Las bajas estadounidenses en Irak continúan aumentando y el 2007 se ha convertido para Washington en el peor año que han vivido sus tropas en el caótico país desde que comenzó la invasión. La muerte de cinco soldados el lunes ha llevado la cifra de militares fallecidos a 854, superando a la peor cifra registrada […]
Las bajas estadounidenses en Irak continúan aumentando y el 2007 se ha convertido para Washington en el peor año que han vivido sus tropas en el caótico país desde que comenzó la invasión. La muerte de cinco soldados el lunes ha llevado la cifra de militares fallecidos a 854, superando a la peor cifra registrada hasta ahora de 849 muertes en 2004.
Según la cadena estadounidense CNN, que cita datos del Pentágono, las cifras totales de los militares que han muerto en Irak ascienden a 3.857, incluidos siete contratistas del Departamento de Defensa. La situación luce desalentadora, a pesar de que el gobierno del presidente George W. Bush ha tratado de mostrarse optimista al afirmar la semana pasada que la cantidad de muertes ha bajado en los últimos meses.
Las cinco muertes del lunes fueron a causa de dos ataques separados. Cuatro de los soldados murieron tras una explosión cuando pasaba su vehículo por un camino en la provincia norteña de Tameem y otro cayó durante un combate en la provincia de Anbar.
Según la CNN, la alta cifra de muertes se debe a la persecución más decidida de los insurgentes en Bagdad y sus alrededores. Los peores meses han sido abril, con 104 muertos, mayo con 126, y junio con 101 fallecidos.