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Las autoridades iraquíes investigan las denuncias de fraude electoral en al-Anbar

Fuentes: Gara

El viceprimer ministro iraquí, el suní Rafaa al-Issaui, reclamó ayer un nuevo recuento de los votos en la provincia de al-Anbar y el procesamiento judicial de sus responsables tras las acusaciones de fraude a favor del Partido Islámico Dawa, la formación chií que lidera el primer ministro, Nuri al-Maliki, realizadas por jefes tribales, que amenazaron […]

El viceprimer ministro iraquí, el suní Rafaa al-Issaui, reclamó ayer un nuevo recuento de los votos en la provincia de al-Anbar y el procesamiento judicial de sus responsables tras las acusaciones de fraude a favor del Partido Islámico Dawa, la formación chií que lidera el primer ministro, Nuri al-Maliki, realizadas por jefes tribales, que amenazaron con tomar las armas si el fraude no se reconoce.

«El fraude existe, lo que ignoramos es su amplitud, ya que la comisión electoral está en manos del Partido Islámico», señaló el diputado Saleh al-Mutlak, quien exigió que se reexamine la composición de la comisión electoral para que «nuestro adversario no sea al mismo tiempo el árbitro». Los adversarios del Partido Islámico Dawa acusan al presidente de la comisión electoral de haber manipulado el recuento de votos para favorecer la victoria de esta lista en al-Anbar.

La comisión electoral recibió por parte de líderes tribales una gran cantidad de denuncias de fraude y de otras violaciones en la mayoritariamente suní al-Anbar, confirmó Faraj al-Haidari, el funcionario electoral de más alto rango en Irak.

Los comicios provinciales celebrados el sábado fueron los más pacíficos que han tenido lugar en Irak desde el inicio de la invasión liderada por EEUU, en abril de 2003. No obstante, en al-Anbar se produjeron tensiones entre suníes, que habían boicoteado las elecciones de 2005, y los partidos que han gobernado la provincia en los últimos años.

«Algunas acusaciones son graves y podrían ser consideradas `rojas’. Verificaremos las denuncias sobre el terreno», indicó al-Haidari. «Rojo» es el término para referirse a denuncias que podrían alterar el resultado de la votación.