A los inversores financieros el que una compañía petrolera aumente sus beneficios un 25% no les parece suficiente
British Petroleum, la segunda petrolera del mundo, obtuvo en el 2005 un beneficio bruto de unos 16 millones de euros, un aumento del 25% respecto al ejercicio anterior. Este espectacular resultado ha tenido lugar gracias a la fuerte subida del precio del crudo en el último año, que llegó a pasar de los 45 dólares el barril a los 70 en seis meses. A pesar de los resultados, los analistas de la City londinense señalaron que los datos de BP son muy buenos, pero no tanto como esperaban los inversores en el Reino Unido. Las acciones de BP caían un dos por ciento en la apertura de la Bolsa de Londres.