Declaración de la CEOSI con motivo de la convocatoria en Iraq de una conferencia de solidaridad con Palestina promovida por la Liga Árabe
La CEOSI manifiesta su rechazo absoluto a la celebración en Iraq de la Conferencia auspiciada por La Liga Árabe en solidaridad con los prisioneros palestinos y árabes que la ocupación israelí mantiene encarcelados, y que se prevé que tenga lugar los próximos días 11 y 12 de diciembre en Bagdad.
La CEOSI considera que el gobierno de al-Maliki no puede utilizar el sufrimiento del pueblo palestino, y en concreto el pueblo de Gaza para limpiar ante la comunidad internacional su imagen, manchada con la sangre del pueblo iraquí.
El gobierno iraquí es el fiel continuador del terrible baño de sangre que la ocupación anglo-estadounidense perpetró en Iraq; el gobierno de al-Maliki es el esbirro de las potencias que invadieron y asolaron Iraq y asesinaron a más de un millón de personas, provocaron más de cinco millones de desplazados y mantiene la vida de los iraquíes en un verdadero infierno diario, carentes de los mínimos servicios sanitarios, educativos y de infraestructuras.
El gobierno de al-Maliki ha asesinado, torturado y obligado a un nuevo y doloroso éxodo a los refugiados palestinos en Iraq. Las fuerzas de seguridad del gobierno iraquí, que ahora pretende alojar una Conferencia en defensa del pueblo palestino, son las mismas que aterrorizaron al barrio palestino de Baladiate, en Bagdad, hasta que sus casi 30.000 habitantes, muchos de cuyos padres habían nacido en Bagdad, huyeran y buscaran refugio en las desérticas zonas fronterizas con Siria. La población palestina que aún sobrevive en Iraq no alcanza la cifra de 4.000 personas, y de ellos se calcula que el 10% están encarcelados.
Durante la Cumbre árabe que se celebró en Bagdad, los palestinos en Iraq entregaron una carta a Mahmud Abbas, el líder palestino, rogándole que interviniera en su defensa. Lamentablemente Abbas ignoró la citada súplica.
El gobierno impuesto por la ocupación sigue torturando, deteniendo ilegalmente y asesinando a sus ciudadanos de a pie, a sus académicos, abogados y periodistas sin haber emprendido ni una sola investigación por esos crímenes; un gobierno que sigue provocando desplazamientos internos y refugiados por sus políticas sectarias, por lo que la celebración de la Conferencia sería una burla grotesca para el pueblo palestino y el propio pueblo iraquí.
Se estima que Iraq tiene un número mayor de prisioneros, iraquíes y no iraquíes, que el propio Estado de Israel. Las declaraciones del primer ministro iraquí, dan cuenta del respeto que ese gobierno tiene por los derechos humanos y el trato de los prisioneros cuando afirma «[…] Sé que muchos abogados, a los que admiro y aplaudo se mantienen firmes en su rechazo a representar a terroristas, asesinos y criminales, pero me entristece que algunos se presentan ante los tribunales para defender a un asesino o a un criminal, como ocurrió en el caso del tirano de Iraq Saddam Huseín.»
Navi Pillay, Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, ha condenado repetidamente las sistemáticas condenas a muerte de personas que no han sido juzgadas siguiendo los procedimientos debidos, así como las numerosas ejecuciones extrajudiciales.
Desde aquí invitamos y alentamos a todas las organizaciones en defensa de los Derechos Humanos y de los derechos del pueblo Palestino a boicotear activamente la celebración de esta conferencia en Iraq.
Campaña Estatal contra la Ocupación y por la Soberanía de Iraq