Traducido para Rebelión por Beatriz Morales bastos
El programa iraquí de racionamiento de alimentos dirigido por el Estado se está viniendo abajo y parte de la culpa de ello podría tenerlo la corrupción.
Un nuevo informe [1] del ministerio de Planificación y Cooperación para el Desarrollo de 120.000 familias que habían sido cualificadas para recibir ayuda alimenticia en 15 de las 18 provincias de Iraq concluyó que durante 13 meses el 18% de las familias no habían recibido la ración alimenticia compuesta por nueve artículos; un 31.5% no la había recibido durante 7-12 meses; un 14.5%, durante 4-6 meses; un 22%, durante 2-3 meses y un 14.5% durante un mes.
El informe revelaba también la preocupación por la calidad de la comida: el 16% de las familias afirmó que los artículos del racionamiento de abril eran malos, el 45 dijo que eran aceptables, mientras que el 29% afirmó que eran buenos.
Según el informe, el primero en la lista de artículos malos era el té, seguido del arroz, harina y azúcar.
Mientras tanto, el ministro de Comercio iraquí Abdul-Falah al-Sudani se enfrenta la semana que viene a una moción de censura en el parlamento bajo las acusaciones de desfalco y de corrupción, principalmente en relación a la importación de comida para el sistema de racionamiento de alimentos conocido como Sistema Público de Distribución (PDS, en sus siglas en inglés), según afirmó el pasado 18 de mayo un diputado iraquí.
«Hasta el momento hemos recogido 110 firmas de diputados para esta moción. La corrupción en el ministerio de Comercio es enorme, especialmente en la importación de alimentos no aptos para consumo humano», afirmó el jeque Sabah al-Saidi, presidente del Comité de Integridad del parlamento.
«En este ministerio se han malgastado miles de millones de dólares lo que ha ocasionado que en los últimos años los ciudadanos hayan recibido artículos malos y también retrasos en la distribución [de artículos alimenticios] en algunos lugares», afirmó al-Saidi.
Una mayoría simple de 275 miembros del parlamento es suficiente para obtener la dimisión del ministro de Comercio.
Los días 16 y 17 de mayo al-Sudani compareció ante el parlamento donde reconoció que había habido algunos casos de corrupción en su ministerio y admitió que «algunos artículos alimenticios eran malos». El hermano del ministro y otro alto cargo fueron detenidos mientras que otros siete, incluido otro hermano, continúan libres.
Las raciones siguen siendo vitales
«A pesar de los puntos negativos registrados por el informe, las familias siguen considerando que el sistema de distribución de alimentos es la única forma que ofrece garantías de asegurar su seguridad alimentaria», señala el informe.
El sistema de racionamiento de alimentos de Iraq, conocido como Sistema Público de Distribución (PDS, en sus siglas en inglés), se estableció en 1995 como parte del programa de Naciones Unidas «petróleo por por alimentos» tras la invasión de Kuwait por parte de Iraq hace 17 años. Sin embargo, desde la invasión de Iraq dirigida por Estados Unidos en 2003 este programa se ha ido viniendo abajo debido a la inseguridad, la mala gestión y la corrupción [2].
Se supone que las raciones mensuales del PDS contienen arroz (3kg por persona); azúcar (2kg por persona); aceite comestible (1.25kg o un litro por persona ); harina (9kg por persona ); leche para adultos (250g por persona); té (200g por persona); alubias (250g por persona ); leche infantil (1.8kg por niño); jabón (250g por persona ); detergente (500g por persona) y salsa de tomate concentrada (500g por persona).
[1] www.irinnews.org/report.aspx?
[2] N. de la t.: Recordemos que en los años de las sanciones a Iraq la propia ONU calificó el sistema de distribución de alimentos iraquí de excelente.
Enlace con el original: www.irinnews.org/report.aspx?