La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) ha exigido el cobro de 3.268,60 euros del total obtenido durante un evento solidario destinado a recaudar fondos, mediante bonos solidarios, para ayudar a reconstruir colegios en los campamentos de refugiados saharauis en Tinduf (Argelia). Al acto asistieron más de 6.000 personas que compraron bonos solidarios de […]
La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) ha exigido el cobro de 3.268,60 euros del total obtenido durante un evento solidario destinado a recaudar fondos, mediante bonos solidarios, para ayudar a reconstruir colegios en los campamentos de refugiados saharauis en Tinduf (Argelia). Al acto asistieron más de 6.000 personas que compraron bonos solidarios de 5 euros. Muchos otros bonos fueron vendidos a personas que sólo querían participar en la recaudación sin asistir al festival. Hagan clic en «Leer más» para ampliar la información. (En la fotografía, Eduardo Bautista, alias Teddy, el máximo responsable de las decisiones y acciones de la SGAE).
Comfia.com/ inSurGente.- La Fundación Paz y Solidaridad Andalucía del sindicato CCOO organizó recientemente un festival de música en Málaga con el nombre de Entresures, con un doble fin: Por un lado, recaudar fondos para reconstruir los colegios de niños y niñas saharauis en los campamentos de refugiados en Tinduf (Argelia), cuya existencia supera ya los 30 años. No hace falta explicar las durísimas condiciones de vida de estos niños y niñas. Por otro, sensibilizar a la población -especialmente joven- andaluza sobre las injusticias Norte-Sur y la necesidad de construir un mundo más justo y solidario.
La celebración del festival fue un éxito rotundo con la asistencia de unas 6.000 personas.
No deja de ser irónico, entonces, que la Sociedad de Autores SGAE haya demostrado una vez más su absoluta carencia de solidaridad al cobrar de la recaudación la cantidad de 3.268,60 euros por la celebración del evento. Esta cantidad, lo que es aún peor, se estimó sobre la venta de bonos solidarios de 5 euros que, aunque daban derecho a entrar al concierto, fueron comprados por muchas personas sin ninguna intención de ir al mismo, sino para expresar su acuerdo con los fines del festival.
La SGAE no ha ofrecido ningún servicio por el cobro de estos fondos, y se ha mostrado absolutamente intransigente en el momento de negociar. Es difícil entender quién se beneficia del cobro del impuesto de la SGAE, pero está clarísimo quiénes han sido los grandes perjudicados.
Hay que preguntarse por qué hay gente que tiene de todo -los defensores de SGAE como los Eduardos Bautista, los Ramoncines y los Alejandros Sanz de este mundo- pero aún se sienten con la necesidad de quitar lo poquísimo de los que no tienen casi nada.
En enero, la SGAE tuvo que pedir perdón al Taller Cultural de Fuentepelayo en Segovia tras cobrarle 518 euros por un certamen benéfico de teatro para discapacitados psíquicos después de que su responsable lo denunciara en el periódico El Norte de Castilla. Pese a que el delegado territorial de la SGAE defendió el cobro del canon, la gestora de derechos de autor lo achacó a un error administrativo.