«El ejecutivo de Mariano Rajoy ha respondido con evasivas y pisoteando la dignidad de los ciudadanos iraquíes, primero en respuesta al Senador Jesús Enrique Iglesias al decir que la guerra de Iraq es ‘historia’ y ahora, ante la pregunta del Diputado José Luis Centella, respondiendo sin condenar categóricamente la tortura a presos iraquíes» El diputado […]
«El ejecutivo de Mariano Rajoy ha respondido con evasivas y pisoteando la dignidad de los ciudadanos iraquíes, primero en respuesta al Senador Jesús Enrique Iglesias al decir que la guerra de Iraq es ‘historia’ y ahora, ante la pregunta del Diputado José Luis Centella, respondiendo sin condenar categóricamente la tortura a presos iraquíes»
El diputado de Izquierda Unida José Luis Centella interpeló al Gobierno sobre los malos tratos que los soldados españoles infligieron a los prisioneros iraquíes.
El pasado día 17 de marzo, el diario El País publicó en soporte de vídeo [1] los malos tratos que un grupo de soldados españoles infligían a prisioneros iraquíes detenidos en la base de Diwaniya.
Esta es la segunda vez que durante 2013, cuando se cumple el décimo aniversario de la ocupación de Iraq, al gobierno español se le interpela sobre la participación española en la invasión y ocupación de ese país.
Como ya informamos el pasado 14 de mayo, el Grupo Mixto presentó una Proposición no de ley sobre la necesidad de evaluar la participación española en la guerra, ocupación y reconstrucción de Iraq, así como sobre las violaciones de los derechos humanos perpetradas en dicho país.
Fue el diputado Joan Tardá quien se encargó de defender la propuesta [2] y, como viene siendo habitual, la mayoría del PP con la ayuda del Partido Socialista y de UPyD hizo inviable que dicha Proposición saliera adelante.
Con anterioridad, y como también hemos informado puntualmente, el Senador Jesús Enrique Iglesias, con motivo del décimo aniversario de la invasión y ocupación de Iraq, planteó preguntas sobre la colaboración española con las distintas administraciones y tropas ocupantes tras la retirada de las tropas españolas de Iraq [3]; sobre la contribución española a la reconstrucción de Iraq [4]; sobre la utilización de munición recubierta con uranio empobrecido por las tropas españolas u otras tropas ocupantes [5]; sobre el balance que hace el Gobierno de la participación española en la invasión de Iraq [6] y sobre si el gobierno español va a solicitar la paralización del Acuerdo de Asociación y Cooperación Unión Europea-Iraq [7].
Como es natural en un gobierno que nos tiene acostumbrados a pasar por encima de los ciudadanos y a ignorar sus demandas, el ejecutivo de Mariano Rajoy ha respondido con evasivas y con el mayor desprecio de los ciudadanos iraquíes a los que ilegalmente el anterior ejecutivo de su Partido infligió un daño irreparable. Primero, en respuesta al Senador Jesús Enrique Iglesias, al decir que la guerra de Iraq es ‘historia’, y ahora, ante la pregunta del Diputado José Luis Centella, respondiendo sin condenar categóricamente la tortura a presos iraquíes» [8].