Traducido del inglés para Rebelión por Sinfo Fernández
En la sede de la Asociación de Académicos Musulmanes en Iraq (AMSI, por sus siglas en inglés) se ha denunciado con toda firmeza la actuación del Parlamento de Representantes de Iraq por su ratificación del Acuerdo sobre el Estatuto de Fuerzas con EEUU (SOFA, por sus siglas en inglés) en cumplimiento de lo ordenado por la administración de la ocupación estadounidense, atestiguando con esa votación ante el pueblo iraquí que el Parlamento de Iraq ha vendido el país y su pueblo al ocupante.
No es sorprendente que la mayoría de los componentes del Parlamento iraquí, como pensaban sus amos los ocupantes, haya firmado un acuerdo tan vergonzoso… Emulando a los estafadores, firmaron un marco general de acuerdo sin discutir siquiera las cuestiones que contenía, después de exhibir un miserable tira y afloja, haciéndose los renuentes durante días a nivel de mera imagen como si en realidad tuvieran alguna resolución que aprobar o rechazar.
Han perdido toda noción de integridad porque su deber era condenar la situación que Iraq padece tanto a nivel nacional como histórico y moral. Sobre todo son culpables por una acción en nombre del Glorioso. Con sus propias manos, temerosas o ansiosas, firmaron ese acuerdo haciendo del desastre de la ocupación una calamidad mayor. Porque han aceptado ese pacto a pesar de ir contra los intereses de Iraq y su pueblo. Es una ostensible traición la porque la decisión dependía de ellos y lo aprobaron conscientes de lo que hacían.
Algunos bloques políticos estuvieron exhibiendo una farsa antes de manifestar su aprobación, especialmente quienes presentaban un supuesto documento de reforma política como precio para firmar el vergonzoso acuerdo. Un documento que parecía asegurar intereses de facción pero que de hecho no era más que un intento de conseguir intereses y ventajas políticas egoístas a costa de la destrucción del país.
En cualquier caso, lo que ha conseguido ese bloque ha sido un seguro de vida -como es habitual- para el proyecto de la ocupación, al igual que hizo en el último minuto con la Constitución bajo el pretexto de garantizar la posibilidad de presentar enmiendas a algunos párrafos de la Constitución durante los primeros cuatro meses. El resultado fue que se aprobó la Constitución sin que hasta el momento se haya presentado enmienda alguna.
Finalmente aprobaron el SOFA, aunque hacían ver que estaban bloqueándolo a pesar de ser un pacto que apoya el proyecto de la ocupación, perjudicando los altos intereses del pueblo iraquí, de ese pueblo que está pagando esa ocupación con su sangre. Todos los que apoyan ese acuerdo no van a conseguir nada de él. No han aprobado más que una herramienta que da alas al proyecto de la ocupación.
El voto de ayer [27.11.08] fue suficiente para asegurar al pueblo iraquí que los parlamentarios que votaron ese pacto han vendido al pueblo de Iraq al ocupante, pero gracias a Dios esa venta no tiene valor alguno, es totalmente inválida, porque no se puede vender lo que no se posee.
Iraq seguirá siendo el país del pueblo que está contra el ocupante y contra sus supuestos proyectos políticos a través de todos los medios de la resistencia y oposición, mientras que la vergüenza caerá, hasta el Día del Juicio Final, sobre los hombros de todos aquellos que han autorizado ese acuerdo
La Asociación de Académicos Musulmanes en Iraq (AMSI) condena la falsía de esa venta barata por parte de la mayoría de los miembros del Parlamento, y alerta a todos cuantos anunciaron su rechazo a la misma que ya ha llegado el momento de que se aparten de un proceso político equivocado que presume representar a la voluntad del pueblo iraquí. Lo que ha sucedido no hace más que profundizar la división. No se puede aceptar que se aparente rechazar el Acuerdo, que se reconozca que es una conspiración contra Iraq y los iraquíes y se insista en el error permaneciendo dentro del proceso político con la excusa de intentar invalidarlo. Nuestro pueblo no puede tolerar más ninguna incertidumbre ni doblez de posiciones.
Aseguramos a los miembros del Parlamento que firmaron ese acuerdo que la ocupación tiene corta vida y que no deberían comprometerse más con ella. Lo que los parlamentarios iraquíes han hecho ha sido darle al presidente de EEUU una victoria fantástica (e imaginaria), el falso testimonio y la buena conducta de un mentiroso. Le han fallado al pueblo iraquí y se han fallado a ellos mismos.
Que Alá el Altísimo bendiga a quienes rechazaron ese Acuerdo y que elevan su voz en la oposición… frente a quienes se cubren de degradación y humillación y son capaces de venderse a la iniquidad…
Texto original en inglés: