La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, informó que ha pedido al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, prioridad para el tema de la violencia contra las mujeres y reconoció que no se ha hecho suficiente para pararla, lo que es una pandemia dentro de otra pandemia.
«En la más reciente reunión que tuve con el señor Presidente el viernes pasado, comentábamos sobre el tema de una política que se tiene que priorizar», indicó Sánchez Cordero.
Así lo señala la versión estenográfica de la primera reunión de 2021 del Grupo Interinstitucional de Estrategias contra las Violencias hacia las mujeres, niñas y adolescentes (GIEV), nombre que se ha dado al sistema nacional obligado por la ley vigente.
En esa reunión, la secretaria de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez Velázquez, anunció que todas las mesas regionales de seguridad Pública en el país deberán incluir como asunto prioritario la violencia contra las mujeres.
La secretaria de Gobernación, por su parte, agregó un nuevo nombre a la tarea de atención y prevención de la violencia contra las mujeres «la creación de la ruta de protección integral ‘Siempre libres, siempre vivas’ para mujeres que buscan ayuda» y reconoció que el Estado Mexicano no ha logrado garantizar el respeto a los derechos humanos de las mujeres. Es una tarea pendiente».
Rodríguez Velásquez prepara un paquete de ideas para la solución del conflicto que significa la violencia contra las mujeres y dijo que trabajará con las organizaciones sociales, en tanto que Sánchez Cordero precisó que el asunto debe ser prioritario para el gobierno federal.
La reunión en la que deben participar todas las dependencias involucradas, le dio la bienvenida a la nueva Secretaria de Seguridad, quien ofreció su compromiso en la lucha para eliminar la violencia contra las mujeres y dijo: «cuenten conmigo para todos los temas, cuenten con mi firma, con mi apoyo e intervención en todos los lugares y programas.
Según la información oficial, Sánchez Cordero, en esta primera sesión del 2021 del GIEV, insistió, como lo hizo 14 veces en 2020, sobre la importancia de trabajar en la prevención, entonces anunció otro programa, con un nuevo nombre: «se creará la ruta de protección integral ‘Siempre libres, siempre vivas’ para mujeres que buscan ayuda».
Sánchez Cordero aludió a las consecuencias de la crisis sanitaria y afirmó que con la pandemia del covid-19, se pudo comprobar la necesidad de garantizar el respeto a los derechos de las mujeres, para reiterar que: «esta violencia de género constituye, como todos ustedes, saben una violación a los derechos humanos que históricamente está arraigada en nuestra sociedad, porque es parte de una cultura tolerada y reproducida a través de prejuicios, estereotipos, actitudes machistas, de un sistema patriarcal que genera una brecha de desigualdad cada vez mayor», dijo la funcionaria.
Expresó que la Organización de las Naciones Unidas asegura que la violencia de género es una pandemia, una pandemia dentro de otra pandemia, el aumento de los casos de violencia por motivo de género es una de las tantas consecuencias sociológicas que también trajo la pandemia, reconoció.
Pero dijo que hay que reconocer que se trata de un problema anterior a cualquier crisis, generaba por profundas desigualdades de género, económicas y sociales entre hombres y mujeres.
También la Secretaria de Gobernación, responsable de la atención y prevención de la violencia contra las mujeres del gobierno federal, abogó por tener, en este nuevo año, «una actitud renovada y comprometida» para lograr un impacto significativo -para disminuir la violencia o incluso erradicarla-, sumando esfuerzos, generando sinergias que nos ayuden a parar esta violencia de género.
Durante la sesión virtual también estuvieron la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Nadine Gasman Zylberman, la titular de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (Conavim), Fabiola Alanís Sámano, y la titular del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (SNDIF), María del Rocío García Pérez, así como la secretaria ejecutiva del GIEV, Alicia Leal Puerta.
En la reunión, según la información oficial, no se presentaron balance, datos o resultados de la política federal que se desarrolla. En cambio, Sánchez Cordero reiteró que la responsabilidad para prevenir y atender la violencia es un asunto «de los tres órdenes de gobierno, es un tema federal, pero es un tema estatal, y sobre todo -y subrayó sobre todo- es un tema municipal, porque es ahí en territorio donde suceden estas violencias».
Sorpresivamente, dijo que el reto para el gobierno federal «es reorganizar la política nacional y brindarles las herramientas adecuadas a los gobiernos locales» y se comprometió a realizar una revisión de fondo de los recursos institucionales disponibles para lograrlo, aunque, advirtió, «tenemos que hacer mucho más con menos».
Aunque no dijo cómo, afirmó que «haremos una lucha sin cuartel para lograr un verdadero cambio en la estructura social que fomente la cultura de la igualdad».
Informó que sostuvo una reunión con el presidente López Obrador, en la cual comentaron sobre el tema de una política que se tiene que priorizar, disminuir y erradicar «si es posible, la violencia en contra de nuestras niñas, adolescentes, y de nuestras mujeres.»