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Con ocasión del encuentro sobre Iraq en el Parlamento Europeo el 16 de julio de 2014

Carta abierta a los miembros del Parlamento Europeo

Fuentes: Red Internacional contra la Ocupación (International Anti-Occupation Network, IAON)

Traducido del inglés por Beatriz Morales Bastos

La Unión Europea (UE) tiene obligaciones morales y legales respecto a Iraq después de que varios de sus Estados miembros ignoraran las advertencias de las voces contrarias a la guerra de que no atacara el país en 2003.

Se han silenciado tanto la incapacidad de proteger a los ciudadanos ordinarios de Iraq y el daño deliberado infligido a ciertas comunidades como las flagrantes violaciones de derechos humanos cometidas por las fueras del gobierno iraquí cotidianamente con total impunidad. Según Human Rights Watch, en las últimas cuatro semanas han sido asesinados 255 presos sunníes, la mayoría de ellos por las milicias que apoyan a los guardas de las cárceles. ¡Hay que proteger inmediatamente a todas las personas presas!

La situación es funesta: el primer ministro Maliki ha construido un Estado autoritario en el que despiadados grupos paramilitares, como Assaib Ahel Al Haq, tienen más peso militar que el ejército regular. Se está dando carta blanca a estas milicias sectarias para aterrorizar a las comunidades, cometer secuestros, torturar y llevar a cabo impunemente ejecuciones extrajudiciales. Las milicias han hecho limpiezas étnicas de los sunníes en Bagdad, tal como informaron los medios de comunicación y ONG. Las políticas de discriminación, represión y exclusión de Maliki también son responsables del aumento de los actos terroristas cometidos por grupos sectarios como el ISIS. Ni Maliki ni sus aliados luchan contra el terrorismo sino que lo utilizan como pretexto para llevar a cabo sus políticas. Esta política está condenada al fracaso y no hace sino alienar y aterrorizar aún más a las comunidades. El único que puede derrotar al terrorismo es el pueblo iraquí, unido en la defensa de su nación.

Hay otros muchos grupos armados y milicias, algunos de ellos vinculados a la oficina del primer ministro, implicados en asesinatos indiscriminados y responsables de provocar un baño de sangre sectario en Iraq. Las fuerzas nacionalistas y no sectarias que encabezaron el levantamiento contra Maliki han condenado firmemente todas las acciones terroristas, lo mismo que nosotros.

El uso de ataques aéreos supuestamente para luchar contra el terrorismo también es una estrategia fallida. Esta política ha provocado el asesinato indiscriminado de miles de civiles inocentes y la destrucción de sus hogares. La ocupación estadounidense y los subsiguientes gobiernos iraquíes de la Zona Verde también intentaron esta política. Aun cuando todos los observadores coinciden en que la solución en Iraq no es una solución militar, Irán y otros países se precipitan a ayudar a Maliki suministrándole armas y personal. Esta estrategia fomenta el odio y el resentimiento a consecuencia de la criminalización sistemática de las comunidades. Por consiguiente, urgimos al Parlamento Europeo a pronunciarse en contra del bombardeo de pueblos y ciudades iraquíes.

Una de las principales razones de las protestas pacíficas que empezaron en Faluya, Anbar, Tikrit, Mosul y otros lugares en diciembre 2012 fue la noticia de que se estaba torturando y violando en los centros de detención a unas mujeres que habían sido detenidas en vez de sus parientes masculinos. Los manifestantes pacíficos tenían unas reivindicaciones bien documentadas y claras, las primeras de las cuales era exigir la liberación de todas las mujeres detenidas, la abolición del Artículo 4 de la Ley sobre el Terrorismo que se suele utilizar como pretexto para llevar a cabo detenciones arbitrarias/torturas y violaciones (véase el informe de HRW No One is Safe ), la revocación del decreto de desbaathificación instaurado por Paul Bremer y acabar con toda discriminación sectaria y étnica, así como el rechazo de la división del país. El gobierno respondió a las protestas pacíficas con bombas e incluso con masacres, incluido el asesinato de manifestantes desamados y heridos.

Pedimos:

1) la prohibición inmediata entregar armas al gobierno de Maliki.

2) la detención de todos los ataques aéreos y operaciones militares contra las ciudades y pueblos iraquíes,

3) la creación de corredores seguros para entregar ayuda y suministros humanitarios a los civiles en zonas de conflicto.

4) el fin de todas las medidas de castigo colectivo, como el corte de agua y/o electricidad o retener alimentos y el pago de salarios.

5) la protección de los presos, la liberación de todas las personas detenidas sin cargos o juicio, el fin de todas las detenciones arbitrarias, los maltratos y la tortura.

6) emprender medidas inmediatas para proteger a los civiles (en especial a las personas desplazadas) y salvaguardar sus derechos humanos,

7) el establecimiento de un nuevo gobierno no sectario que rechace el proceso político y la constitución impuestos por la ocupación. Este gobierno es el único que puede garantizar las fronteras y las seguridad de Iraq.

8) el apoyo activo de la Unión Europea, respetando la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU de defender la unidad e integridad territorial de Iraq, para iniciar unas negociaciones inmediatas con el fin de establecer ese gobierno.

Por medio de estas medidas la Unión europea puede asumir sus responsabilidades morales y legales con el pueblo de Iraq.

Red Internacional contra la Ocupación (International Anti-Occupation Network) y Tribunal B Russells – 14 de julio de 2014

Fuente: http://www.brussellstribunal.org/article_view.asp?id=1701