El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva cerró su Caravana por Minas Gerais con un acto político en la plaza de la Estación, centro de Belo Horizonte. En su discurso el lunes, afirmó que una de las motivaciones del golpe de 2016 fue el descubrimiento del pre-sal y el interés extranjero en los campos de […]
Lula recordó que el modelo creado en los gobiernos petistas para la exploración de las nuevas áreas garantizaría inversiones en el área de la educación, uno de los focos de su discurso en la noche: «Cuando ellos hicieron la PEC prohibiendo gasto en educación y salud, cuando ellos privatizaron parte de Petrobras , ellos abortaron parte del futuro de este país».
El petista aprovechó para criticar a las clases dominantes al abordar la temática. «¿Por qué el país fue el último de América del Sur en tener universidad? La única respuesta que tengo es que es la elite más perversa del continente. Quiero que alguien me explique, ¿por qué fue un presidente sin diploma el que más hizo por la universidad en este país?».
«Creo que por el hecho de no haber ido a la universidad, tuve esa obsesión de llevar al pobre a ella», respondió. El precandidato del PT a la Presidencia reforzó las críticas a la cobertura mediática, prometiendo democratizar los medios de comunicación en un posible nuevo mandato: «No se puede aceptar que nueve familias controlen la comunicación de este país».
Lula fue precedido por políticos y militantes. Beatriz Cerqueira, dirigente de la CUT de Minas Gerais, criticó la campaña pública contra el expresidente: «Por haber puesto el Estado al servicio del pueblo, y no de un pequeño grupo de empresarios, que hoy te criminalizan, Lula».
«El golpe fue contra cada uno de nosotros. Continuaremos de cabeza erguida haciendo la lucha necesaria por el tiempo que sea necesario», complementó Cerqueira.
El senador Lindbergh Farias (PT-RJ) hizo mención al liderazgo de Lula en las encuestas electorales. «Esa Caravana tuvo una fuerte identidad con el pueblo de Minas Gerais. Ellos están asustados. El plan de ellos fue mal. Ellos querían desmoralizar al PT. Yo pregunto: ¿quién está desmoralizado en este momento? ¿Sabes lo que pasa? ¡Lula sube, sube, sube!», señaló.
«Un país que tiene una legislación laboral que hiere al trabajador en el país, que abre la puerta a la vuelta de la esclavitud. Un presidente ilegítimo que hace eso no merece nuestro respeto. Es un golpista y un entreguista. Pero esta situación tiene, por nuestra parte, una amenaza. La situación de democracia sacudida, tiene hoy en nuestras caravanas una de las formas de discusión y de resistencia. El encuentro del presidente Lula con los mineros está mostrando una realidad muy importante. Por un lado, la clara conciencia en las personas. Por otro lado, vemos a Lula creciendo en el apoyo de la población», afirmó Dilma Rousseff.
La presidenta golpeada terminó con un mensaje especial a las mujeres: «Tenemos que resistir y luchar. Y las mujeres estamos. En esa terquedad, vamos a reconstruir la democracia».
Fuente: http://www.resumenlatinoamericano.org/2017/10/31/brasil-en-el-acto/