Recomiendo:
0

Bush anuncia que congelará la retirada de sus tropas en Irak a partir de julio

Fuentes: Gara

El presidente de EEUU, George W. Bush, anunció ayer que suspenderá la retirada de las tropas en Irak prevista para este verano con el objetivo de «evaluar la situación de seguridad» a pesar de la «mejora» en este aspecto que el Gobierno estadounidense ha estado publicitando. De este modo, Bush respalda la recomendación del comandante […]

El presidente de EEUU, George W. Bush, anunció ayer que suspenderá la retirada de las tropas en Irak prevista para este verano con el objetivo de «evaluar la situación de seguridad» a pesar de la «mejora» en este aspecto que el Gobierno estadounidense ha estado publicitando.

De este modo, Bush respalda la recomendación del comandante de las tropas de EEUU en Irak, el general David Petraeus, de completar la retirada limitada de tropas de combate hasta julio, medida ya aprobada, para después esperar durante un periodo de 45 días antes de considerar más posibles reducciones.

En este sentido, Bush explicó que ha transmitido al general Petraeus que «tendrá todo el tiempo que necesite» y que «todavía queda mucho trabajo por delante».

Asimismo, Bush también está de acuerdo con la sugerencia de Petraeus de reducir los periodos de servicio en Irak de quince a doce meses, pero esta medida sólo se aplicará a las tropas desplegadas después del 1 de agosto pasado.

Durante su intervención en Washington tras reunirse con Petraeus y el embajador en Irak, Ryan Crocker, Bush aprovechó para afirmar que EEUU «da especiales gracias a los soldados y familias que han apoyado esta extensión del despliegue». La guerra de Irak ha costado la vida de más de 4.000 soldados estadounidenses y hasta el momento ha supuesto un gasto de 600.000 millones de dólares (381.000 millones de euros), por lo que se está volviendo cada vez más impopular, sobre todo desde que se ha desencadenado la crisis bancaria de las hipotecas basura.

Sin consultar al Congreso

Por otra parte, un alto responsable del Departamento de Estado rechazó ayer de manera categórica la pretensión demócrata de que el acuerdo suscrito con el Gobierno iraquí para que las tropas de EEUU permanezcan indefinidamente en el país árabe sea sometido a la aprobación del Congreso.

David Satterfield, consejero especial para Irak de la secretaria de Estado, Condoleezza Rice, compareció en una comisión senatorial después de que electos demócratas, entre ellos la aspirante a la candidatura presidencial Hillary Clinton, se quejaran de que este acuerdo puede hipotecar la libertad de acción del próximo Gobierno.

El acuerdo secreto entre EEUU y el Gobierno títere de Irak tiene como objetivo otorgar bases legales a la presencia militar estadounidense en el país árabe después del 31 de diciembre, cuando expira la resolución de la ONU en la que se amparan actualmente.

«Tal y como hemos hecho en el pasado, nuestra intención es adoptar un acuerdo ejecutivo, en lugar de un tratado que tendría que ser sometido a la aprobación del Senado», declaró Satterfield ante los miembros de la Comisión de Exteriores del Senado.

Denuncian el asedio contra Medina al-Sadr

El movimiento chií de Moqtada al-Sadr denunció ayer el sitio que el Ejército de EEUU ha impuesto al barrio bagdadí de Medina al-Sadr, al tiempo que alertó de que la tregua que se encuentra en vigor desde agosto de 2007 corre serio riesgo.

«Tres millones de habitantes están bajo asedio en Medina al-Sadr. Se les impide salir y abastecerse», declaró a France Presse el líder del movimiento de al-Sadr en este barrio del nordeste de Bagdad, Salman el-Fradji.

«Los stocks han comenzado a agotarse. Vamos a tener problemas de abastecimiento de alimentos, lo que provocará una catástrofe humanitaria», afirmó en una entrevista realizada en el corazón de Medina al-Sadr.

«Los habitantes son objetivo permanente de los francotiradores americanos y de los ataques aéreos», añadió el-Fradji.

Unas 70 personas han muerto en Medina al-Sadr en los enfrentamientos registrados en los últimos cinco días. «El 60% son mujeres y niños», denunció este dirigente sadrista.

«Me dirijo al primer ministro (Nuri al-Maliki) para preguntarle: ¿Por qué asedia Medina al-Sadr?», añadió este dirigente del movimiento chií.