El presidente de Irán, Mahmoud Ahmadinejad, dijo el domingo que su país estaba listo a ayudar a Estados Unidos y Gran Bretaña en Irak, pero sólo si se comprometen a cambiar su actitud y retiran sus tropas del país. El comentario se produjo en medio de llamados de Washington para convencer a Irán y Siria […]
El presidente de Irán, Mahmoud Ahmadinejad, dijo el domingo que su país estaba listo a ayudar a Estados Unidos y Gran Bretaña en Irak, pero sólo si se comprometen a cambiar su actitud y retiran sus tropas del país.
El comentario se produjo en medio de llamados de Washington para convencer a Irán y Siria para ayudar a prevenir que Irak se hunda en una guerra civil.
Un importante funcionario estadounidense dijo este mes que Washington estaba «en principio» listo para discutir sobre Irak con Irán, pero que la coordinación de tales charlas no está fijada.
Ahmadinejad había dicho previamente que conversaría con Estados Unidos, pero sólo si Washington modifica su conducta.
«La nación iraní está lista para ayudarlos a salir del pantano (en Irak) con una condición (…) deben comprometerse a corregir su actitud,» dijo Ahmadinejad en un discurso televisado durante un desfile de la milicia religiosa Basij.
«Vuelvan a casa y lleven a sus fuerzas detrás de sus fronteras para que sirvan a sus naciones,» agregó Ahmadinejad.
El presidente de Irak, Jalal Talabani, realizará una pospuesta visita a Teherán el lunes para discutir la situación iraquí luego de que se confirmó que un toque de queda, impuesto luego de los masivos ataques suicidas registrados el jueves, sería levantado.
Ahmadinejad condena regularmente la ocupación de Irak y se queja por las bases estadounidense ubicadas en la región.
Washington acusa a Teherán de intentar fomentar las tensiones en la zona, mientras Irán culpa de la violencia a la presencia de tropas estadounidenses.
El presidente iraní también critica lo que considera es una actitud hostil de Estados Unidos y Gran Bretaña hacia Irán, particularmente por su disputado programa nuclear.
Naciones occidentales acusan a Irán de buscar el desarrollo de bombas atómicas, un cargo rechazado por Teherán, que sostiene que su programa nuclear sólo busca generar electricidad.
Ahmadinejad instó a los países de la región a trabajar juntos para expulsar a las fuerzas extranjeras de su suelo.
«Juntemos nuestras manos y expulsemos a los enemigos que se oponen a la humanidad de nuestros países y nuestras tierras sagradas,» dijo Ahmadinejad.
En el pasado Irán hizo un llamado a favor de un pacto de seguridad entre los estados regionales, pero los países árabes del Golfo Pérsico, dominados por musulmanes sunitas, albergan sospechas respecto a las intenciones que tienen en la región los musulmanes chiítas que controlan Irán.