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La embajada estadounidense implicada en los sobornos

Descubiertos militares que espiaban para EEUU

Fuentes: ABN

El Agregado Naval de la Embajada de Estados Unidos en Venezuela, John Correia, está implicado en el soborno de varios oficiales de la Armada investigados por espionaje militar, según confirmó la cadena televisiva Telesur con fuentes de inteligencia venezolanas. La televisora corroboró el dato luego que el vicepresidente de la República, José Vicente Rangel, denunció […]

El Agregado Naval de la Embajada de Estados Unidos en Venezuela, John Correia, está implicado en el soborno de varios oficiales de la Armada investigados por espionaje militar, según confirmó la cadena televisiva Telesur con fuentes de inteligencia venezolanas.

La televisora corroboró el dato luego que el vicepresidente de la República, José Vicente Rangel, denunció que oficiales de baja graduación de la Fuerza Armada Nacional (FAN) «le estaban vendiendo» información al Pentágono, a través de un militar estadounidense radicado en Caracas.

El ministro de la Defensa, almirante Orlando Maniglia Ferreira, ha señalado que la investigación está en proceso y que será a través de los canales regulares que se obtengan los resultados que se den a conocer los detalles del caso.

Por su parte, el embajador de Estados Unidos en Venezuela , William Brownfield, declaró este jueves a la televisora Globovisión que no ha recibido ninguna comunicación, ni informe del gobierno venezolano sobre la investigación a un agregado militar de la embajada de su país por su supuesta relación con un caso de espionaje.

En septiembre de 2005 la Fiscalía Militar ordenó una investigación a un grupo de oficiales venezolanos y su vinculación con la embajada de Estados Unidos, pero fue hasta el pasado domingo cuando se realizaron los primeros allanamientos.

La Fiscalía Militar allanó las residencias de algunos de los implicados en el edificio Parque Seis, en la urbanización Montalbán, al suroeste de Caracas. Las mismas fueron realizadas por el teniente Santos Montero Tovar, Fiscal General Séptimo de Caracas, según informó Telesur.

En su mayoría, los oficiales implicados son de la Armada, razón por la cual el comandante de este componente, vicealmirante Armando Laguna Laguna, encabeza las investigaciones.

Al ser consultado sobre la información, el oficial señaló que esperará la conclusión de la investigación para hacer las observaciones respecto al caso.

Según la cadena televisiva, entre los militares acusados de espionaje están los capitanes de navío Ernesto Carraqueño y José Santín Puerta, el capitán de corbeta José Rodríguez Vásquez y los tenientes de navío Francisco Ferrer Molleja y José Ignacio Plaza López.

El delito espionaje está tipificado según el Código Orgánico de Justicia Militar (COJM), de Venezuela, en su sección II, en los artículos 471 y 472.

El artículo 471 señala que incurre en delito de espionaje toda persona que en cualquier sitio de la República, o en alguna de las embajadas u otras oficinas venezolanas en el exterior, revele documentos, noticias o informaciones de naturaleza militar que comprometa la seguridad de la patria.

EL COJM especifica los hechos sujetos a la calificación de espionaje, entre los cuales destaca «tratar de obtener informaciones o noticias sobre las tropas, materiales, elementos u operaciones de carácter militar».

Otros de los hechos tipificados es «conducir comunicaciones, partes o pliegos del enemigo, no estando obligado a ello o, en caso de estar obligado por la fuerza, no entregarlo a las autoridades militares o civiles en la primera oportunidad, así como también si los inutiliza u oculta para no entregarlos a las autoridades venezolanas o aliadas».

Así como «sustraer, conseguir, fotografiar, copiar, alterar, suprimir, desviar, aunque sea temporalmente, documentos u objetos de carácter secreto o reservado, relacionados con la defensa nacional».

En el artículo 472 queda establecido el castigo por la comisión del delito de espionaje con 30 años y «con las penas accesorias de expulsión de las Fuerzas Armadas, previa degradación o anulación de clases según el caso».

Por su parte el inspector general de la Fuerza Armada Nacional (FAN), general de división (Ej.) Melvin López Hidalgo, aseguró que se han encontrado algunos elementos que vinculan de alguna forma a funcionarios de la Embajada de Estados Unidos en Caracas con personal militar venezolano activo y en situación de retiro.

La afirmación la hizo el alto oficial durante un evento celebrado en la plaza Bolívar de la capital guariqueña, con motivo de su nombramiento como Hijo Ilustre del Municipio Juan Germán Roscio.

El señalamiento de López Hidalgo se produce luego de que el vicepresidente de la República, José Vicente Rangel, confirmó que la Fiscalía Militar investiga a oficiales de la FAN por presunta venta de información al Gobierno de Estados Unidos.

Lopez Hidalgo señaló que desde 2001 el Gobierno de Estados Unidos ha mantenido contacto con personal militar venezolano y que, por ello, realizan las investigaciones necesarias para acabar con esta situación.

Aseguró que ante las contundentes evidencias de este hecho, la FAN procedió a solicitar la apertura de una investigación por vía judicial.

La cadena televisiva Telesur confirmó, con fuentes de inteligencia, que el funcionario estadounidense implicado en el caso es el agregado naval de la Embajada de Estados Unidos en Venezuela, John Correia.

López Hidalgo denunció que el Gobierno estadounidense ha mantenido, a través de su embajada, una actitud de constante intromisión y de conspiración contra Venezuela.

El inspector general de la FAN dijo que aún y cuando el Gobierno venezolano ha presentado todos los argumentos necesarios ante la Organización de Estados Americanos (OEA) para demostrar estos hechos, el Gobierno estadounidense jamás lo ha admitido.

Aclaró que el hecho de que la Fiscalía Militar cite a algunos oficiales, no implica que estén imputados o acusados, pues lo que está haciendo es solicitar su comparecencia para avanzar en la investigación.

López recordó que la FAN es una institución conformada por varios componentes de profesionales que se conocen entre sí, por lo que no quiso señalar a ninguna fuerza en particular de sostener relaciones con agentes estadounidenses.

De igual forma, aclaró que el hecho de que un militar se haya reunido en un momento determinado con alguien, que haya sido acusado, no le implica en ningún hecho, pero pudiera ser citado por la Fiscalía Militar, a objeto de aclarar la situación.

Añadió que aún no se han dado de baja a oficiales por hechos de conspiración y elogió la posición de algunos profesionales castrenses que han denunciado oportunamente las pretensiones de funcionarios estadounidenses.

«Se mantiene una actitud en contra del Gobierno y del pueblo Venezolano para crear una situación de inestabilidad, por eso tenemos que estar pendientes, porque debemos preservar nuestra seguridad, nuestra autonomía y nuestra soberanía», dijo.

Por otra parte, calificó como injerencia interna la actitud del Gobierno del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, por la prohibición que hizo a una empresa española de suministrar aviones militares a Venezuela.

Además de ello, ratificó que la FAN está cohesionada y que continuará resguardando la democracia, la constitución, la seguridad y la integridad del país.