Hay una serie de puntos que queremos hacerle llegar con la esperanza de que el nuevo gobierno estadounidense sepa sacar partido de ellos, dejando a un lado los errores cometidos por el anterior gobierno: 1. Vuestra victoria en la carrera presidencial no ha ocurrido porque los estadounidenses hayan descubierto de repente que no deben ser […]
Hay una serie de puntos que queremos hacerle llegar con la esperanza de que el nuevo gobierno estadounidense sepa sacar partido de ellos, dejando a un lado los errores cometidos por el anterior gobierno:
1. Vuestra victoria en la carrera presidencial no ha ocurrido porque los estadounidenses hayan descubierto de repente que no deben ser racistas, sino por los múltiples errores que ha cometido el gobierno de Bush, que no dejó a los estadounidenses posibilidad alguna de pensar en mantener este gobierno, y la más clara prueba de ello es la cantidad de votos que ustedes han logrado.
2. Sus promesas electorales se han centrado en el cambio. Ha llegado su momento, nosotros coincidimos con usted en que el momento ha llegado. La destrucción que ha sembrado el anterior gobierno en nuestro país, muertos, desplazados, sectarismo y racismo, ha dañando vuestra imagen como pueblo estadounidense. Ha destruido los bienes de un país en el que no sois bienvenidos, como vosotros mismos habéis reconocido. Por ello te pedimos un cambio y que no escuches a los que dicen que una retirada estadounidense significaría una derrota. Nosotros decimos que la retirada es la victoria de la razón y de la lógica.
3. La gran cantidad de votos que habéis conseguido os brinda la oportunidad de poder tomar decisiones de forma valiente porque las temeridades de quien os precedió han hecho daño al pueblo estadounidense antes que a nadie. Dios nos informó en su libro sagrado que creó al ser humano para conocerse y no para matarse entre ellos: «Hemos hecho de vosotros pueblos y tribus, para que os conozcáis unos a otros. Para Dios, el más noble de entre vosotros es el que más Le teme.» (Corán, 49:13 traducción de Julio Cortes).
4. Somos un pueblo conocido por su valentía, honor y buen trato al desconocido, a quien nos trata bien mejor lo recibimos. Pero sacrificaremos nuestra alma frente a aquellos que nos ataquen. Imaginad lo que haremos con el ocupante, que profana nuestra religión, nuestro país, sus infraestructuras, su seguridad y su unidad.
5. Considerar la seguridad de nuestro país a través de la firma de un acuerdo con otros para lograr vuestros intereses y los suyos a costa de los intereses de nuestro país dará malos resultados. No debéis siquiera intentar esto, como tampoco debéis resolver vuestros problemas con otros a costa nuestra, a buen entendedor pocas palabras bastan…
6. Seremos flexibles al tratar vuestra retirada si no firmáis el acuerdo de seguridad con los partidos colaboracionistas y el gobierno impuesto. Debéis corregir vuestros errores y actuar con valentía pagando compensaciones a todo aquel a quien habéis destrozado su vida, su familia, su casa. Debéis liberar a todos los prisioneros en vuestro poder, hasta el último de ellos, obligar al gobierno sectario a que libere a todos los detenidos, recomponer el equilibrio de seguridad en Iraq. Si no es así no podréis llevar a cabo el cambio que pregonáis, pero si lo hacéis pasaréis a formar parte de los valientes que entran en la Historia por la puerta grande.
Finalmente, nosotros, la resistencia, mantenemos nuestro compromiso de liberar nuestro país y no cejaremos en el empeño. La historia escrita por nuestros abuelos es una buena prueba, sus descendientes sabrán estar a la altura de sus antepasados a la hora de defender los valores sagrados de nuestra nación.
* El Consejo político de la resistencia está formado por el Ejército Islámico en Iraq y Ansar al Sunna, grupos a los que se han sumado Hamas (iraquí) y el Frente Islámico de Resistencia Iraquí.
* Texto original en: http://pciraq.org/index.php?option=com_content&task=view&id=51&Itemid=26