Así es la nueva Ubuntu 9.10

El jueves 29 de octubre se liberó la versión 9.10 de Ubuntu, una de las principales -por no decir la principal- distribuciones GNU/Linux del actual panorama que presenta la plataforma del pingüino.

La primera novedad puede verse con solamente el arranque del sistema, al cual se le ha hecho un lavado de cara siguiendo las tendencias actuales que están adoptando todos los sistemas operativos, y que no es más que un arranque completamente gráfico. En anteriores versiones, el usuario podía ver una serie de líneas de texto que le informaban sobre los dispositivos de hardware detectados por el sistema y su configuración, antes de pasar a un modo gráfico. Ahora, todos estos detalles (que, además, carecen de importancia para la mayoría de los usuarios finales, el público al que verdaderamente se dirige esta distribución) quedan escondidos.

Primer paso del nuevo arranque gráfico de Ubuntu

En realidad, la nueva rutina de arranque (llamada Upstart y que substituye al daemon init típico de los sistemas Unix) ya tiene algunos años de historia a sus espaldas (vio la luz con Ubuntu 6.10), pero no ha sido hasta ahora que todas las funciones de arranque se han migrado hacia ella. Además, es abierta para que la adopten otras distribuciones e, incluso, plataformas diferentes de GNU/Linux: desde Fedora hasta la nueva plataforma para teléfonos móviles WebOS de Palm.

Segundo paso del nuevo arranque gráfico

Además de pasar a ser totalmente gráfico, el proceso de arranque también se ha agilizado haciéndolo más rápido, característica de la que se beneficiarán todas las máquinas pero que parece especialmente pensada para los netbooks.

El escritorio de la versión principal continua siendo Gnome en su última versión disponible, la 2.28, al cual se lo ha maquillado un poco cambiando, por ejemplo, el tapiz de fondo del escritorio. Los tonos siguen siendo los habituales anaranjados y marrones que han predominado en esta distro desde sus primeros balbuceos y que, con el tiempo, han dejado paso a las críticas para convertirse en una seña de identidad de Ubuntu.

El escritorio de Ubuntu 9.10

El gestor de correo Evolution se integra más aún con la barra de tareas de Gnome, mostrando las notificaciones de nuevos mensajes en la zona izquierda de dicha barra.

Un nuevo instalador

El proceso de instalación a disco duro también ha sufrido una remodelación; se simplifica aún más, se requiere un número menor de pasos y todo está explicado en un lenguaje muy claro y sin tecnicismos, de forma que se vuelve más comprensible para aquellos usuarios con escasos conocimientos técnicos y a los cuales les van grandes, por ejemplo, términos relacionados con el particionamiento de disco entre otros.

La distribución puede instalarse de forma muy simple desde un pendrive USB. Para ello disponemos de herramientas de creación de esta imagen en llave USB, utilizables desde Linux o Windows. Para los poseedores de netbooks está claro que esta opción les será especialmente útil.

Algo de lo que se avisa en las notas de la versión es que, si nuestra intención es utilizar la funcionalidad de hibernación, el particionamiento automático que realiza el proceso de instalación puede no ser el adecuado para ello. Para poder hibernar nuestra máquina se necesita una partición de swap (o de intercambio) con un tamaño igual o superior al de nuestra memoria, ya que el contenido de esta debe ser almacenado a disco durante la hibernación para recuperarse a posteriori. Si tenemos una máquina con 4 GB. y una partición de swap de 2 GB, es obvio que no podremos guardar todo el contenido de la memoria en dicha partición.

En este caso será, por lo tanto, necesario revisar el esquema de particiones manualmente, lo que puede suponer un handicap para los usuarios con pocos conocimientos.

En la nube

Ubuntu One se entrega en esta edición como un componente más del escritorio, con el cual se facilita el acceso a aplicaciones online (en la nube, cloud) que permiten, por ejemplo, la realización de backups, intercambio de archivos o la sincronización de libretas de direcciones.

Mientras otras plataformas prefieren confiar en que estos servicios sean ofrecidos por terceras partes (por ejemplo, mediante Adobe AIR), en Canonical prefieren ofrecer toda la cadena de valor: por un lado ofrecen al desarrollador el servicio de hosting y los recursos necesarios para tener su aplicación, y por el otro facilitan lo máximo posible al cliente acceder a estas aplicaciones.

Otras novedades

• El servidor MySQL por defecto es la versión 5.1, que substituye a la 5.0 de la anterior entrega

• El sistema de ficheros por defecto es ext4

• No hay versión de Ubuntu 9.10 para arquitectura Sparc debido a un bug que impide arrancar en esta, algo que se espera podrá corregirse para la versión 10.04

• Mejora general de la gestión de las conexiones 3G a Internet en movilidad

• Para los programadores, se incluye la nueva herramienta Quickly que, como su nombre en inglés indica, agiliza ciertas tareas rutinarias para la realización de un programa

• El navegador web Firefox ha sido actualizado a su versión 3.5

Ubuntu 9.10 junto a sus variantes (Netbook Remix, Kubuntu, Xubuntu,…) estará disponible a lo largo del día de hoy a través de su página web.

El futuro: 10.04 Lucid Lynx

Aún tenemos muy pocos detalles sobre como va a ser la próxima versión de Ubuntu, a duras penas que será una LTS (Long Term Support, 3 años de soporte para máquinas desktop y 5 para servidores) y que el aspecto del escritorio (el tema) podría cambiar radicalmente respecto a versiones anteriores. ¿Tal vez dejaremos de ver esos tonos marrones antes comentados, tan característicos?

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