Del total de trabajadores, 21 son mujeres y 14 menores, con edad variando entre 12 y 15 años. La acción conjunta del ministerio con la Policía Federal se realizó el lunes 20 de febrero. El propietario de la finca, Roberto Amaral Tossato, fue listado en el catastro de empleadores que explotan mano de obra esclava. […]
Del total de trabajadores, 21 son mujeres y 14 menores, con edad variando entre 12 y 15 años.
La acción conjunta del ministerio con la Policía Federal se realizó el lunes 20 de febrero. El propietario de la finca, Roberto Amaral Tossato, fue listado en el catastro de empleadores que explotan mano de obra esclava.
Cálculos preliminares indican que Tossato tendrá que pagar un total de indemnizaciones de unos 1,14 millones de reales a las víctimas.
Uno de los fiscales, Humberto Célio Pereira, dijo al sitio de la CUT (Central Única de los Trabajadores) que «los trabajadores estaban con los salarios atrasados y pasaron hambre. El agua que bebían era la de los animales. Ellos tenían que pagar por los materiales de trabajo y de seguridad, pagaron por la electricidad y además tenían deudas en el mercado local».
El fiscal dijo que algunos de los trabajadores estaban es esta situación desde hace dos años. Los trabajadores eran de los estados Mato Grosso, Tocantins y Maranhão y trabajaban con caucho.
El año pasado, Mato Grosso quedo en el primer lugar del ranking de los estados en que más se usaba mano de obra en condiciones de esclavitud.(PÚLSAR)