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La escalada en Iraq en cifras

Fuentes: tomdispatch

Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens

No cabe duda de que algún día descubriremos que el término «oleada» – como en el plan de «oleada» del presidente (o el «nuevo camino adelante») anunciado a EE.UU. en enero – resultaba de la necesidad de evitar el lenguaje (y la experiencia) de la era de Vietnam. Así como no debía haber «bolsas para cadáveres» (o cámaras que las filmaran cuando los muertos volvieran a casa), tampoco debía haber «recuentos de víctimas» («Hemos hecho un esfuerzo consciente por no ser un equipo de recuentos de víctimas» fue la manera como lo formuló el presidente) así como no habría «cenagales,» ni la necesidad de buscar esa»luz al final del túnel,» así como, con toda seguridad, no debía haber «escaladas.»

Las escaladas de la era de Vietnam, que llegaron a más de 500.000 soldados estadounidenses, a amplias bases y a un masivo poderío aéreo y naval dentro y alrededor de Vietnam (Laos, y Camboya), quedaron enteramente desacreditadas. Cada intensificación en la llegada de tropas, o simplemente en las campañas de bombardeo en constante aumento, condujeron sólo a más miseria y muerte para los vietnamitas y al desastre para EE.UU. Y sin embargo, lo que no sorprende, la experiencia estadounidense en Iraq – otro intento de ocupación de un país y de una cultura extranjera – ha sido como un misil guiado por el calor para los recuerdos estadounidenses aún ardientes de Vietnam.

Como señalara a comienzos de abril de 2003 la historiadora Marilyn Young cuando apenas comenzaba la invasión de Iraq: «En menos de dos semanas, ha vuelto un vocabulario de hace 30 años: problema de credibilidad, búsqueda y destrucción, difícil distinguir al amigo del enemigo, interferencia civil en los asuntos militares, la dominación de la política interior, la victoria, o más a menudo, perder los corazones y las mentes.» Al llegar agosto de 2003, el gobierno de Bush, por cierto, esperaba que sólo quedaran en Iraq unos 30.000 soldados estadounidenses, estacionados en vastas bases «duraderas» en un país pacificado. De modo que, de cierto modo, ha sido desde entonces un ‘oleadatón.’Ahora ya pasó la hora de calificar el «nuevo camino adelante» del presidente como a su equivalente vietnamita. Hay que reconocer que una «oleada» suena mucho más reconfortante, menos agresiva, menos duradera, y de cierto modo menos dañina que una «escalada,» pero el hecho es que ya han pasado seis meses desde la última escalada del poder estadounidense en Iraq. También es indudable que ha llevado allí cantidades de soldados, así como aviones y poder de fuego dentro y alrededor de ese país insuperadas desde la invasión de 2003. Y es demasiado natural que hayan seguido otros «picos» más atroces.

En septiembre, el general David Petraeus, comandante de nuestra escalada en Iraq, y Ryan Crocker, el embajador de nuestra escalada en ese país, presentarán su «informe sobre el progreso» al Congreso. («Progreso» fue otra palabra favorita en los pronunciamientos oficiales estadounidenses de la era de Vietnam.) El nombre en sí dice más o menos lo que se puede esperar. El informe ya ha sido reducido a una «instantánea» de una serie de operaciones continuas, que no debieran ser juzgadas o evaluadas seriamente hasta por lo menos noviembre, o tal vez hasta comienzos de 2008, o…

Teniendo eso en consideración, lo que sigue es un segundo informe «según las cifras» de Tomdispatch sobre Iraq. Considérenlo como un intento de poner en perspectiva el cenagal junto con la pesadilla iraquí – dos palabras clásicas de la era de Vietnam.

Sólo se puede confiar en pocas cifras provenientes de Iraq. Una cuenta exacta entre la confusión, el caos, y el derramamiento de sangre, bajo una ocupación que fracasa, en un país que carece esencialmente de un gobierno central, en un paisaje mediático estadounidense que sigue mareado por la manipulación interminable del gobierno Bush y sus comandantes militares, es probablemente casi imposible. Pero por aproximadas que sean las cifras que siguen, ofrecen un cuadro demasiado vívido de lo que desencadenó la invasión tan deseada por el presidente. Ningún país podría sufrir un desarraigo, destrucción, muerte, pérdida y privaciones, y seguir colectivamente sano.

Los funcionarios civiles y militares estadounidenses hablan ahora de permanecer en Iraq hasta fines de 2008 o 2009, o en la década siguiente, o por períodos indefinidos pero cada vez más largos. Y a pesar de ello Iraq (según las cifras) ha sido un tiro por la culata mes tras mes, año tras año, durante más de cuatro años. Nunca hubo motivos para creer que la última escalada – o alguna futura escalada, llámesela como sea, realizada a través de los militares de EE.UU. o mediante un creciente ejército fantasma de mercenarios empleados por firmas privadas de seguridad – podría lograr de algo que no sea acelerar el ritmo de ese fracaso. Así que imaginemos lo que será Iraq según las cifras en 2008 o 2009, en vista de la clara determinación de los «pensadores estratégicos» del gobierno de Bush, de ocupar ese país hasta el futuro lejano.

Esta es, por lo tanto, la escalada en Iraq en cifras – casi todas continúan creciendo con la «oleada» – desde mediados de agosto de 2008:

Cantidad de soldados estadounidenses estacionados en Iraq: 162.000 (más por lo menos varios miles de empleados del gobierno) la cifra más alta hasta ahora.

Cantidad estimada de contratistas privados pagados por [los contribuyentes de] EE.UU.: De nuevo más de 180.000, indudablemente la cifra más alta de todos los tiempos. Esa cifra incluye a aproximadamente a 21.000 estadounidenses, 43.000 contratistas extranjeros no iraquíes (incluyendo a chilenos, nepaleses, colombianos, indios, fijanos, salvadoreños y filipinos, entre otros), y 118.000 iraquíes, pero no incluyen un recuento total de «contratistas privados de seguridad que protegen a funcionarios y edificios gubernamentales,» según cifras del Departamento de Estado y del Pentágono obtenidas por Los Angeles Times.

Porcentaje de contratistas privados en las fuerzas totales de EE.UU. desplegados en la Segunda Guerra Mundial y en la Guerra de Corea: entre un 3 y un 5%, según el testimonio ante el Congreso del abogado de derechos humanos Scott Horton. En Vietnam y en la Primera Guerra del Golfo, esa cifra llegó a un 10%. Ahora es por lo menos cerca de un 50%.

Cantidad de compañías privadas que trabajan en Iraq con contratos del gobierno de EE.UU.: 630, con personal de más de 100 países, según Jeremy Scahill, autor del éxito de ventas «Blackwater, The Rise of the World’s Most Powerful Mercenary Army.»

Salario típico de un ex soldado de las Fuerzas Especiales de EE.UU. que trabaja para una compañía privada de seguridad: 650 dólares al día, según Scahill, «después de que la compañía toma su parte.» Esa suma, sin embargo, puede llegar a 1.000 dólares al día.

Cantidad de camiones en la ruta cada día como parte de la operación de resuministro de EE.UU. en Iraq: 3.000

Cantidad de ataques desde junio de 2006 a mayo de 2007 contra convoyes de suministro de EE.UU. protegidos por contratistas privados de seguridad: 869, cerca el triple de los doce meses anteriores.

Cantidad de contratistas privados que han muerto en Iraq: Más de 1.000, según el Departamento del Trabajo de EE.UU., basado en cifras parciales porque las compañías privadas no tienen que declarar sus muertos en la guerra.

Costo pronosticado de una oleada de 21.500 soldados estadounidenses hacia Iraq, según los cálculos de la Casa Blanca en enero de 2007: 5.600 millones de dólares, cifra presentada el mes en el que se anunció la estrategia de la oleada del presidente.

Costo pronosticado de una oleada de un año de 30.000 a 40.000 soldados, según Robert Sunshine, director adjunto de análisis presupuestario de la Oficina Presupuestaria del Congreso, no partidaria: 22.000 millones de dólares (dos años con un rebaja a 40.000 millones). Estas cifras fueron presentadas en un testimonio ante el Congreso cinco meses después de que fuera lanzada oficialmente la oleada del presidente.

Porcentaje de dólares asignados anualmente por el gobierno de EE.UU. y gastados en actividades relacionadas con Iraq: Más de un 10%, o sea un dólar de cada 10, según Sunshine de CBO.

Costo mensual estimado de las guerras de Iraq (y Afganistán): 12.000 millones de dólares – 10.000 millones para Iraq – un tercio más que en 2006, según el Servicio no-partidario de Estudios Legislativos.

Costo total estimado de la Guerra de Iraq, si tiene lugar la «previsión optimista» de Robert Sunshine – 30.000 soldados de EE.UU. pertenecen en Iraq en 2010: Más de

1.000.000.000.000 de dólares. (Si su previsión menos optimista es exacta – 75.000 soldados en 2010 – más cerca de 1.500.000.000.000.)

Cantidad de iraquíes que se estima han huido de su país: Entre 2 millones y 2,5 millones. Unos 750.000 a Jordania, 1,5 millones a Siria, 200.000 a Egipto y Líbano – y entre 40.000 y 50.000 huyen cada mes, 2.000 al día, según cifras de la ONU. Funcionarios de la oficina central de viajes en Bagdad son inundados por hasta 3.000 solicitudes de pasaportes por semana. Además, aunque es una incógnita, puede ser que más de dos millones de iraquíes sean ahora refugiados internos, desarraigados de sus hogares en gran parte por la violencia sectaria y la limpieza étnica. Aproximadamente un 70% de estos son mujeres y niños, según la UNICEF.

Cantidad de refugiados iraquíes admitidos a EE.UU. en julio: 57; sólo 133 en lo que va de año.

Cantidad de iraquíes retenidos en prisiones estadounidenses en Iraq: Unos 22.500, según funcionarios militares de EE.UU., un salto al nivel insuperado hasta ahora de 16.000 en febrero cuando comenzó la oleada. (Las prisiones estadounidenses en Iraq también siguen siendo expandidas.)

Cantidad de iraquíes liberados del encarcelamiento estadounidense en el pasado mes: 224.

Cantidad de combatientes extranjeros (yihadistas) retenidos por los militares de EE.UU. en Iraq: 135 (casi la mitad son saudíes).

Cantidad estimada de balas disparadas por soldados de EE.UU. por cada insurgente muerto en Iraq (o Afganistán) 250.000, según John Pike, director del grupo de investigación militar en Washington GlobalSecurity.org. Esto asciende a 1.800 millones de munición para armas pequeñas por año. Como las fábricas de munición de EE.UU. no pueden satisfacer la demanda, 313 millones de balas de esas municiones fueron compradas a Israel el año pasado por 10 millones de dólares más que si fueran producidas en el interior de EE.UU.

Porcentaje de amputaciones realizadas a heridos de guerra de EE.UU. en Iraq: Se estima que es un 6%. El promedio en conflictos anteriores de EE.UU., donde los equivalentes de Artefactos Explosivos Improvisados y coches bomba no jugaron un papel semejante, fue de un 3%.

Estimación de la cantidad de prótesis de extremidades necesitadas al año sólo para iraquíes en el norte de Iraq: 3.000 según la Sociedad de la Media Luna Roja y el director general de servicios sanitarios en Mosul. (A diferencia de los soldados estadounidenses, los iraquíes que han perdido extremidades sólo tienen acceso a cantidades limitadas de prótesis anticuadas.)

Costo de un ataúd en Bagdad: Entre 50 y 75 dólares. Costo de un ataúd en tiempos de Sadam Husein: entre 5 y 10 dólares.

Cantidad de civiles iraquíes que murieron en julio de 2007: 1.652, según cifras compiladas por los ministerios iraquíes de Salud, Defensa, e Interior; 2.024 según la cuenta de Associated Press; 1.539 según el Washington Post. Todos, con la excepción del Post afirman que se trata de un «pico» en la cantidad de víctimas. Es seguro que semejantes cifras constituyen, por una serie de razones, recuentos considerablemente inferiores a la realidad.

Cantidad aproximada de civiles estadounidenses que habrían muerto en julio si un nivel semejante de muertes ocurriera en EE.UU.: 18.000, según el experto en Oriente Próximo Juan Cole.

Estimación de las muertes iraquíes desde la invasión de 2003 hasta junio de 2007, si la cifra promedio de 655.000 de The Lancet fue exacta y tasas de muertes similares valieran para el año pasado desde su publicación: Algo por sobre un millón, según Just Foreign Policy. (El estudio de The Lancet ha sido el único informe científico en el terreno sobre las víctimas iraquíes en estos años.)

Cantidad de civiles iraquíes muertos en julio en ataques con bombas con víctimas masivas: 378, un aumento brusco respecto a junio, según el Washington Post. Los cinco meses de oleada de EE.UU. no han causado «un cambio apreciable» en los ataques con vehículos-bomba, según cifras reunidas por reporteros de los periódicos McClatchy.

Cantidad de cuerpos no identificados, presuntamente asesinados por escuadrones de la muerte, encontrados en las calles de Bagdad en junio de 2007: 453, un aumento de un 41% respecto a enero de 2007, el mes antes del comienzo de las operaciones de la oleada, según estadísticas extraoficiales del Ministerio de Salud iraquí tomadas de recuentos en las morgues.

Cantidad de civiles iraquíes muertos o heridos en incidentes de «escalada de fuerza» en puntos de control estadounidenses o cerca de patrullas y convoyes estadounidenses en el pasado año: 429, según estadísticas militares de EE.UU. obtenidas por los periódicos McClatchy. Estas estadísticas, que tuvieron un «pico» durante los recientes meses de escalada, no incluyen muertes civiles durante incursiones en casas o en medio de batallas (y en todo caso son consideradas incompletas, ya que una cantidad desconocida de muertes de la escalada de fuerza no son mencionadas por las unidades de EE.UU.).

Número total de ataques contra fuerzas de EE.UU. y de la coalición, fuerzas de seguridad iraquíes, civiles iraquíes, y objetivos de la infraestructura en junio de 2007: 5.335. Esto significa un promedio diario de 177,8, la cantidad más elevada desde mayo de 2003, según el Pentágono, y un 46% más que en junio de 2006; más de un 68% de estos ataques – 3.671 para ser exactos – fueron lanzados contra tropas de EE.UU., un aumento de un 7% desde mayo de 2007.

Número de ataques en julio de 2007 utilizando el tipo más poderoso de bomba al borde de la ruta: 99, la suma más elevada hasta ahora, según el teniente general Ray Odierno, número dos de EE.UU. en Iraq, y representa un tercio de las víctimas estadounidenses de ese mes.

Número de muertes militares estadounidenses en los meses de la oleada, febrero a julio de 2007: 572, según el sitio en la red Iraq Coalition Casualties. Esto representa un incremento de 189 muertes estadounidenses en comparación con los mismos meses en 2004, 215 más que en 2005, 237 más que en 2006.

Temperatura diaria promedio en verano en Bagdad: 43 a 49 grados C, aunque 54 grados C no es poco común. Raramente baja a menos de 38 grados, incluso de noche.

Cantidad de megavatios de electricidad producidos diariamente en Iraq: Menos de 4.000 megavatios, bajo los niveles anteriores a la invasión en un país en el que la demanda diaria actual es de entre 8.500 y 9.500.

Horas de electricidad suministradas normalmente a los bagdadíes por la red nacional de electricidad: 1 a 2 horas al día. El único recurso, según la periodista francesa Anne Nivat, que vivió recientemente en la «zona roja» de Bagdad, es electricidad producida por pequeños generadores locales, que consumen hasta 76 litros de gasolina por día.

Cantidad de apagones nacionales en sólo dos días en julio de 2007: 4. La ciudad sagrada chií de Karbala estuvo sin electricidad alguna durante por lo menos 3 días consecutivos en julio, durante los cuales su suministro de agua potable «se secó.» («‘Ya no necesitamos documentales en la televisión sobre la Edad de Piedra. Realmente vivimos en ella. Estamos en peligro constante por el agua sucia y la comida podrida que consumimos,’ dijo Hazim Obeid, que vende ropa en un puesto en el mercado de Karbala.»)

Costo de una botella de agua purificada durante la actual escasez de agua: 1,60 dólares por una botella de 10 litros, un aumento de un 33%. (Muchos iraquíes no se pueden permitir la compra de agua embotellada en un país en el que, según un reciente resumen de un estudio de Oxfam de la crisis humanitaria iraquí, un 43% de los iraquíes vive en la «pobreza absoluta,» ganando menos de un dólar al día.)

Porcentaje de ingenieros de aguas que han abandonado Iraq: 40%, según el informe de Oxfam. Un porcentaje similar de profesionales de clase media – doctores, maestros, abogados – evidentemente también han huido. Según Oxfam, algunas universidades y hospitales en Bagdad han perdido un 80% de su personal.

Cantidad de iraquíes que tienen acceso a agua potable limpia: 1 de 3, según cifras de la ONU. (En 2007, enfermedades transmitidas por el agua, incluyendo la diarrea, «el asesino más prolífico de niños bajo los 5 años,» han aumentado en un 70% en algunas áreas durante el año anterior.) De los 3,5 millones de metros cúbicos de agua que se estima necesitan los seis millones de habitantes de Bagdad, la cantidad realmente entregada es de 2,1 millones de metros cúbicos.

Cantidad de líneas de alta tensión en funcionamiento que llegan a Bagdad: 2 de 17, debido al sabotaje insurgente, según un portavoz del Ministerio de Electricidad. Esto contribuye a la peor escasez de electricidad desde la invasión en el verano de 2003. Se informa que la red eléctrica del país está cerca del colapso.

Cantidad de ministros que siguen en el gabinete del primer ministro Nuri al-Maliki: 20.

Cantidad de ministros que se han ido: 17.

Cantidad de altos oficiales que han renunciado recientemente al Ejército Iraquí en protesta contra el gobierno Maliki: 9, incluyendo al jefe del Estado Mayor, general Babaker Zebari.

Cantidad de países a los que han ido parlamentarios iraquíes, que suspendieron su labor para tomar vacaciones de un mes en agosto: Por lo menos seis, según el New York Times, incluyendo a Jordania, Siria, Dubai, Irán, Gran Bretaña, y Egipto, así como a un «balneario en la región más segura de Iraq: el Kurdistán autónomo.»

Costo estimado por minuto de esas vacaciones para EE.UU. en las actuales operaciones en Iraq: 200.000 dólares, según Bob Schieffer de CBS News.

Cantidad de petróleo que posee Iraq: 115.000 millones de barriles en reservas petrolíferas probadas, las terceras por su tamaño en el mundo (después de la vecina Arabia Saudí e Irán). Cálculos de posibles depósitos de petróleo que aún no han sido descubiertos varían entre 45.000 millones de barriles adicionales hasta 400.000 millones de barriles adicionales.

Precio de 40 galones de gasolina bajo Sadam Husein: 50 centavos de dólar.

Precio de 40 galones de gasolina en julio de 2007: 75 dólares en el mercado negro; 35 dólares si un conductor está dispuesto a pasar horas, o incluso días enteros en una fila en una gasolinera.

Porcentaje de los ingresos de Iraq que provienen de la exportación de petróleo: Más de un 90%, aunque la producción de petróleo sigue estando por debajo de la de los peores días del régimen de Sadam Husein.

Cantidad que el Ministerio Iraquí del Petróleo presupuestó para inversión de capital para reforzar la industria petrolera el año pasado: 3.500 millones de dólares, según el último informe del Inspector General Especial de EE.UU. para la Reconstrucción de Iraq.

Cantidad realmente gastada por el Ministerio Iraquí del Petróleo: 90 millones de dólares.

Porcentaje de fondos de capital asignados gastados por el gobierno iraquí en proyectos petroleros, energéticos y educacionales en 2006: 22%.

Cantidad de dinero que falta debido a la corrupción gubernamental, según lo revelado por el máximo investigador contra la corrupción de Iraq, el juez Rahdi al Rahdi: 11.000 millones de dólares.

Cantidad de dólares invertidos en entrenamiento de militares y policías iraquíes: 19.200 millones de dólares. Esto representa 55.000 dólares por recluta iraquí, según una investigación bipartidaria del Congreso de EE.UU.

Monto que el Pentágono ha solicitado para seguir entrenando y equipando a la fuerza de seguridad iraquí: 2.000 millones de dólares.

Porcentaje de equipo que el Pentágono ha entregado a las fuerzas de seguridad iraquíes desde 2003 que no se vuelve a encontrar: 30%. Eso incluye por lo menos «110.000 rifles AK-47 rifles, 80.000 pistolas, 135.000 artículos de blindaje corporal y 115.000 cascos,» según la Contraloría General de los Estados Unidos [GAO, por sus siglas en inglés]. Según el Washington Post: «Un alto funcionario del Pentágono reconoció que parte de las armas probablemente está siendo utilizada contra las fuerzas de EE.UU.»

Cantidad de contenedores de carga hechos de acero estadounidenses en Iraq y Afganistán que ahora se consideran «perdidos»: 54.390 o sea un tercio de la cantidad total, según la GAO.

Costo estimado del entrenamiento de fuerzas de seguridad iraquíes (y afganas) durante la próxima década, si se continúa por el mismo camino: Por lo menos 50.000 millones de dólares, según la Oficina Presupuestaria del Congreso.

Cantidad de bases mayores de EE.UU. en Iraq: Más de 75, según el New York Times.

Costo de las bases de EE.UU. en Iraq (que el Congreso ha determinado por mandato que sean no «permanentes»): Desconocido. En una prestigiosa revista de construcción a fines de 2003, el teniente coronel David Holt, el ingeniero del ejército «encargado de desarrollo de instalaciones» de Iraq, ya hablaba orgullosamente de que «varios miles de millones de dólares» estaban siendo invertidos en la construcción de bases. El Servicio de Estudios Legislativos [CRS, por sus siglas en inglés] afirma, según el Washington Post, que 2.000 millones de dólares fueron destinados a «construcción militar» en Iraq y Afganistán, entre 2004 y 2006; otros 1.700 millones fueron aprobados por el Congreso para 2007. Y el Pentágono sigue construyendo. Para el año fiscal 2008, fueron solicitados 738,8 millones de dólares «para 33 proyectos críticos de construcción para Iraq y Afganistán.» (Cuando se trata de construcción se base, estas cifras son indudablemente subestimaciones.)

Cantidad que ha recibido hasta ahora la antigua subsidiaria de Halliburton: Kellogg, Brown, and Root (conocida ahora como KBR) por un contrato de antes de la guerra para suministrar a los militares estadounidenses alimentos, combustible, viviendas, y otras necesidades: Por lo menos 20.000 millones de dólares. Una auditoría del Pentágono de 16.200 millones de dólares de trabajo de KBR «estableció que 3.200 millones de dólares de facturación de KBR eran cuestionables o no estaba justificados por documentación.»

Porcentaje de iraquíes que no se pueden permitir la compra de suficientes alimentos: Un 15% según Oxfam.

Porcentaje de niños iraquíes que están desnutridos: Un 28% (en comparación con un 19% antes de la invasión); Porcentaje de bebés nacidos con peso insuficiente: Un 11% (en comparación con un 3% de antes de la invasión).

Porcentaje de niños iraquíes a los que ahora se considera que sufren de «impedimentos» educacionales: Un 92%, según un estudio citado por Oxfam.

Costo de un solo vehículo aéreo sin tripulación Predator (UAV), armado con dos misiles Hellfire: Más de 3 millones de dólares. (Por lo menos 5 Predator se han estrellado o fueron derribados durante el año pasado en Iraq y Afganistán.)

Costo del último UAV [siglas en inglés de vehículo aéreo no tripulado] el «cazador-asesino» MQ-9 Reaper, que ahora está siendo desplegado en Afganistán y pronto lo será en Iraq: 7 de millones de dólares. El Reaper es cuatro veces más pesado que el Predator y puede ser armado con 14 misiles Hellfire o cuatro Hellfire y 2 Municiones de Ataque Directo Conjunto de 500 libras. Es considerado equivalente por su poder de fuego al F-16. Según el periodista de Associated Press Charles Hanley: «Su piloto, mientras bombardea objetivos en Iraq, estará sentado ante una consola de vídeo, a 11.300 kilómetros de distancia en Nevada.»

Cantidad de aviones estadounidenses en el espacio aéreo iraquí en cualquier momento dado: 100, según Hanley.

Aumento en la cantidad de bombas lanzadas sobre Iraq en los primeros seis meses de 2007 en comparación con los primeros seis meses de 2006: quintuplicada.

Porcentaje de recursos petroleros iraquíes alrededor de Basora en el sur chií de Ira, donde, en septiembre de 2006, los británicos lanzaron su propia versión fracasada de la actual operación de escalada estadounidense «aclarar, retener y reconstruir» en Bagdad: un 66%.

Cantidad de médicos asesinados por «pistoleros no identificados» en la «pacífica» Basora desde 2003: 12.

Número de ocasiones en la que la base en el aeropuerto en las afueras de Basora, que alberga a una oficina regional bien defendida por barricadas de la Embajada de EE.UU. y a los últimos 5.500 de los 40.000 soldados que Inglaterra envió a Iraq, ha sido atacada por morteros o cohetes durante los últimos cuatro meses: 600.

Efecto de los gastos en la Guerra de Iraq sobre los beneficios de las principales corporaciones armamentistas: Northrop Grumman acaba de anunciar un aumento de un 15% en las ventas en el segundo trimestre por sobre 2006 en su división de información y servicios, de un 7% en su división de electrónica; la unidad de sistemas de combate de General Dynamics acaba de registrar un aumento de un 19% en las ventas. Los beneficios de Lockheed Martin aumentaron en un 34% a 778 millones de dólares, según Eli Clifton de Inter Press Service.

Costo estimado del envío de un soldado estadounidense a Iraq por un año: 390.000 dólares, según el Servicio de Estudios Legislativos (CRS).

Costo del transporte en avión de un soldado desde la zona de conflicto a EE.UU.: 627,80 dólares. Es el precio que el Pentágono paga a FedEx y a UPS, entre otras compañías, por cada soldado llevado de vuelta a EE.UU.

Tonelaje estimado del equipo de EE.UU. que podría ser llevado fuera de Iraq y embarcado a casa desde Kuwait en caso de una decisión de retirarse: Un millón de toneladas.

Porcentaje de estadounidenses en el último sondeo de Washington Post-ABC News que habían servido en Iraq o «tenían un amigo o pariente cercano que sirvió en Iraq,» que aprueban el manejo del conflicto de Iraq por el presidente: un 38%. En un sondeo en mayo de New York Times/CBS News, menos de la mitad de las familias de militares y miembros de las fuerzas armadas estuvieron de acuerdo con que «EE.UU. hizo lo correcto al invadir Iraq.»

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Tom Engelhardt dirige el Nation Institute’s Tomdispatch («un antídoto habitual ante los medios dominantes»), es co-fundador de The American Empire Project y es también el reciente autor de «Misión Unaccomplished: Tomdispatch Interviews with American Iconoclasts and Dissenters» (Nation Books), la primera recopilación de las entrevistas realizadas en Tomdispatch.

[Nota: Si en la lista arriba mencionada, hay un número sin identificar la fuente, revise la fuente previamente señalada. Me he basado en numerosos otros sitios en la Red, así como en mis propias lecturas, al compilar este informe. El reciente estudio de Oxfam sobre la crisis humanitaria iraquí ha sido indispensable. Utilicé directamente varias cifras de ese informe sin identificar las fuentes, porque se trataba de un archivo en formato pdf. El informe puede ser encontrado aquí (archivo pdf en inglés); un resumen sucinto de algunos de sus cifras puede encontrarse en «Worse than You Think» de Peter Rothberg en el sitio en la Red de la revista The Nation. Ahora estoy concentrado en el blog «Danger Zone» de Noah Shachtman en la revista Wired, que es invaluable en asuntos militares y de seguridad nacional. El sitio en la Red Informed Comment de Juan Cole sigue siendo una parada obligatoria temprano por la mañana en mi día en la Red, así como Antiwar.com y «The War in Context» de Paul Woodward, todos los cuales aprovecho bastante en la compilación de este trabajo. También recomiendo consultar el sitio en la Red de permanente utilidad, Electronic Iraq.]

Nota del traductor: En caso de necesidad, consulte los hipervínculos señalados en el artículo original en:

http://www.zmag.org/content/showarticle.cfm?SectionID=15&ItemID=13526

Copyright 2007 Tom Engelhardt