de la Canción de Viña del Mar, uno de ellos, Roberto Márquez, manifestó a la prensa que «el Festival cumplió unos roles muy vergonzosos para el pueblo chileno durante la dictadura de Pinochet. Nosotros sí somos críticos de ese espacio, pero también reconocemos que es una gran ventana para la música. Debería ser una vitrina para los musicos chilenos (donde) compartiéramos el espacio con los músicos de otras nacionalidades, no que nosotros lucháramos por figurar en un lugar que cada día es menos chileno»,afirmó.
Illapu, prácticamente desde sus comienzos en su creación musical a abordados temas que están relacionados con problemas emergentes y urgentes de Chile, América latina y el mundo.
En estos 33 años dedicado a la música que nace del pueblo mismo, el grupo ha conjugado sus raíces altiplánicas latinas, con elementos propios del jazz, además de armonías y contrapuntos cuyos origenes son la música clásica. Tampoco ha estado ausente dentro de su busqueda musical los sonidos del rock y la música afrocaribeña. Lo que permite un enriquecimiento cada vez mayor, de su propio estilo musical.
Pero Illapu, no es sólo eso, puesto que la mayor parte de los textos de sus canciones son escritos de forma colectiva, pero también incorporan a sus canciones, letras de grandess poetas como Roque Dalton, el uruguayo Mario Benedetti, el gran Pablo Neruda y otros.
El grupo Illapu, espera poder culminar este itinerario de conciertos celebrando sus 33 años dedicados al canto popular, en los escenarios que el pueblo chileno los vió nacer. Por lo pronto, el 31 de marzo el grupo realizará un concierto en el Performing Art Centre Herzelia (Israel), para luego, el 9 de abril realizar presentaciones en el Centro Cívico Les Basses de la ciudad de Barcelona, España.