La OTAN continuará su misión de entrenamiento militar en Iraq hasta finales de 2013, según declaraciones hechas por un responsable de la OTAN este lunes (12 de septiembre), lo que podría indicar la flexibilidad de Bagdad respecto a la presencia de tropas extranjeras meses antes de la fecha tope para que las tropas estadounidenses se […]
La OTAN continuará su misión de entrenamiento militar en Iraq hasta finales de 2013, según declaraciones hechas por un responsable de la OTAN este lunes (12 de septiembre), lo que podría indicar la flexibilidad de Bagdad respecto a la presencia de tropas extranjeras meses antes de la fecha tope para que las tropas estadounidenses se retiren.
Washington, que mantiene 43.000 tropas en Iraq, debe retirarlas completamente a finales de año, pero hay discusiones en Bagdad sobre si las tropas deben permanecer en Iraq para cumplir misiones de entrenamiento o asesoramiento.
El coronel Michael Russel, jefe de personal de la misión de entrenamiento de la OTAN en Iraq, afirma que la Alianza acordó la permanencia de su equipo en Iraq, compuesto por unas 160 personas, una vez que Bagdad decidiera no extender la misión más allá de 2013 y pagar parte de los costes. Además, Iraq ha ofrecido a la OTAN «privilegios de protección» tales como el derecho a la autodefensa, a pesar de que los detalles siguen aún en discusión, según afirma Russel.
Los responsables estadounidenses han afirmado que exigirían similares privilegios si Washington mantiene sus tropas en Iraq una vez finalizado el año en curso. Estados Unidos dio por terminadas sus operaciones de combate hace un año y según el acuerdo firmado en 2008 todas sus tropas deberían haberse retirado del país el 31 de diciembre, a menos que Bagdad invite a Estados Unidos a mantener su presencia, decisión que podría ser políticamente muy problemática para el primer ministro Nuri al-Maliki.
La más insignificante operación que realice la OTAN está completamente vigilada. Bien distinto de lo que ocurre en Afganistán, donde la OTAN es responsable de la mayor fuerza internacional de ataque liderada por Estados Unidos en la guerra contra los talibán, la Alianza en Iraq no ha jugado un papel de combate, ya que la mayoría de los aliados europeos se negaron a participar en la coalición liderada por George W. Bush, cuando invadió el país en 2003.
Desde 2004, la OTAN ha realizado misiones de entrenamiento en Iraq -con expertos en áreas de logística y vigilancia- para las nuevas fuerzas de seguridad iraquíes. Ahora el equipo de la OTAN incluye a unos 12 estadounidenses, de acuerdo con las afirmaciones de Russell.
Hace más de ocho años que la invasión estadounidense derrocó a Sadam y las fuerzas de seguridad iraquíes aún combaten contra una decidida resistencia sunní y unas milicias shiíes, ambas capaces de llevar a cabo ataques mortales. Las fuerzas de seguridad iraquíes aún necesitan defensas aéreas y navales y la OTAN ha estado trabajando con Estados Unidos para identificar las carencias de las fuerzas de Iraq: «[…] Nuestro equipo ha estado trabajando con las misiones de asistencia de entrenamiento para Iraq, con el fin de anticiparse a la retirada total de las tropas estadounidenses este año, y hemos trabajado con los estadounidenses para identificar las carencias que aún quedan por resolver», afirma Russell.
Texto original en inglés en: www.uruknet.info?p=81367
Traducido para IraqSolidaridad por Paloma Valverde