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Declaración del Comité del Tribunal BRussells por la inmediata liberación de Muntazer al-Zaidi.

Bush proclama la victoria y recibe una ofensa

Fuentes: IraqSolidaridad

  .   BRussells Tribunal (www.brusselstribunal.org), 15 de diciembre de 2008 IraqSolidaridad (www.iraqsolidaridad.org), 16 de diciembre de 2008 Traducido del inglés para IraqSolidaridad por Paloma Valverde   «[…] los zapatos lanzados contra Bush son los huérfanos y las viudas de los más de un millón doscientos mil iraquíes que, hasta la fecha, ha matado la […]

 

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BRussells Tribunal (www.brusselstribunal.org), 15 de diciembre de 2008 IraqSolidaridad (www.iraqsolidaridad.org), 16 de diciembre de 2008 Traducido del inglés para IraqSolidaridad por Paloma Valverde

 

«[…] los zapatos lanzados contra Bush son los huérfanos y las viudas de los más de un millón doscientos mil iraquíes que, hasta la fecha, ha matado la guerra imperial anglo-estadounidense, junto con los casi seis millones de desplazados».

 

En un impresionante acto, Muntazer al-Zaidi, un periodista iraquí de la cadena televisiva Al-Baghdadiya, ha personificado la realidad de la derrota de Estados Unidos en Iraq y ha introducido el espíritu de la resistencia en el corazón de todos los árabes, uniéndolo con el del pueblo iraquí que continúa resistiendo el imperialismo y el colonialismo y que rechaza la humillación.

Bush es el humillado y no puede recuperar su dignidad. Entró en Iraq a escondidas, sin anunciarlo, para firmar un tratado ilegal con este gobierno marioneta objeto de burla y que ha institucionalizado la ocupación estadounidense. Dos zapatos por el aire han sido capaces de destruir la fachada bajo la cual él y sus cómplices proclaman la victoria en Iraq.

Huérfanos y viudas

En la cultura árabe, la máxima expresión de desprecio es lanzar un zapato al adversario. Bush y sus compinches criminales son merecedores de ese desprecio. Bush afirma no conocer cuál es la ‘causa’ de al-Zaidi, pero éste lo ha dejado claro: los zapatos lanzados contra Bush son los huérfanos y las viudas de los más de un millón doscientos mil iraquíes que, hasta la fecha, ha matado la guerra imperial anglo-estadounidense, junto con los casi seis millones de desplazados.

Los zapatos van igualmente contra las marionetas de Bush, la prueba es que [de acuerdo con la legislación internacional] ningún gobierno impuesto por la ocupación es legítimo ni puede ser legitimado y que la resistencia es la expresión de la soberanía del pueblo iraquí, lo que deja patente que el acuerdo entre Bush y Maliki no tiene valor ni validez legal alguna. Dos zapatos que expresaban el paraíso que es la resistencia en comparación con la ignominia de la sumisión. Iraq es indestructible, su pueblo lo demuestra orgulloso e invencible.

Al-Zaidi necesita protección

Después de más de cinco años y medio de asesinatos y de destrucción continuada, es evidente que Muntazer al-Zaidi, al enfrentarse al poder imperial de EEUU, ha dado un paso adelante en esa zona gris entre el derecho a la vida y la permanente amenaza de muerte llevada a cabo por el imperialismo.

Puesto que el gobierno de Maliki está presto a ejecutar sumariamente a sus oponentes políticos, incluidos sus abogados, y que al-Zaidi está bajo custodia directa de la seguridad de Maliki, tenemos serias razones para creer que al-Zaidi está en peligro inminente de ser torturado o asesinado.

Hemos de recordar que Muntazer al-Zaidi está protegido por la legislación humanitaria internacional, que rige la ocupación estadounidense, y tiene garantizados sus derechos de acuerdo a la legislación internacional de Derechos Humanos [1]. Las leyes internacionales Humanitaria y de Derechos Humanos prohíben la tortura, la ejecución sumaria, la detención incomunicada, el maltrato de los detenidos o la denegación de asistencia letrada. La ocupación estadounidense es directamente responsable del bienestar de al-Zaidi y debe garantizar su seguridad. Como periodista, se le ha de dar protección extraordinaria.

Llamamiento

Tras la acción de al-Zaidi, miles de personas se han lanzado a la calle en su apoyo y se han escrito incontables declaraciones en su defensa. Aplaudimos su valor, al mismo tiempo que exigimos conocer el lugar exacto en el que se encuentra, y nos unimos a los millones de personas que exigen su inmediata puesta en libertad [2].

Notas:

1. Véanse los artículos 6, 7 y 14 de Convenio internacional sobre Derechos Políticos y civiles y los artículos 113 y 116 de la IV Convención de Ginebra sobre la Protección de Civiles en Tiempo de Guerra.

2. La petición de libertad se puede firmar en: http://www.ipetitions.com/petition/iwffomuntatharalzaidi/