El pasado día 14 de abril, en el marco de la Fiesta del Partido Comunista de Andalucía, se celebró un tribunal antiimperialista que condenó las agresiones contra diversos pueblos del mundo, entre ellos Iraq. El tribunal sobre Iraq estuvo formado por François Houtart, presidente del tribunal, destacado sociólogo y especialista en Derechos Humanos con amplia […]
El pasado día 14 de abril, en el marco de la Fiesta del Partido Comunista de Andalucía, se celebró un tribunal antiimperialista que condenó las agresiones contra diversos pueblos del mundo, entre ellos Iraq.
El tribunal sobre Iraq estuvo formado por François Houtart, presidente del tribunal, destacado sociólogo y especialista en Derechos Humanos con amplia experiencia en tribunales mundiales, que ha participado, entre otros, en la Sesión de Barcelona del Tribunal sobre Iraq [1]; Jorge Vivas, presidente de la Asociación de Cubanos Residentes en Andalucía «Tocororo»; Jaime Cedano, miembro del Partido Comunista Colombiano y Manuel García, miembro de la CEOSI, brigadista en Iraq y participante en la Flotilla de la Libertad «Rumbo a Gaza».
Hace menos de un mes se cumplió el noveno aniversario del inicio de la guerra de agresión contra Iraq, cuando comenzaba la primavera de 2003.
En el mes de febrero de ese mismo año, unas semanas antes de que ésta se iniciara, millones de personas protestaron en las calles de todas las ciudades del mundo. España estuvo a la cabeza de las movilizaciones. El poder imperial, y su corte de lacayos, ignoraron las protestas de la mayoría de los ciudadanos del mundo, mostrando así su verdadero talante democrático. Tampoco institución internacional alguna tuvo el valor o la conciencia de hacer frente a la amenaza de agresión de los gobiernos de EEUU y de Reino Unido contra Iraq.
Un grupo de pacifistas de Andalucía, muchos de ellos miembros del PCA o de IU, se integraron en las Brigadas Mohammad Belaidi [2], organizadas por la entonces CELSI [3], acudieron a Bagdad y, entre otras cosas, ocuparon la embajada española cobardemente abandonada cobardemente ya antes incluso de que iniciara la guerra. […]
Iraq ha sido invadido, ocupado, destrozado, devastado y aniquilado, y los responsables se pasean sonrientes por el mundo dando conferencias millonarias. El ataque a Iraq fue un ataque a la justicia, a la libertad, a la paz, a la vida y a la humanidad.
La invasión y ocupación de Iraq fueron y siguen siendo ilegales. Las razones dadas por los gobiernos de EEUU y de Reino Unido para la ocupación e invasión de Iraq en marzo de 2003 han demostrado ser flagrantes falsedades acerca de la presencia de armas de destrucción masiva en Iraq y de la relación entre el terrorismo de Al-Qaeda y el gobierno de Saddam Hussein. […]
Iraq ya fue agredida en 1991. Los servicios secretos de EEUU, después de azuzar una guerra contra Irán que duró ocho años, y de dar a entender que no intervendrían en la ocupación de Kuwait, desencadenaron un destructivo ataque contra todas las infraestructuras de Iraq y masacraron a las tropas que se retiraban de Kuwait, desde Basora hasta Bagdad, hasta tal punto de que el general Norman Schwarzkopf declaró que «[…] Ya no queda nadie al que asesinar».
La imposición de unas sanciones económicas inhumanas, junto con el bloqueo económico impuesto por la aviación y la marina imperial, produjo ciento de miles de víctimas, entre otros motivos por la prohibición de importar medicamentos y productos de primera necesidad.
En una entrevista para la CBS, Madeleine Albright, ministra de Exteriores de EEUU y representante en el Consejo de Seguridad, ante la pregunta de si el precio del embargo había valido la pena, es decir la muerte de 500.000 niños iraquíes menores de cinco años, ella respondió: «[…] Fue una decisión difícil, pero sí, valió la pena pagar ese precio.» Como se comprobó más tarde, el objetivo era degradar y debilitar los recursos humanos y materiales de Iraq a fin de facilitar su invasión y ocupación.
El coste de la guerra hay que cuantificarlo en víctimas civiles y en destrucción para el pueblo Iraquí. La prensa dominante sigue hablando de un número irrisorio de víctimas, unas 100.000. Mientras, la respetada empresa de opinión británica ORB publicó los resultados de una encuesta en la que se calculaba que un 22 por ciento de los hogares iraquíes habían perdido a un miembro de la familia debido a la violencia durante la ocupación de Iraq, lo que equivale a 1.200.000 muertos, cifra con la que coincide la revista médica británica The Lancet.
En una charla ofrecida a los miembros del Rotary Club, y de la que informó C-SPAN el 5 de septiembre de 2010, H.E. Samir Sumaidaye, embajador iraquí en Estados Unidos, afirmó que en Iraq había 500.000 de viudas recientes. Middle East Online citaba a altos cargos de la ciudad iraquí de Najaf que afirmaban que desde el inicio del conflicto se habían enterrado en la ciudad 40.000 cuerpos no identificados. Pero es que, además, ha habido una política de exterminio de la inteligencia iraquí.
Organizaciones humanitarias han contabilizado al menos a 2.000 médicos asesinados, 352 periodistas y 448 profesores académicos. Sobre estos últimos, la CEOSI ha llevado un recuento exhaustivo, es decir académicos asesinados de los que se conoce el nombre y los datos concretos de su asesinato. [4]
Muerte y destrucción: algunos datos
-Desde 1990, el índice de mortalidad infantil en Iraq ha aumentado un 150 por ciento.
-En 2007, y según estadísticas oficiales del gobierno, había cinco millones de huérfanos iraquíes.
-En 2008, sólo el 50 por ciento de los niños de primaria asistían a clase, mientras que aproximadamente 1.500 estaban presos en centros de detención.
-Más de dos millones de iraquíes son refugiados y casi tres millones desplazados internos.
-El 70 por ciento de los iraquíes no tiene agua potable.
-La tasa de desempleo, según datos oficiales, alcanza el 50 por ciento y al 70 por ciento según datos extra oficiales.
-El 43 por ciento de los iraquíes vive en una pobreza abyecta.
-Ocho millones carecen de alimentos y tienen una necesidad extrema de ayuda humanitaria.
-El 80 por ciento de los iraquíes no disfruta de condiciones higiénicas.
-Respecto a las mujeres y según un reciente estudio elaborado por Oxfam:
El 33 por ciento de las mujeres no había recibido ayuda humanitaria desde 2003
El 76 por ciento de las viudas no recibía pensión;
El 52 por ciento estaba en el paro,
El 55 por ciento estaba desplazada desde 2003 y
El 55 por ciento había sufrido violencia (violencia de género, abusos sexuales secuestro)
-Los suburbios urbanos crecen de forma descontrolada y el asesinato se ha convertido en parte de la vida diaria.
-Las necesidades básicas, como el agua potable, la electricidad, la recogida de basuras, alcantarillado, trabajo, atención sanitaria, etc., están fuera del alcance de las posibilidades de la vasta mayoría de los iraquíes.
Iraq se ha deslizado hasta la Edad Media, no sólo en sentido figurado, sino también en el sentido más literal puesto que la luz se ha convertido en un bien escaso.
En el mes de mayo de 2010 un estudio llamado The Mercer Quality of Living publicó sus conclusiones sobre «ciudades más habitables en el mundo». Bagdad aparecía en el último lugar, es decir, la ciudad menos habitable del planeta donde se ha construido un muro de seguridad de hormigón en torno a la capital, con ocho controles militares. Así pues, no sólo se obliga a los habitantes de Bagdad a vivir en comunidades cerradas (por muros de «seguridad» de hormigón entre los diferentes distritos), sino que toda la ciudad estará encerrada, cerrada al mundo exterior, como una fortaleza medieval.
Sectarismo
La ocupación ha exacerbado intencionadamente las divisiones étnicas, sectarias y religiosas en el seno de la sociedad iraquí con el objetivo de minar la identidad e integridad iraquíes como nación. Esto es acorde con la conocida política imperialista del «divide y vencerás».
En ningún censo celebrado en Iraq hasta la desaparición del gobierno de Saddam aparecían datos que hicieran mención o siquiera alusión a la pertenencia confesional de los ciudadanos.
Falso también resultó ser la predilección de gobierno de Saddam por los suníes. De la lista de los 55 altos cargos del gobierno de Saddam que las autoridades estadounidenses buscaron tras la invasión de 2003, cuyas fotos fueron publicadas en forma de cartas de una baraja, 36 eran chiíes. El criterio para pertenecer al círculo del poder era, por lo tanto, distinto de la pertenencia sectaria.
La situación de la mujer
La ocupación ha incrementado los niveles de violencia contra la mujer, la opresión de género y ha reforzado el patriarcado.
Ibtihal Kased al Zaidi, ministra de Asuntos de la Mujer declaró el pasado 10 de febrero, después de que su Ministerio emitiera un comunicado en el que se determinaba el tipo de ropa que deben llevar las mujeres: «[…] Estoy en contra de la igualdad porque la mujer perderá mucho si su situación es igual a la del hombre. En cuanto a la tutela, considero que es algo correcto. Yo, como ministra, cuando salgo de casa o voy a cualquier parte informo a mi marido. Esto no disminuye la importancia de la mujer, al contrario: da a la mujer una posición importante en el seno de la familia, como madre y cuidadora de los hijos. Mi marido tiene que saber dónde voy, lo que no se contradice con mi puesto de ministra.»
Economía
La privatización, desregulación y liberalización de la economía iraquí por parte del régimen de ocupación, todo ello ilegal según la legislación internacional [5], ha impelido al país a convertirse en una economía controlada por el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.
Las fuerzas de ocupación también se han hecho con el control de las reservas petrolíferas de Iraq [6]. La Ley de Hidrocarburos, aprobada por el gobierno iraquí en 2007, [7] fue literalmente redactada por técnicos nombrados por los gobiernos de Estados Unidos y Reino Unido junto con nueve compañías petroleras internacionales, y posteriormente sancionada por el Fondo Monetario Internacional, todo ello antes de llegar a las instituciones iraquíes.
La Ley de Hidrocarburos confirma la ruptura del anterior marco jurídico del Estado iraquí y abre la puerta a la privatización del sector por medio de los denominados Acuerdos de Participación en la Producción, contratos que, respetando la titularidad formal del Estado iraquí de la propiedad del petróleo, favorecerán durante décadas su control privado por compañías inversoras extranjeras.
Resistencia a la ocupación
Existe una generalizada oposición a la ocupación. La resistencia pacífica política, social y civil está sometida a la represión de las fuerzas de ocupación. La ocupación -y su brutalidad- ha provocado una fuerte resistencia armada que los principios recogidos en la Carta de Naciones Unidas y en el Derecho Internacional amparan. La resistencia nacional popular a la ocupación es legítima y está justificada. Merece el reconocimiento de cualquier persona preocupada por la justicia y la libertad.
De cualquier manera, los distintos grupos que conforman la resistencia iraquí han rechazado la violencia sectaria y terrorista contra objetivos civiles, ejercida por grupos como Al-Qaeda, que llegaron a Iraq junto con la invasión imperialista o por otros grupos armados de los propios aparatos del poder y de los servicios secretos de las tropas invasoras.
[…]
Las leyes e instituciones creadas bajo los auspicios de la ocupación carecen de autoridad tanto legal como moral. Por consiguiente, la lucha continuará hasta la conquista de la independencia y la soberanía nacional, y la construcción de un nuevo estado social y democrático.
La revolución de los jóvenes
Desde el 25 de febrero de 2011, el pueblo iraquí, alentado por los levantamientos populares en distintos países árabes, ha venido manifestándose pacíficamente a lo largo de todo el país en reclamo del fin de la ocupación, de mejoras de sus condiciones de vida, del fin de la corrupción y de una auténtica democracia. Estas manifestaciones son sistemática y violentamente reprimidas, con la persecución incesante de todas aquellas personas que los poderes gubernamentales consideran líderes, persecución que ha culminado en detenciones, palizas y asesinatos [8]. El desarrollo de estas movilizaciones ha estado ausente de la información internacional que establece criterios selectivos, en función de los intereses imperialistas, a la hora de determinar qué luchas son noticias y cuáles no.
La pena de muerte
El gobierno Iraquí utiliza la pena de muerte como forma de terror colectivo. El pasado 24 de enero, la Alta Comisionada de Derechos Humanos para las Naciones Unidas, afirmó sentirse «conmocionada» por la información de que 34 personas, entre las que se contaban dos mujeres, habían sido ejecutadas en Iraq el 19 de enero tras cumplir condena por varios delitos [9]. Sus palabras textuales fueron: «[…] Ni siquiera habiéndose observado los procedimientos más escrupulosos de un juicio legal, esto dejaría de ser un número terrorífico de ejecuciones llevadas a cabo en un solo día» a lo que añadió: «[…] Dada la falta de transparencia en los procedimientos judiciales, la tremenda preocupación sobre el debido proceso y la legalidad de los juicios, así como el amplio espectro de delitos a los que se aplica la pena de muerte en Iraq, el número de ejecuciones es verdaderamente escandaloso», para terminar diciendo que «[…] Más preocupante aún, es que no tenemos ninguna información de que se haya conmutado la pena a ninguna persona que estuviera en el corredor de la muerte, a pesar del hecho de que existen casos bien documentados de que las confesiones a los reos se han logrado mediante la tortura […]. [10]
Una de las ejecuciones que parece inminente es la Tareq Aziz, ex ministro de Asuntos Exteriores, que cumplirá 76 años en el mes de abril, y que lleva preso desde 2003, cuando después de la toma de Bagdad por las tropas de invasión estadounidenses se entregó a estas a cambio de que su mujer e hijos pudieran abandonar Iraq. Se trata de un nuevo asesinato amparado en una farsa de juicio, que revela el carácter despótico y asesino del gobierno títere de Iraq. [11]
La guerra de Iraq, al igual que la de Vietnan, seguirá produciendo víctimas inocentes muchos años después de que las guerras hayan terminado.
En el caso de Iraq, poblaciones como Basora y Faluya, que sufrieron intensos bombardeos con munición de uranio empobrecido, está en el origen de que el número de malformaciones en recién nacidos supere en 11 veces la media mundial.
El informe publicado en el International Journal of Environmental Research and Public Health a finales de 2010, señalaba que en el mes estudiado, mayo de ese año, el 15% de los 547 bebés nacidos en Faluya tenían malformaciones; el 11% de las mujeres dieron a luz a las 30 semanas de gestación, y el 14% de las embarazadas sufrió abortos espontáneos.
La ocupación de Iraq, que en teoría terminó con la salida de las tropas estadounidenses el pasado mes de diciembre, habría costado, hasta el último octubre, más de 800 mil millones de dólares. [12] No obstante, el actual tratamiento médico de los miles de soldados heridos, y la reposición de vehículos, armamentos etc., elevará los gastos alrededor de los cuatro mil millones de dólares. Si sólo se contabilizan esos 800.000 millones de dólares, en ocho años y medio de conflicto en Iraq, el gasto sería de casi 3.000 dólares por segundo.
Respecto a la retirada de las tropas de EEUU, […] hay que tener en cuenta que en Iraq queda la mayor embajada del mundo […]. Con algo más de 42 hectáreas, (las mismas dimensiones que Ciudad del Vaticano) es la mayor y más cara embajada estadounidense del mundo, recibe el suministro de convoyes armados, genera su propia agua y electricidad y tiene su propia red de alcantarillado. Las cifras del departamento de Estado dicen que unas 17.000 personas estarán bajo la jurisdicción del embajador estadounidense. Además, hay también consulados en Basora, Mosul y Kirkuk, en cada uno de los cuales hay destinadas más de 1.000 personas. Y, lo que es fundamental, todo este personal estadounidense, incluyendo los contratistas militares y de seguridad, tendrán inmunidad diplomática.
La Asociación de Ulemas Musulmanes de Iraq ha denunciado que la ocupación estadounidense no se ha retirado completamente, tal y como se ha anunciado, sino que muchas fuerzas influyentes, bajo diversas denominaciones, se han quedado y entre estas fuerzas se encuentra una división militar equipada con todo tipo de armas de combate. También se han quedado 3.000 tropas especiales para apoyar a las tropas gubernamentales cuando sea necesario. También se han quedado 3.500 soldados para proteger el espacio aéreo iraquí, según ha anunciado el propio gobierno iraquí, además de 16.000 soldados para proteger la Embajada y los consulados de EEUU en Iraq, cifra a la que hay que añadir los miles de formadores, asesores, ayudantes, etc., y las 150 empresas de seguridad, tal y como ha reconocido el gobierno. [13]
El 31 de Agosto de 2010, Obama declaró «[…] el final de las misiones de combate en Iraq» y añadió que los estadounidenses que han servido en Iraq han completado todas las misiones que se les encomendaron y que derrotaron a un régimen que había aterrorizado a su pueblo. También declaró que «[…] por medio de este notable capítulo en la historia de Estados Unidos e Iraq, hemos asumido nuestra responsabilidad».
No, señor presidente, no la hemos asumido, no hasta que muchos estadounidenses de las más altas esferas se sienten en el banquillo por comisión de crímenes de guerra.
No hasta que Estados Unidos pague los cientos de miles de miles de millones de dólares en indemnizaciones al pueblo iraquí por la expoliación de su país y el asesinato generalizado de su pueblo.
No hasta que Estados Unidos abra sus fronteras para aceptar a todos aquellos que huyen de Iraq de un gobierno de matones y fanáticos sectarios y de la más espantosa ruina.
No hasta que usted, señor presidente, se ponga de rodillas, se dé golpes en el pecho y proclame un Día Nacional de la Vergüenza que cada año se caracterice por lamentaciones, reparaciones y confesiones de culpa por nuestro crimen de sangre contra la humanidad en Iraq.
Notas de IraqSolidaridad:
1. Véase todo Tribunal Internacional sobre Iraq, Sesión de Barcelona.
2. Véase Brigadas a Iraq contra la Guerra ‘Mohammad Belaidi’, 9 de abril de 2003. Esta iniciativa, además de solidarizarse con el pueblo iraquí ante la agresión inminente, quería rendir homenaje y recordar a los centenares de árabes vinieron a defender la República española. Véase al respecto, Carlos Varea, «Brigadistas árabes en España, 1936-1939: Combatientes por la República«, IraqSolidaridad, 21 de marzo de 2006.
3. Campaña Estatal por el Levantamiento de las Sanciones a Iraq.
4.Véase la lista de docentes universitarios asesinados en Iraq durante el período de ocupación, IraqSolidaridad, última actualización 21 de agosto de 2011.
5.- La legalidad internacional en caso de ocupación, está formada por un cuerpo de leyes compuesto por: Reglamento de La Haya de 1907 (arts. 42 a 56), la IV Convención de Ginebra (arts. 27 a 34 y 47 a 78), y determinadas disposiciones del Protocolo adicional I y del derecho internacional humanitario consuetudinario, que establecen entre otras cuestiones que «[…] un país ocupante no puede modificar las leyes vigentes en el territorio ocupado […]».
6. Iraq es posee las segundas reservas mundiales de petróleo del mundo tras Arabia Saudí.
7. Véase Kamil Mahdi, «El petróleo iraquí pasará a control extranjero y de grupos sectarios colaboracionistas«, IraqSolidaridad, 16 de enero de 2007.
8.- Haidi al-Mahdi, periodista y uno de los impulsores de las manifestaciones de la plaza Tahrir en Bagdad, fue brutalmente asesinado el 8 de septiembre de 2011 en su casa, tras una serie de intimidaciones y acoso. Véase «Las protestas estallan en Iraq«, IraqSolidaridad, 9 de septiembre de 2011.
9. Véase Nota del Alto Comisionado de Derechos Humanos, «Naciones Unidas condena la ejecución de 34 iraquíes el pasado 10 de enero» IraqSolidaridad, 24 de enero de 2012.
10. Véase Dirk Adriaensens, «Crímenes contra Iraq cometidos y no denunciados. Carta abierta a la Alta Comisionada de los Derechos Humanos de Naciones Unidas.» IraqSolidaridad, 5 de marzo de 2012.
11. Véase manifiesto de Iraq Solidaridad «Por la libertad de Tareq Aziz y el fin de las ejecuciones masivas y arbitrarias de iraquíes inocentes«, IraqSolidaridad, 17 de febrero de 2012.
12. El coste de las invasiones de EE UU en Iraq y Afganistán se puede consultar en costofwar.com.
13. Véase Asociación de Ulemas Musulmanes, «Extracto de la carta abierta de la Asociación de Ulemas Musulmanes de Iraq al pueblo iraquí con motivo de la retirada estadounidense de Iraq sobre la etapa subsiguiente«, IraqSolidaridad, 24 de enero de 2012.