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Entrevista a David Becerra Mayor y César de Vicente Hernando

Sobre el seminario «Teoría y práctica de la crítica literaria a partir de La cena de los notables de Constantino Bértolo»

Fuentes: Rebelión

«Leer críticamente significa saber quién escribe, para quién escribe y desde dónde escribe. Y, sobre todo, ser consciente de que la literatura no se encuentra en los márgenes de las estructuras sociales e históricas, sino que es una instancia más de la producción y reproducción ideológica. La literatura construye comunidad.»

La FIM ha organizado, hasta finales de abril, un seminario sobre el último libro de Constantino Bértolo, La cena de los notables. ¿Quiénes coordináis el curso? ¿A quien está dirigido?

El curso está coordinado por la Fundación de Investigaciones Marxistas (FIM) y el Centro de Documentación Crítica (CDC). Es un curso dirigido a un alumnado de un claro perfil académico -estudiantes o investigadores de la literatura-, que en su labor crítica trate de analizar el hecho literario como un producto de una coyuntura histórica y social concreta, fuera de los parámetros idealistas dominantes en el ámbito de la crítica literaria actual, o que se planteen la crítica como una tarea de análisis y valoración de los fundamentos sociales y políticos que construyen el espacio común que conforma la escritura, la lectura y la interpretación.

No obstante, a diferencia de los notables del libro de Bértolo, tanto en la FIM como en el CDC, organizamos también los cursos (y éste especialmente) para todos aquéllos que quieran comprender los procesos sociales que se dan en actos, como la lectura o la escritura, determinados por las condiciones sociales existentes. Es una manera de formar lectores críticos y escritores responsables.

¿Podríais dar cuenta resumida de las sesiones? ¿Qué personas habéis invitado? ¿Cuáles han sido vuestros criterios de selección?

El curso de teoría y práctica de la crítica literaria está estructurado en dos partes muy marcadas: los talleres y las sesiones teóricas. En los talleres, el alumnado, que habrá leído previamente el libro La cena de los notables, analizará y debatirá el texto de Constantino Bértolo. Se trata de presentar problemas constitutivos de todo discurso crítico. Por su lado, las sesiones teóricas servirán para reforzar el debate. Autores de diversa índole y procedencia harán una contra-lectura de cada uno de los capítulos que conforman el libro, es decir, establecerán problemas, aporías, fallas, y contradicciones rastreables en el discurso de La cena de los notables, tanto como las aportaciones, el potencial analítico y reflexivo que constituye su potencia. Al final del curso, Constantino Bértolo, a quien se le entregará un documento que recogerá las cuestiones debatidas, hará una contra-lectura de las contra-lecturas, esto es, una réplica de la réplica.

Es fácil de deducir, por lo tanto, que no se trata de un club de lectura o de un libro-fórum al estilo americano, sino de un profundo debate sobre qué es y qué función tiene la crítica literaria, un espacio para discutir seriamente sobre cuestiones fundamentales de literatura. Para lograrlo hemos invitado a escritores y críticos literarios que manejan un criterio distinto al que propone Constantino Bértolo y que, sin embargo, tampoco son ejemplos de la crítica literaria instituida y dominante. De este modo se podrá tener una lectura crítica de La cena de los notables e igualmente evitar caer en la glosa o en un comentario débil y poco atrevido. Para ello contamos con Ricardo García Pérez, Rafael Reig, Alicia García Ruiz, Ignacio Echevarría, Javier Rodríguez, entre otros.

¿Por qué habéis escogido el ensayo de Constantino Bértolo para este seminario? ¿Qué tiene de especial?

El curso pasado, la Fundación de Investigaciones Marxistas y el Centro de Documentación Crítica unimos fuerzas para realizar un curso de Literatura e Historia social a partir del libro Historia social de la literatura española de Julio Rodríguez Puértolas, Carlos Blanco Aguinaga e Iris M. Zavala. Al igual que el libro de Bértolo, se trataba de un libro no sólo excelente sino que, a su vez, forma parte de una práctica crítica que se establece a partir de una teoría materialista de la literatura. Además favorecen el debate, la reflexión, el análisis, más allá de los lugares comunes y de las nociones habituales. Con ellos pensamos la literatura y nuestro mundo. Con ellos podemos transformarlo.

Por cierto, ¿qué cena es esa? ¿Qué notables están invitados a ella?

Constantino Bértolo parte de una escena de la novela de Thomas Hardy, El alcalde de Casterbrigde para dar título a su ensayo. En un momento de la novela se describe una cena a la que sólo han sido invitados los miembros más distinguidos de la sociedad. Por los postigos abiertos se asoma el pueblo llano que, como era habitual, no era invitado a este tipo de eventos. Desde fuera -y sin probar bocado- el pueblo observa todo lo que ocurre dentro. Cuando la banda deja de tocar y llega el turno de los discursos, la voz del alcalde Henchard se impone sobre las demás. Y mientras Henchard habla, la comunidad calla. Esta escena le sirve a Bértolo para definir qué es la literatura: un pacto tácito que se establece entre el emisor de un discurso y el receptor de sus palabras. Alguien que habla y otros que callan. Pero quien tiene la voz, quien reproduce su discurso en el espacio público (es decir: quien publica), sabe que su posición de privilegio, su posibilidad de emitir un acto de habla, le ha sido otorgado por la comunidad que escucha en silencio. Pero esta parte del pacto parece habérsele olvidado a Henchard, cuando atónito observa cómo los demás comensales rompen su silencio, irrumpen en su discurso, reclamándole que se deje de historias y que mencione aquello que interesea a la comunidad: «¡Todo esto está muy bien! Pero, ¿qué pasa con el pan malo? (…) ¡Lo que tendría que hacer es hablar de esto, señor alcalde!». Éste es el nacimiento de la crítica, dirá Bértolo: un golpe en la mesa que interrumpa el discurso y que le haga recordar a quien publica que su discurso sólo es una concesión de la comunidad y, en tanto que concesión, su voz no puede dar la espalda a la comunidad, sino estar a su servicio.

Este episodio de cena de notables le sirve a Constantino Bértolo para definir qué es la literatura y qué es la crítica, dos categorías que nacen de puertas para dentro. Al otro lado de los postigos, el pueblo permanece ajeno y sin voz; únicamente contempla la escena. Como un lector que observa el diálogo entre autor y crítico, sin posibilidad de intervenir en la discusión.

¿Por qué tiene importancia leer? ¿Por qué resulta decisivo leer críticamente? Aún más, ¿qué significa leer críticamente?

Leer no tiene especial importancia. Incluso puede resultar una pérdida de tiempo o una forma de caer en los efectos de la dominación ideológica. Lo que es decisivo, como muy bien dices, es leer críticamente. «Leer críticamente» parece una tautología, ya que la definición de «lectura» debería contener de forma intrínseca en su significado que el ejercicio de leer debiera ser siempre crítico y si no lo fuera debería llamarse de otra forma y no «lectura»; pero la observación nos demuestra que no es así y que incluso se refiere a lectura el acto de pasar los ojos sobre las hojas. Leer críticamente significa saber quién escribe, para quién escribe y desde dónde escribe. Y, sobre todo, ser consciente de que la literatura no se encuentra en los márgenes de las estructuras sociales e históricas, sino que es una instancia más de la producción y reproducción ideológica. La literatura construye comunidad. Hay que leer teniendo en cuenta que la literatura es un producto y no un ejemplo de vida o de conducta. Y esto nos tiene que servir tanto para leer El Quijote como El País.

La FIM es una fundación de «investigaciones marxistas». Nada más y nada menos. La cena de los notables es un libro de y sobre la crítica literaria. ¿Qué hacen unos marxistas como vosotros en mundos literarios como ése?

Tal vez no haya nada más revolucionario que la búsqueda del conocimiento y de la verdad, que la ciencia propiamente dicha. La crítica y la investigación literaria, en tanto que ciencia de la literatura, tienen que servir para arrancarle el velo de idealismo que cubre el rostro del hecho literario para mostrarlo como materia, como un producto de unas relaciones sociales y económicas especificas. Nuestra investigación de la literatura tiene como objetivo demostrar la materialidad del hecho literario, afianzar nuestra tesis de que la literatura no es un ideal o un ente flotante que aparece porque sí, sino el resultado de unas relaciones de producción y explotación concretas. De lo que se trata, por lo tanto, es de reconstruir el proceso histórico real que produce, determina o condiciona el texto literario.

Nuestro propósito no es hacer política, sino ciencia. O Historia. Y lo hacemos desde el convencimiento de que el trabajo bien hecho, riguroso y exhaustivo, y sobre todo libre de toda imposición política, económica o religiosa, al final tiene que servir para construir una sociedad distinta o para conducir a la humanidad hacia su emancipación. Y somos muy conscientes también de que nuestra tarea le otorga legitimidad al discurso político marxista, pues demostramos científicamente que la historia se mueve, se construye y se transforma.

En tiempos se decía que la filosofía era la arista de la lucha de clases en el ámbito de la teoría. ¿También la crítica literaria está atravesada por esa lucha?

La lucha de clases atraviesa cada uno de los discursos que están presentes en toda sociedad dividida en clases. Sean éstos discursos literarios o no. No existe un discurso inocente. Tampoco lo que denominamos crítica literaria se construye sobre un discurso inocente. La crítica idealista provoca la imposibilidad de llegar a reconstruir el proceso histórico real de la literatura a partir de las leyes generales que rigen la producción y reproducción de las prácticas de la lectura y la escritura, a la vez que produce una atomización de la conciencia histórica-colectiva. Nosotros, frente a estos discursos, tenemos que reivindicar el carácter material del texto literario.

¿Goza de buena salud la crítica literaria española?

No sólo en el campo de la crítica literaria, sino en todo el ámbito de las humanidades, se está produciendo un fenómeno paradójico: cada vez más se fundan y se editan más revistas especializadas -hecho que bien podría interpretarse como un síntoma de buena salud. Sin embargo la calidad de los artículos publicados está muy por debajo del nivel deseado. La ideología del currículum, que obliga a los investigadores a estar publicando continuamente para estar a la altura de lo que las instituciones esperan de ellos y, sobre todo, como única forma que tienen para sobrevivir en la dura competencia que representa formar parte de la Universidad, hace que se esté publicando mucho sin que ello implique la apertura de nuevos caminos para investigación. En el campo de la literatura, un repaso por las publicaciones españolas de crítica literaria te sitúa en un panorama harto desolador. En la prensa española más que artículos críticos hay artículos publicitarios. 

¿Existe alguna publicación que queráis recomendarnos?

Hay pocos espacios para la teoría crítica materialista. Laberinto, una revista que se edita en Granada-Málaga tiene trabajos de crítica literaria bien interesantes. La revista Espai en Blanc, de Barcelona, publica trabajos crítcos sobre cultura muy interesantes. Minerva (de Madrid) y Barcelona-Metrópolis (de Barcelona) y Ladinamo (de Madrid) prestan atención especial a obras y autores fundamentales en las artes y las letras. La clásica Anthropos (de Barcelona) sigue siendo fundamental. En la Fundación de Investigaciones Marxistas hemos editado una revista digital titulada Revista de crítica literaria marxista. Hemos publicado tres números que pueden consultarse en la página web de la Fundación www.fim.org.es, una vez se resuelvan los problemas que impiden que la página funcione con normalidad. Cuando el problema técnico esté resuelto se publicará el número 3 que recoge las actas de las II Jornadas de Literatura y Marxismo, dedicadas al poeta granadino Javier Egea.

¿Tenéis pensadas otras actividades a corto plazo? ¿Podéis dar cuenta de ellas?

Desde la Sección de Estética de la Fundación de Investigaciones Marxistas venimos organizando desde hace un par de años las mencionadas Jornadas sobre Literatura y Marxismo en la Universidad Autónoma de Madrid. Está previsto que una vez iniciado el próximo curso académico 2010-2011 se celebren las III Jornadas dedicadas, en esta ocasión, al estudio de la literatura medieval desde la óptica de la crítica literaria marxista. También se prepara para el 2012 un curso sobre «La novela social latinoamericana».

Finalmente, ¿dónde celebráis las sesiones? ¿Se exige matriculación previa?

Todas las sesiones se realizan en la Fundación de Investigaciones Marxistas, salvo la última, la del 28 de abril, que se celebrará en la Sala Youkali.

Se exige matriculación previa para que el alumnado pueda recoger el material y llegar con el libro leído una vez se inicie el curso. La última fecha para la realización de la matrícula es el 10 de marzo en la propia FIM ([email protected]). Sin embargo, si alguien no pudiera matricularse previamente, no pondremos impedimento en que lo haga una vez iniciado el curso.

PROGRAMA

24 de Febrero.-

Taller de lectura de La cena de los notables de Constantino Bértolo

10 de Marzo.-

Taller de lectura de La cena de los notables de Constantino Bértolo

17 de Marzo.-

Contralectura de «La enfermedad de leer»

CÉSAR DE VICENTE HERNANDO

24 de Marzo.-

Contralectura de «La operación de leer»

RICARDO GARCÍA PÉREZ

31 de Marzo.-

Contralectura de «El dios lector y otros lectores»

RAFAEL REIG

7 de Abril.-

Contralectura de «La soberbia de escribir»

ALICIA GARCÍA RUIZ

14 de Abril.-

Contralectura de «El lugar de la crítica»

IGNACIO ECHEVARRÍA

21 de Abril.-

Contralectura de «La muerte del crítico: un exemplo»

JAVIER RODRÍGUEZ

28 de Abril.-

«A modo de conclusión»

CONSTANTINO BÉRTOLO

    Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.