Traducido para Rebelión por J. M. y revisado por Caty R.
Esta es la historia de mi sobrino, presunto miembro de Al-Qaida. Si eso es cierto, yo acuso a los estadounidenses de empujarle a los brazos de esa organización. ¿Cómo?
Mi sobrino, Ala’Abdu Ala Raoof Tawfeeq Khader, portador de un pasaporte jordano, abandonó Jordania para viajar a Irak el 20 de enero de 2004 para continuar sus estudios superiores de Estadística en la Universidad de Bagdad. Dejó Jordania legalmente y entró en Irak legalmente.
El ejército estadounidense lo detuvo el 25 de enero de 2004 en Bagdad y expropió su pasaporte que después desapareció. Entonces le acusaron de entrar ilegalmente a Irak. Le encarcelaron.
Le llevaron al tribunal de al-haritheyya en Bagdad el 25 de mayo de 2006 conforme a la ley 2/3008. Fue condenado sin justificación un par de años de prisión acusado de entrar ilegalmente en el país.
Los estadounidenses debían liberarlo de inmediato porque había pasado más de dos años en la cárcel. En cambio le entregaron al gobierno iraquí el 13 de Agosto de 2006. Fue enviado a la prisión de Badoshe en Musel. Los iraquíes le dieron la oportunidad de llamar a su familia en Jordania. Se mantuvo en contacto con ellos.
En 2007, al-Qaida atacó la cárcel de Badoshe y liberó a 70 prisioneros. Mi sobrino era uno de ellos. La familia perdió contacto con él y sólo supimos algo sobre su paradero el 16 de marzo de 2011, cuando apareció en la señal de televisión al-Iraqiyya diciendo que estaba sirviendo en al-Qaida llevando dinero de un lugar a otro.
No estamos seguros de si lo que dijo en la televisión era verdad. Los gobiernos árabes obligan a los prisioneros a hacer confesiones en la televisión. Pero si es cierto, yo acuso a los estadounidenses de empujar a Ala’ a convertirse en miembro de Al-Qaida. Ahora Ala’ está preso en el departamento de lucha contra el terrorismo y la delincuencia organizada en el ministerio de Interior de Bagdad. Está sometido a interrogatorio y probablemente bajo la acusación de haber huido de la cárcel.
Los estadounidenses cometieron dos delitos contra Ala’. En primer lugar, le detuvieron sin ninguna razón y le quitaron el pasaporte. En segundo lugar por no cumplir la orden del Tribunal y mantenerlo en la cárcel.
Envié dos veces un fax a la Casa Blanca pidiendo la liberación de Ala’, una el 27 de agosto de 2005 y la otra el 2 de septiembre de 2005, pero no recibí respuesta.
Queremos el retorno de nuestro hijo.