El principal banco de activos alemán, el Deutsche Bank, abandona sus negocios en Irán, a causa de los altos costos económicos y la fuerte presión política en ese país, según adelanta el semanario informativo alemán Spiegel .Se han cerrado las relaciones de negocio con algunos clientes en Irán por motivos políticos, confirmó una portavoz del […]
El principal banco de activos alemán, el Deutsche Bank, abandona sus negocios en Irán, a causa de los altos costos económicos y la fuerte presión política en ese país, según adelanta el semanario informativo alemán Spiegel .
Se han cerrado las relaciones de negocio con algunos clientes en Irán por motivos políticos, confirmó una portavoz del Deutsche Bank.
«No se trata de iraníes en el exilio, sólo de iraníes que viven en ese país», puntualizó la portavoz del banco, quien subrayó que esta medida afecta tan sólo a una mínima parte de los 8 millones de clientes privados con que cuenta Deutsche Bank.
Según explicó la misma portavoz, los costos de administración se elevaron demasiado a causa de las pautas y directrices políticas impuestas.
El semanario alemán asegura en su próxima edición que Deutsche Bank y otras instituciones financieras fueron fuertemente presionadas por el gobierno estadunidense para que suspendieran sus negocios en Irán.
Spiegel dice incluso que el subsecretario de Terrorismo y de Inteligencia del Departamento del Tesoro, Stuart Levey, visitó personalmente a representantes de bancos alemanes y otras empresas para tratar la cuestión.
En julio, además, habría estado en Berlín, donde se reunió con el gobierno alemán para que éste finalizara sus operaciones comerciales con Teherán. Spiegel añadió que la visita fue un éxito.
La portavoz de Deutsche Bank no quiso hacer comentarios sobre lo publicado por Spiegel y se limitó a subrayar que el banco sólo obtiene de los negocios en Irán 0.1 por ciento de sus ganancias.