1. El Fondo Monetario Internacional (FMI) afirmó este sábado que el proceso de reformas en el que México se ha encaminado, está sentando las bases para que el país experimente altas tasas de crecimiento en el mediano plazo. El desempeño que la economía mexicana puede experimentar en los próximos seis o siete meses debe […]
1. El Fondo Monetario Internacional (FMI) afirmó este sábado que el proceso de reformas en el que México se ha encaminado, está sentando las bases para que el país experimente altas tasas de crecimiento en el mediano plazo. El desempeño que la economía mexicana puede experimentar en los próximos seis o siete meses debe ser visto como un factor del todo relevante. Si bien la proyección del fondo en el crecimiento para este año se mantiene por abajo de 3.0 por ciento, contrario a las proyecciones del gobierno mexicano, los indicadores en el corto plazo apuntan a ser favorables. «C omo México es el más integrado a Estados Unidos, su crecimiento podría desacelerarse a niveles de 2.0 por ciento este año y el siguiente, es natural esperar que será afectado». Las proyecciones del FMI para 2007 y 2008 apuntan a un crecimiento de 2.9 y 3.0 por ciento; el gobierno de Calderón cree que será al 3.0 y 3.7 por ciento.
2. Con esa declaración el FMI trata de respaldar la política económica del gobierno usurpador de Felipe Calderón. Señala que «está sentando las bases» para que en unos seis o siete años se «experimente altas tasas de crecimiento» que, al parecer, no serán para este sexenio. Sin embargo el FMI no cuenta con argumentos firmes para su planteamiento: 1. Porque la economía de los EEUU está en franca declinación desde hace ya varias décadas y 2. Porque las llamadas «reformas estructurales», que no son otra cosa que la aprobación por el legislativo de la privatización del petróleo, la electricidad, de los servicios de salud y las pensiones, las reformas a la ley del trabajo, etcétera, serán evitadas por la movilización de la población. Pareciera que esa declaración fue impulsada por el gobierno de Calderón para tapar su nefasta política económica que ha provocado mayor desempleo y descarado aumento de precios.
3. Sin embargo, hace apenas dos días, La Jornada publicó que el FMI estimó que el producto interno bruto (PIB) de México crecerá 2.9 por ciento en 2007 y que para 2008, según el reporte divulgado hoy, anticipó un crecimiento de la economía mexicana de 3 por ciento, medio punto porcentual menos que el 3.5 por ciento que había anticipado hace seis meses. México se ubicará a la zaga del crecimiento en el contexto de América Latina en 2007 cuando crecerá a una tasa de 5 por ciento, el mismo nivel esperado en la última revisión de pronósticos del FMI; mientras en 2008 lo hará en 4.3 por ciento. Por país, el crecimiento de México en 2007 será el segundo más bajo, arriba del de Ecuador, estimado por el organismo en 2.7 por ciento, pero muy debajo de los que alcanzarán Venezuela, con 8 por ciento; Argentina, 7.5 por ciento; y también menor al 4.4 por ciento previsto para Brasil. ¿Por qué trató de componer el FMI su declaración hoy?
4. El FMI, como organismo de la ONU con sede en Washington, se creó en 1944 para asegurar la cooperación monetaria y estabilizar políticas de economía internacional; sin embargo muy pronto cambiaron sus funciones. Hoy se dedica a la concesión de créditos a países con dificultades económicas, siempre que los países interesados se encuentren dispuestos a aceptar reformas económicas controladas. Esos organismos como FMI, el Banco Mundial o el Banco Interamericano de Desarrollo, son enormes negocios controlados desde Washington por los más grandes capitales internacionales encabezados por el gobierno de los EEUU. Una junta de magnates es la que decide a quién se dan préstamos, qué cantidad, con cuántos intereses y con qué condiciones. El enorme poder de Norteamérica durante casi todo el siglo XX se cifró en su poderío militar y en la dependencia económica que creó después de las guerras mundiales.
5. A finales de 1982 México enfrentaba una gran crisis y para ello el FMI pasó a ejercer el control total de su economía. La recesión mexicana se había extendido, la inflación llegaba a tres dígitos, el déficit presupuestal llegaba al 20 por ciento del PIB, ya no se podía utilizar deuda externa, etcétera. Al iniciarse 1983 el presidente De la Madrid tuvo que imponer un programa de ajuste para controlar la economía. Se impusieron reformas orientadas a la exportación abierta a la economía mundial, menos estatificada, basada en las fuerzas del mercado y donde la inversión privada fuera el motor de la economía. Apertura unilateral, flexibilidad a las inversiones privadas, creación de un sistema financiero privado al lado de la banca nacionalizada. Para reafirmar esa política se firmo una «Carta de Intención» con el FMI para que haga las «revisiones requeridas para racionalizar el sistema de protección».
6. Con esa soga yanqui en el cuello de los mexicanos cualquier resfriado gringo representa una poderosa pulmonía para nuestro país. La economía de los EEUU nunca ha sido sana porque ese país siempre ha estado metido en invasiones y guerras. Su permanente búsqueda de petróleo y demás recursos naturales, como objetivos y medios para controlar en mundo, ha hecho que su economía dependa de la economía de guerra y de su poderosa industria de las armas. Al salir victorioso de las dos guerras mundiales de la primera mitad del XX, pero sobre todo después de arrojar las bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki, los EEUU pudieron imponer planes económicos de endeudamiento a los países destruidos y demostrar ante el mundo a qué fuerza tenían que someterse. Sin embargo, después de su derrota en Vietman los yanquis comenzaron a declinar al mismo ritmo que su economía frente a Japón, Europa y ahora China.
7. Pero lo terrible es que México, colgado de los EEUU, ha comenzado a desplomarse junto a él y pareciera que no es posible otra política. Nuestro comercio, desde hace muchas décadas, lo hemos realizado en un porcentaje de 70 a 80 por ciento con Norteamérica. Los gobiernos mexicanos, en vez de estudiar, de pensar en diversificar sus mercados hacia otros continentes e impulsar inversiones desde diferentes países en condiciones de igualdad, han preferido (durante el siglo XX y lo que va del XXI) subordinarse a los intereses del poder económico y militar del vecino del norte. Por eso y otras cosas como la migración de medio millón de mexicanos al año, los estados nos han convertido en su «traspatio», en su basurero, en un gobierno que debe andar agachado y sumiso a sus intereses como país policía mundial. Por eso el FMI, con su declaración, busca dar un espaldarazo a un presidente que día tras día se debilita.
8. Contrario al «mediano plazo» que declara el FMI para que México (imponiendo las llamadas «reformas estructurales») comience su crecimiento, lo que puede vislumbrase de manera objetiva es que EEUU ha caído en un proceso de derrumbe económico imparable. En tanto que países como China e India han logrado crecer en la última década arriba del 10 por ciento y extienden sus mercados rápidamente los EEUU (que no crecen al tres por ciento) sólo han tratado a obligar a China a revaluar su moneda para frenar su penetración comercial en el mundo, sino que el mismo Dólar ha caído frente al Euro de uno a uno y medio de su valor. Y tras esa gigantesca devaluación del Dólar se ha colgado la devaluación de nuestro Peso mexicano frente al Euro y otras monedas asiáticas. La insistencia para las llamadas «reformas estructurales», de parte de gobierno y empresarios, podrá convertirse es una chispa que llegue a incendiar la pradera.
MÉXICO CRECERÁ SI PRIVATIZA MÁS Y SE INTEGRA MEJOR A LOS EEUU: FMI
1. El Fondo Monetario Internacional (FMI) afirmó este sábado que el proceso de reformas en el que México se ha encaminado, está sentando las bases para que el país experimente altas tasas de crecimiento en el mediano plazo. El desempeño que la economía mexicana puede experimentar en los próximos seis o siete meses debe ser visto como un factor del todo relevante. Si bien la proyección del fondo en el crecimiento para este año se mantiene por abajo de 3.0 por ciento, contrario a las proyecciones del gobierno mexicano, los indicadores en el corto plazo apuntan a ser favorables. «C omo México es el más integrado a Estados Unidos, su crecimiento podría desacelerarse a niveles de 2.0 por ciento este año y el siguiente, es natural esperar que será afectado». Las proyecciones del FMI para 2007 y 2008 apuntan a un crecimiento de 2.9 y 3.0 por ciento; el gobierno de Calderón cree que será al 3.0 y 3.7 por ciento.
2. Con esa declaración el FMI trata de respaldar la política económica del gobierno usurpador de Felipe Calderón. Señala que «está sentando las bases» para que en unos seis o siete años se «experimente altas tasas de crecimiento» que, al parecer, no serán para este sexenio. Sin embargo el FMI no cuenta con argumentos firmes para su planteamiento: 1. Porque la economía de los EEUU está en franca declinación desde hace ya varias décadas y 2. Porque las llamadas «reformas estructurales», que no son otra cosa que la aprobación por el legislativo de la privatización del petróleo, la electricidad, de los servicios de salud y las pensiones, las reformas a la ley del trabajo, etcétera, serán evitadas por la movilización de la población. Pareciera que esa declaración fue impulsada por el gobierno de Calderón para tapar su nefasta política económica que ha provocado mayor desempleo y descarado aumento de precios.
3. Sin embargo, hace apenas dos días, La Jornada publicó que el FMI estimó que el producto interno bruto (PIB) de México crecerá 2.9 por ciento en 2007 y que para 2008, según el reporte divulgado hoy, anticipó un crecimiento de la economía mexicana de 3 por ciento, medio punto porcentual menos que el 3.5 por ciento que había anticipado hace seis meses. México se ubicará a la zaga del crecimiento en el contexto de América Latina en 2007 cuando crecerá a una tasa de 5 por ciento, el mismo nivel esperado en la última revisión de pronósticos del FMI; mientras en 2008 lo hará en 4.3 por ciento. Por país, el crecimiento de México en 2007 será el segundo más bajo, arriba del de Ecuador, estimado por el organismo en 2.7 por ciento, pero muy debajo de los que alcanzarán Venezuela, con 8 por ciento; Argentina, 7.5 por ciento; y también menor al 4.4 por ciento previsto para Brasil. ¿Por qué trató de componer el FMI su declaración hoy?
4. El FMI, como organismo de la ONU con sede en Washington, se creó en 1944 para asegurar la cooperación monetaria y estabilizar políticas de economía internacional; sin embargo muy pronto cambiaron sus funciones. Hoy se dedica a la concesión de créditos a países con dificultades económicas, siempre que los países interesados se encuentren dispuestos a aceptar reformas económicas controladas. Esos organismos como FMI, el Banco Mundial o el Banco Interamericano de Desarrollo, son enormes negocios controlados desde Washington por los más grandes capitales internacionales encabezados por el gobierno de los EEUU. Una junta de magnates es la que decide a quién se dan préstamos, qué cantidad, con cuántos intereses y con qué condiciones. El enorme poder de Norteamérica durante casi todo el siglo XX se cifró en su poderío militar y en la dependencia económica que creó después de las guerras mundiales.
5. A finales de 1982 México enfrentaba una gran crisis y para ello el FMI pasó a ejercer el control total de su economía. La recesión mexicana se había extendido, la inflación llegaba a tres dígitos, el déficit presupuestal llegaba al 20 por ciento del PIB, ya no se podía utilizar deuda externa, etcétera. Al iniciarse 1983 el presidente De la Madrid tuvo que imponer un programa de ajuste para controlar la economía. Se impusieron reformas orientadas a la exportación abierta a la economía mundial, menos estatificada, basada en las fuerzas del mercado y donde la inversión privada fuera el motor de la economía. Apertura unilateral, flexibilidad a las inversiones privadas, creación de un sistema financiero privado al lado de la banca nacionalizada. Para reafirmar esa política se firmo una «Carta de Intención» con el FMI para que haga las «revisiones requeridas para racionalizar el sistema de protección».
6. Con esa soga yanqui en el cuello de los mexicanos cualquier resfriado gringo representa una poderosa pulmonía para nuestro país. La economía de los EEUU nunca ha sido sana porque ese país siempre ha estado metido en invasiones y guerras. Su permanente búsqueda de petróleo y demás recursos naturales, como objetivos y medios para controlar en mundo, ha hecho que su economía dependa de la economía de guerra y de su poderosa industria de las armas. Al salir victorioso de las dos guerras mundiales de la primera mitad del XX, pero sobre todo después de arrojar las bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki, los EEUU pudieron imponer planes económicos de endeudamiento a los países destruidos y demostrar ante el mundo a qué fuerza tenían que someterse. Sin embargo, después de su derrota en Vietman los yanquis comenzaron a declinar al mismo ritmo que su economía frente a Japón, Europa y ahora China.
7. Pero lo terrible es que México, colgado de los EEUU, ha comenzado a desplomarse junto a él y pareciera que no es posible otra política. Nuestro comercio, desde hace muchas décadas, lo hemos realizado en un porcentaje de 70 a 80 por ciento con Norteamérica. Los gobiernos mexicanos, en vez de estudiar, de pensar en diversificar sus mercados hacia otros continentes e impulsar inversiones desde diferentes países en condiciones de igualdad, han preferido (durante el siglo XX y lo que va del XXI) subordinarse a los intereses del poder económico y militar del vecino del norte. Por eso y otras cosas como la migración de medio millón de mexicanos al año, los estados nos han convertido en su «traspatio», en su basurero, en un gobierno que debe andar agachado y sumiso a sus intereses como país policía mundial. Por eso el FMI, con su declaración, busca dar un espaldarazo a un presidente que día tras día se debilita.
8. Contrario al «mediano plazo» que declara el FMI para que México (imponiendo las llamadas «reformas estructurales») comience su crecimiento, lo que puede vislumbrase de manera objetiva es que EEUU ha caído en un proceso de derrumbe económico imparable. En tanto que países como China e India han logrado crecer en la última década arriba del 10 por ciento y extienden sus mercados rápidamente los EEUU (que no crecen al tres por ciento) sólo han tratado a obligar a China a revaluar su moneda para frenar su penetración comercial en el mundo, sino que el mismo Dólar ha caído frente al Euro de uno a uno y medio de su valor. Y tras esa gigantesca devaluación del Dólar se ha colgado la devaluación de nuestro Peso mexicano frente al Euro y otras monedas asiáticas. La insistencia para las llamadas «reformas estructurales», de parte de gobierno y empresarios, podrá convertirse es una chispa que llegue a incendiar la pradera.