1. Morena es un partido burocrático muerto porque el presidente parece hacerlo todo. Al contrario, debe salir de su tumba para demostrar que es el partido más fuerte y más capaz de México ahora que el presidente López Obrador ha declarado su independencia diciendo que no va a favorecer a nadie porque ahora sirve a […]
1. Morena es un partido burocrático muerto porque el presidente parece hacerlo todo. Al contrario, debe salir de su tumba para demostrar que es el partido más fuerte y más capaz de México ahora que el presidente López Obrador ha declarado su independencia diciendo que no va a favorecer a nadie porque ahora sirve a todos. López Obrador obtuvo muchos millones de votos, pero de la noche a la mañana los puede perder con un mal movimiento. ¿Por qué Morena no encabeza todas las protestas y luchas justas de los trabajadores convirtiéndose, además de un poderoso tribuno, en un solucionador y tramitador de las necesidades de los trabajadores? Eso sería hacer política: el crecimiento movimiento Morena crítico en las calles con el pueblo.
2. Si el presidente López Obrador requiere ayuda de su partido, para responder al acelerado reagrupamiento del PAN, sus acólitos y los empresarios, con el único objetivo de derrocarlo, pues debe permitir que Monreal, Encinas, Noroña o Salgado -dirijan Morena. Las bellas mujeres (Yelcol, Luján, Tatiana y demás) les falta mucho carácter, arrojo, voz, para polemizar, así como para lanzar a las calles a los Morenistas para demostrar a conservadores, derechistas, chayoteros, dónde está el pueblo y porqué. Morena debe demostrar combatividad, exigencia, lucha por los derechos del pueblo. ¿Se olvida que el PRI y el PAN hacían concentraciones que parecían peregrinaciones muy organizadas que sólo servían para agradecer y halagar a sus funcionarios?
3. Pero, si el presidente López Obrador no necesita a su partido porque «ahora sirve a todos por igual», pues sencillo: que lo deje morir, que lo entregue a manos de sus amigas para que se vea muy feminista y muy plural. El problema es que Morena siempre ha estado muerto -desde que nació- porque el 100 por ciento del apoyo y de los votos los ha tenido López Obrador que durante 18 años trabajó sin descanso visitando todas las comunidades de México en tres ocasiones. Por el contrario, nadie en México del PRI, PAN, de ningún partido en la historia, hizo cosa tan grande. Monreal y Encinas son políticos de carrera que han demostrado que tienen todos los elementos para que Morena se transforme en el partido más poderoso del país.
4. Con la fuerza de ahora de López Obrador y con un partido movilizado, todos los conservadores, derechistas, empresarios y medios de información dejarían de hablar y reclamar tonterías y bobadas, así como hablar de pobreza y corrupción que ellos mismos crearon y silenciaron durante 35 años. Quizá un partido fuerte en las calles, exigiendo justicia verdadera, obligaría a López Obrador a meter a prisión a por los menos 200 ladrones y corruptos -encabezados por las expresidentes- que le han arrebatado al pueblo su seguridad, su bienestar y su vida. Si Morena sigue muerto como hasta hoy, López Obrador seguirá luchando solito dependiendo de la fuerza de sus adversarios. Incluso el mismo Trump sabría que el pueblo está dispuesto a pelear por sus derechos.
5. Espero que a los siete meses de gobierno de AMLO no se hayan iniciado al interior de Morena los golpes bajos, los bloqueos, la precampaña presidencial. Lo que Morena debe demostrar es que existe, que es un partido vivo y que sus dirigentes son gente con capacidad superior a los del PRI o PAN; que son capaces para sustentar discusiones políticas/ideológicas y de convencer. ¿Cómo es eso que no hayan logrado hacer alianzas con gente del EZLN, con los Sicilias, sobre todo con la CNTE y corrientes radicales del estudiantado? Ese es el papel del partido que mediante alianzas con organizaciones sale a la calle a apoyar y exigir derechos. Si Morena existiera y fuera combativo, superaría que PRI y PAN encabecen reclamos de empleados y trabajadores.
6. Al interior de Morena debe haber lucha política, sobre todo ideológica. Todos los problemas políticos, económicos, históricos, que se presenten deben ser intensamente analizados y discutidos en cientos de asambleas y reuniones -sobre todo en círculos de estudio y seminarios. Si éstos no están organizados es urgente hacerlo. ¿Entienden, saben, por lo menos los de Morena que es un partido conservador, derechistas, reaccionario, neoliberal, de que tanto habla López Obrador? ¿Saben por lo menos que la corrupción no es una causa sino el efecto de la desigualdad, del autoritarismo, de la acumulación de poder en una minoría y de la miseria y el hambre en más de la mitad de nuestro pueblo? Es urgente la educación política e ideológica.
Blog del autor: http://pedroecheverriav.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.