El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva reiteró hoy su reclamo para que los países ricos retiren los subsidios de sus productos «para comprar productos de los países más pobres». «Necesitamos que esos países (pobres) cuenten con el reconocimiento de sus productos en los países ricos y que esos países retiren los subsidios de sus productos para comprar productos de los países pobres», afirmó Lula da Silva en su programa radial semanal «Un café con el Presidente».
Lula da Silva reiteró así su posición sobre el tema de los subsidios de los productos agrícolas que había expresado durante la Cumbre de Gobiernos Progresistas, realizada en Pretoria, Sudáfrica. El encuentro, que concluyó el domingo, reunió jefes de Estado de Brasil, Reino Unido, Nueva Zelandia, Sudáfrica, Etiopía, Suecia, Corea del Sur, junto al director de la Organización Mundial de Comercio (OMC), Pascual Lamy, y el negociador de la Unión Europea, Peter Mendelson, recordó la agencia de noticias ANSA.
Lula da Silva destacó que el biodisel, combustible producido a partir de plantas oleaginosas, es una forma de estimular el crecimiento de los países pobres. «Los países ricos pueden elegir un país pobre, pueden financiar tecnología, pueden mandar construir fábricas y producir biodisel allí, y comprar el combustible para utilizar en sus camiones, sus ómnibus, sus automóviles», ejemplificó.
Para el mandatario brasileño, muchas naciones ricas ya percibieron que los países pobres necesitan tener mayor participación en el comercio mundial y en la producción de conocimiento científico y tecnológico. En ese sentido, el presidente aseguró que Brasil integra el grupo de naciones dispuestas a ayudar a los menos favorecidos. «Brasil estará presente con su solidaridad para un país hermano», concluyó.