El presidente de Ecuador, Rafael Correa, reiteró hoy ante el subsecretario estadunidense de Estado, John Dimitri Negroponte, su rechazo a un Tratado de Libre Comercio (TLC) bilateral y ratificó su empeño en «una transformación social real», además de exigirle recompensas arancelarias por la lucha antidrogas. Negroponte fue recibido por Correa en el palacio presidencial de […]
Negroponte fue recibido por Correa en el palacio presidencial de Carondelet, mientras que afuera cientos de manifestantes protestaron en repudio al visitante atados con cadenas y envueltos en bolsas negras, simbolizando a los presos de Irak; otros lucían los uniformes del campo de concentración de Guantánamo.
«El presidente fue muy enfático al declarar que Ecuador no comulga con los principios del llamado libre comercio y que cree que un posible tratado habría sido muy perjudicial para las economías campesinas», indicó la canciller María Fernanda Espinosa.
Correa y Negroponte conversaron «cordialmente» durante hora y media sobre varios temas, aunque evitaron referirse a la controversia por el retiro de Ecuador de las maniobras Unitas que motivó la entrega de una carta de protesta a Washington.
«Correa insistió en que Ecuador está empeñado en llevar a cabo un proceso de transformación social real y que no puede haber una democracia política si no existe una democracia económica», sostuvo Espinosa. No obstante, mostraron interés en «un diálogo para avanzar en un contexto comercial predecible a largo plazo luego de la ampliación de las preferencias arancelarias andinas (vigentes hasta 2009)».
Correa y Negroponte también hablaron sobre la «lucha ecuatoriana contra el narcotráfico, la Asamblea Constituyente que redactará una nueva Carta Política y de las relaciones entre Quito y Bogotá».
El mandatario ecuatoriano, quien ha expresado su negativa a extender el tratado de la base militar de Manta, escuchó luego a Negroponte, quien aseguró que comprende la importancia de los beneficios aduaneros que otorga Washington en retribución a la lucha antidrogas, y que el gobierno de George W. Bush aboga ante el Congreso por las ampliación de esas prerrogativas.
Procedente de Colombia, el ex zar de inteligencia estadunidense aseguró que su gobierno prefiere a los países que han negociado un TLC «porque con ello están beneficiando a sus sociedades».
Negroponte acusa a Venezuela
Insistió en acusar a Venezuela de no combatir con determinación el narcotráfico y de que se ha convertido en un lugar de tránsito de grandes cantidades de droga con destino a Europa.
En respuesta, el canciller venezolano, Nicolás Maduro, acusó a Negroponte de estar vinculado a la venta de drogas para comprar armas en el mercado mundial cuando financiaban las actividades de la contra nicaragüense, en su época de embajador en Honduras, y citó al zar antidrogas John Walters como uno de los posibles millones de consumidores y que ahora pretende pontificar sobre la lucha contra el narcotráfico.