Los ataques contra las tropas estadounidenses, las fuerzas de seguridad y los civiles iraquíes registraron un aumento brusco durante los últimos tres meses en comparación con el trimestre anterior, reveló el Pentágono. El incremento de la violencia en Irak fue dado a conocer en un informe trimestral dirigido al Congreso en el mismo día en […]
Los ataques contra las tropas estadounidenses, las fuerzas de seguridad y los civiles iraquíes registraron un aumento brusco durante los últimos tres meses en comparación con el trimestre anterior, reveló el Pentágono.
El incremento de la violencia en Irak fue dado a conocer en un informe trimestral dirigido al Congreso en el mismo día en que Robert Gates asumía formalmente como secretario de Defensa en sustitución de Donald Rumsfeld, cuya gestión en la guerra fue duramente criticada.
El Pentágono indicó que desde mediados de agosto a mediados de noviembre, la cifra media semanal de ataques aumentó el 22% en comparación con los tres meses anteriores.
El informe también señaló que se ha registrado un aumento de las bajas civiles como consecuencia directa de la mayor participación de escuadrones de la muerte sectarios que reciben ayuda de elementos dentro de las fuerzas iraquíes.
La media de ataques por semana aumentó a 959 en los últimos tres meses, desde los 784 registrados en los tres meses anteriores, manifestó.
«Los niveles de ataques, en general y en todas las categorías específicas, fueron los mayores registrados en este período», indicó el informe, titulado ‘Medición de la estabilidad y la seguridad en Irak’.
El informe también señaló que el fracaso de los esfuerzos del Gobierno iraquí para poner fin a la violencia sectaria ha afectado a la confianza de los iraquíes en su futuro.
Según los expertos, esa conclusión refleja las dudas del Gobierno del presidente George W. Bush acerca de la capacidad del primer ministro, Nuri al-Maliki, de tomar las decisiones que, según las autoridades estadounidenses, se necesitan para poner fin a la violencia.