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La ONU advierte de que el país puede tener 2,3 millones de desplazados para fin de año

Fuentes: Gara

El número de desplazados dentro de las fronteras de Irak podría ser de los 2,3 millones al final del año, frente a los 1,8 millones que existen en la actualidad, según avanzó ayer el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Antonio Guterres, en El Cairo. «Al ritmo actual de 40.000 a 50.000 […]

El número de desplazados dentro de las fronteras de Irak podría ser de los 2,3 millones al final del año, frente a los 1,8 millones que existen en la actualidad, según avanzó ayer el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Antonio Guterres, en El Cairo.

«Al ritmo actual de 40.000 a 50.000 al mes, alrededor de 2,3 millones de Iraquíes podrían ser desplazados de aquí a finales de este año», declaró Antonio Guterres, Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), ante los representantes de la Liga Árabe, a quienes pidió una mayor implicación en favor de los refugiados.

«Me siento obligado a realizar un llamamiento», manifestó, antes de precisar que se trata de «una llamada al mundo musulmán y más concretamente al mundo árabe para desempeñar un mayor papel en el debate, en la formulación y en la aplicación de las políticas internacionales en favor de los refugiados, ya que la mayoría de ellos son musulmanes».

El responsable de la organización internacional hizo esta petición en un discurso pronunciado tras reunirse en El Cairo con los ministros de Exteriores de la Liga Árabe..

En la actualidad, alrededor de 1,8 millones de personas fueron desplazados dentro de Irak y otros dos millones huyeron de su país desde la invasión de Estados Unidos en marzo de 2003, según las estimaciones de la ONU. Subrayó que se trata del «más importante desplazamiento de población en Oriente Medio desde los acontecimientos dramáticos de 1948 que ha obligado a uno de cada ocho iraquíes a huir de su país», indicó en referencia al éxodo de los palestinos después de la fundación del Estado de Israel.

Dimensión humanitaria

Las Naciones Unidas van a organizar el 17 y 18 de abril una conferencia internacional en favor de los refugiados iraquíes en Ginebra con «el objetivo de destacar ante la comunidad internacional la dimensión humanita- ria de este problema que va cada vez a peor y en aras a suscitar compromisos para darle una respuesta». Guterres consideró necesaria una «asociación estratégica con el mundo árabe».

El ACNUR cifró en enero en 46 millones de euros sus necesidades para ayudar a los refugiados y desplazados iraquíes en 2007, más del doble de la suma gastada en 2006.

Un millón de estos refugiados, según las estimaciones de la Organización de Naciones Unidas, se instalaron en Siria, 750.000 en Jordania y 150.000 en Egipto. «Es mi deber como alto comisionado pedir a esos dos países (Siria y Jordania) que continúen dando protección a las personas que han pedido asilo en sus territorios, pero también es mi deber pedir a la comunidad internacional que comparta esa responsabilidad», declaró Guterres.

El alto comisionado añadió que Siria y Jordania se hacen cargo de los ciudadanos iraquíes con sus propios recursos, por lo que pidió a la comunidad internacional que coopere con ambos países ofreciendo «respaldo financiero, económico y técnico», así como acogiendo a «un numero mayor de refugiados iraquíes».

Al Maliki anuncia una reforma de su Gobierno

El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, anunció ayer en Bagdad que reformará su Gobierno en las dos próximas semanas con el fin de intentar salvar su Ejecutivo. El anuncio se produce en medio de llamamientos a la formación de una nueva coalición que excluiría a las formaciones acusadas de «mantener vínculos con organizaciones que participan en violencias»..

Desde hace varios meses, responsables de EEUU presionan a Al Maliki para que forme una nueva alianza de «moderados» sunitas y chiítas. La materialización de esa coalición supondría descartar al jefe chiíta Moqtada al Sadr. Precisamente uno de los bastiones chiítas de Bagdad, la Ciudad Sadr, controlada por las milicias del Ejército del Mahdi, dirigidas por Moqtada al Sadr, fue ocupado por cientos de soldados estadounidenses que protagonizaron un registro casa por casa.

El inicio de la tercera semana de vigencia del plan de seguridad para Bagdad y sus alrededores no modificó la situación. Al menos tres mujeres y una niña murieron como consecuencia de una explosión registrada al paso de una patrulla estadounidense al sur de Bagdad, informaron fuentes de la Policía iraquí. Otra persona murió en un atentado con coche bomba en el barrio de Al Karrada, en el centro de Bagdad.