El fuerte avance del crudo en la arrancada del año se debe tanto a la debilidad del dólar como a la previsión de que el jueves se anunciará una nueva y pronunciada caída de las reservas de petróleo y carburantes en Estados Unidos, lo que se convertiría en el séptimo descenso semanal consecutivo. El petróleo […]
El fuerte avance del crudo en la arrancada del año se debe tanto a la debilidad del dólar como a la previsión de que el jueves se anunciará una nueva y pronunciada caída de las reservas de petróleo y carburantes en Estados Unidos, lo que se convertiría en el séptimo descenso semanal consecutivo.
El petróleo inició el año llegando este miércoles por primera vez en su historia a la barrera de 100 dólares por barril en Nueva York, impulsado por un aumento de tensiones geopolíticas y por temores de escasez ante el invierno en Estados Unidos.
Otro factor que favoreció esta marca histórica es la debilidad del dólar, que también llevó a nuevas cumbres al oro, otro refulgente astro de las materias primas.
El crudo de calidad «light sweet» se disparó a alturas sin precedentes, alcanzando por primera vez la cotización exacta de 100,00 dólares por barril durante el día.
En la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), el barril «light sweet» para entrega en febrero terminó la sesión en alza de 3,64 dólares, a 99,62 dólares, dejando así su marca histórica anterior, del 23 de noviembre (96,55 dólares).
En Londres, el crudo Brent, de referencia en Europa, se aproxima cada vez más a la barrera psicológica de los 100 dólares y cerró este miércoles al máximo histórico de 97,84 dólares por barril, tras subir 3,9 dólares el precio fijado al finalizar la sesión anterior en el mercado.
Caída de reservas petroleras en Estados Unidos
El fuerte avance del crudo en la arrancada del año se debe tanto a la debilidad del dólar como a la previsión de que el jueves se anunciará una nueva y pronunciada caída de las reservas de petróleo y carburantes en Estados Unidos, lo que se convertiría en el séptimo descenso semanal consecutivo.
De hecho, el informe del departamento estadounidense de Energía, que será publicado el jueves -con un día de retraso a raíz del Año Nuevo- debe anunciar un declive de 3,15 millones de barriles de reservas de crudo durante la semana culminada el 28 de diciembre, según estiman los analistas.
También empujaron al alza del precio del oro negro brotes de violencia y tensiones geopolíticas en países ricos en petróleo, como Nigeria, Kenia, Irak y, especialmente, Pakistán, donde la situación es muy inestable tras el reciente asesinato de la ex primera ministra y líder opositora Benazir Bhutto.
La invasión de Irak hizo saltar la chispa
La invasión norteamericana de Irak hizo saltar la chispa en los mercados del llamado oro negro, y eso conllevó numerosos ataques contra instalaciones petrolíferas. El sector petrolero irakí seguirá perturbado por un buen momento.
La depreciación del billete verde es considerada asimismo por los analistas como un factor esencial del alza de los valores del barril en los últimos meses.
Las tensiones políticas en otros países productores importantes también han contribuido al nerviosismo del mercado del crudo, entre las cuales las constantes amenazas de países occidentales hacia el Gobierno de Irán y su plan nuclear.
De forma paralela, el mundo vive desde hace cinco años un crecimiento muy alto, más espectacular si cabe en gigantes emergentes como China o India, que generan una demanda petrolera desenfrenada.
El rápido aumento de la demanda provocó una tensión en las reservas con temores recurrentes de escasez, sobre todo porque la capacidad mundial de refinación es insuficiente para responder a la demanda de productos petroleros.
Se ha intensificado la especulación
Finalmente, el mercado petrolero a largo plazo se ha convertido en una inversión muy rentable ahora que decaen los réditos bursátiles, inmobiliarios y de las obligaciones.
Cada vez más, el oro negro sirve de refugio a los inversores que buscan una protección contra la caída del dólar. Esto contribuye también a la subida del crudo porque incita a los productores a reclamar más por la misma cantidad de petróleo con el fin de mantener su poder adquisitivo.
Y a medida que se acercaba al umbral psicológico de los 100 dólares, se ha ido intensificando la especulación.
Por su lado, el crudo de la OPEP, organización que suministra un 40% del petróleo mundial, finalizó el 2007 a un precio de 90,92 dólares el barril, frente a los 90,39 en días anteriores.
Este miércoles, el ministro de Petróleo de Qatar, Abdullah al-Attiya, estimó que la Organización de Países Exportadores de Petróleo no puede hacer nada por el alza del petróleo a un récord de 100 dólares el barril, ya que la escalada respondió a especulaciones y a tensiones geopolíticas, y no a problemas de oferta.
«No creo que la OPEP pueda hacer algo», dijo Attiyah a la agencia Reuters. «Si esto estuviera relacionado con el suministro entonces podríamos hacer algo. Pero estoy seguro que es geopolítico. La especulación ha estado muy fuerte, Esto es un juego de especuladores», agregó.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo no planea tener una reunión de emergencia luego de que el precio del crudo tocó los 100 dólares, agregó Attiyah. El grupo productor tiene previsto reunirse el próximo 1 de febrero.