La justicia de Brasil decretó la prisión de Freud Godoy, ex asesor especial del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, y otros cinco involucrados en el escándalo de la compra de documentos contra candidatos opositores. Como la ley electoral establece que no deben ponerse bajo prisión a personas en los cinco días anteriores y dos […]
La justicia de Brasil decretó la prisión de Freud Godoy, ex asesor especial del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, y otros cinco involucrados en el escándalo de la compra de documentos contra candidatos opositores.
Como la ley electoral establece que no deben ponerse bajo prisión a personas en los cinco días anteriores y dos posteriores a los comicios, que se realizarán el 1 de octubre, las detenciones serán cumplidas hasta el miércoles 4 del mes entrante.
Además de Godoy, el martes fueron dictadas órdenes contra Jorge Lorenzetti, Oswaldo Bargas, Afonso Veloso, Gedimar Passos y Valdebran Padilha, todos acusados de participar en la operación, de acuerdo con informaciones publicadas hoy por la prensa.
Hasta que estalló el escándalo, Godoy ocupaba una oficina en el Palacio de Planalto, Lorenzetti era jefe del sector de inteligencia del Partido de los Trabajadores (PT), Bargas coordinador del área de trabajo y empleo de la campaña del presidente.
Veloso era director de gestión y riesgo del Banco do Brasil, Passos es un ex-agente policial y Padilha un empresario ligado al PT.
Los seis participaron en la tentativa de compra de una grabación y otros documentos que servirían para involucrar al candidato al gobierno de Sao Paulo, José Serra, del Partido Social Demócrata Brasileño (PSDB), en la llamada ‘mafia de las sanguijuelas’.
Passos y Padilha fueron encontrados con 1.700.000 reales (790.000 dólares) en su poder, supuestamente para adquirir la cinta.
Este martes, la Policía Federal informó que fue identificado el origen del dinero, que habría ingresado legalmente a Brasil desde Miami.
La grabación serviría para demostrar la supuesta participación de Serra, ex ministro de Salud, en el esquema de compra de ambulancias sobrefacturadas, y salpicaría también al candidato presidencial del PSDB, Geraldo Alckmin.
El escándalo se convirtió en el eje de la campaña electoral en los últimos 10 días, y dio excusas a la oposición para atacar al presidente para intentar forzar una segunda vuelta.
Las encuestas, sin embargo, muestran que si bien Alckmin consiguió crecer algunos puntos, Lula da Silva mantiene un apoyo superior al 50 % de los votos válidos, lo que le asegura la reelección en la primera vuelta.