BBVA logró en 2007 un beneficio neto de 6.126 millones, un 29,4% más que un año antes. Francisco González, presidente del banco multinacional, pidió mejoras fiscales para afrontar el futuro y adelantó que 2008 será un buen año para el banco. LAB tachó de «beneficios inmorales» los logrados por el banco que tiene su sede en la capital vizcaina, y aseguró que «no es más que un ejemplo de capitalismo salvaje».
Había interés para conocer el comportamiento económico del BBVA, ya que una parte de su negocio se focaliza ya en Estados Unidos tras la toma del Compass y de otros dos de Texas en los últimos años. Francisco González, presidente de la entidad, y José Ignacio Goirigolzarri, consejero delegado, reconocieron el buen comportamiento económico de la actividad bancaria. BBVA logró incrementar el beneficio neto en 2007 en un 29,4% hasta alcanzar los 6.126 millones de euros, un «resultado extraordinario» que se produce en medio de una convulsión del sistema financiero mundial.
González en ningún momento reconoció la existencia de una crisis económica, sí «tensión financiera», pero advirtió de que ese panorama negativo se está trasladando «a la economía real y global».
En cuanto al riesgo del crédito, BBVA reconoce que los riesgos totales ascienden al 31 de diciembre de 2007 a «383.843 millones de euros», con un incremento del 25,7% sobre un año antes. Los riesgos dudosos, sin embargo, alcanzan -según los datos- a 3.408 millones,s un aumento del 21,9%.
González explicó que BBVA se encuentra «muy bien posicionado, como el conjunto del sistema español» y reconoció que «va a subir la morosidad, pero no afectará a los resultados, porque tenemos más de 5.690 millones en provisiones para actuaciones de este tipo».
La bajada que ha tenido BBVA en las cotizaciones bursátiles durante los últimos días no le preocupan al presidente del banco, porque «hemos hecho un buen ejercicio con unos resultados fenomenales» y adelantó que para «mediados de año esperamos que el BBVA vuelva a las posiciones anteriores en la Bolsa».
Con los datos en la mano, la realidad invita a preguntarse quién o quiénes son los que están en crisis. Sin embargo, con un beneficio económico del 29,4% en un momento de convulsión económica mundial, Francisco González reclamó al Gobierno español «medidas fiscales» para activar la economía, algo similar a lo que ha ocurrido en Estados Unidos.
BBVA logró el año pasado un beneficio neto cada hora de 699.315 euros, una cantidad similar a la que obtienen 31 trabajadores vascos durante todo un año de trabajo. Al día, computando los 365 del año, el banco multinacional logró un beneficio de 16,7 millones, el salario anual de 748 trabajadores.
Según los datos aportados, un poco más de una tercera parte de los beneficios (2.397 millones de euros) se lograron en los negocios del Estado español y Portugal y otro tercio, entre México y Estados Unidos (2.084 millones).
La otra tercera parte del beneficio económico neto se logra en América del Sur (623 millones), en negocios globales (909 millones) y 113 millones más en actividades corporativas, según reflejan sus cuentas.
LAB criticó «los beneficios astronómicos» y los consideró «inmorales». La central sindical considera que ha obtenido esos resultados «con la práctica diaria de la explotación» y dijo que » un beneficio diario de más de 16 millones no es más que un ejemplo del capitalismo salvaje. Sólo se preocupa de la obtención de más y más beneficios».
En este caso, criticó la destrucción de empleo en las oficinas de Euskal Herria; «las masivas prolongaciones de jornada, que son horas extras encubiertas y defraudadas». LAB denuncia que, en cambio, los empleados pierden poder adquisitivo.
724
millones tuvieron un carácter singular, ya que obedecieron a plusvalías obtenidas por la venta de las participaciones en Iberdrola, la venta de inmuebles, ventas de acciones de BNL, Repsol y Andorra. Sin estas aportaciones, el beneficio se hubiera quedado en 5.403 millones, un 18% más que un año antes.
11,6%
es el incremento por acción hasta los 1,5 euros. El banco reconoce que las diferentes ampliaciones de capital que tuvieron que llevar adelante para emprender la adquisición de entidad, como el estadounidense Compass, retribuyó a la baja, pero González reconoció que esa situación mejorará.
8,2
millones de nuevos clientes, un 20%, es el objetivo que el presidente de BBVA anunció durante la rueda de prensa que se celebró en la sede de Madrid. Este objetivo se fija hasta el año 2010.
383.843
millones son los riesgos totales con los clientes que asume el banco, lo que supone un incremento del 25,7% sobre un año antes. De esa cantidad, los riesgos dudosos alcanzan los 3.408 millones al cierre de 2007. Es un 21,9% más que un año antes.
Dentro de la Semana de Acción Global bajo el lema «Neoliberalismoaren aurka. Otro mundo es posible», se ofrecieron las conclusiones finales de una preaudiencia, celebrada en Bilbo en octubre del año pasado, sobre la actividad del BBVA a lo largo del mundo. En mayo, el Tribunal Permanente de los Pueblos se reunirá en Lima y estudiará la actividad del banco que preside Francisco González. No sólo será esta multinacional la juzgada, pero el trabajo previo se ha realizado en Euskal Herria al tener el banco su sede en la capital vizcaina. En el encuentro se dejó constancia de que se convocó a BBVA para que pudieran defenderse de las diferentes acusaciones, pero «el banco no envió a nadie. Un abogado de oficio le defendió».
En la charla, «BBVA: ladrones en el mundo globalizado», se dieron a conocer las principales conclusiones de la audiencia preliminar que coincidieron en expresar que las actividades de la entidad financiera BBVA han tenido «un impacto negativo sobre las poblaciones y hábitat de los países donde opera directa o indirectamente». En el acto participaron colectivos como Kakitzat, MOC, Komite Internazionalistak, Paz con Dignidad, Ekologistak Martxan y los sindicatos CGT y STEE-EILAS.
Tras examinar una serie de pruebas y datos de la transnacional, se le acusó de «fomento de los conflictos bélicos en el mundo con la financiación y participación en empresas armamentísticas», como -según citan- Cesce, Hispasat, Indra, Ibérica del Espacio, Acio, Rymsa, Hisdesat, Inmize (MBDA) y Gamesa ( a través de Iberdrola). Citan expresamente «la financiación de la fabricación de las bombas racimo, por medio de empresas como Raytheon, Thales y Unión Española de Explosivos». Estas bombas, afirman esos organismos, «están prohibidas por afectar indiscriminadamente a la población civil». También aseguran que el banco de Francisco González «ha comprado voluntades políticas» como «se dedujo de las distintas investigaciones al BBVA por sus cuentas secretas en paraísos fiscales. Se había dedicado a influenciar a políticos y gobiernos para su expansión en Latinoamérica». También recuerdan que BBVA fue investigado por el FBI entre 1999 y 2001 «por posibles actuaciones de blanqueo de dinero procedente del narcotráfico». También citan las investigaciones del Banco de España en 2001 y los juicios en la Audiencia Nacional en 2001 y 2005 por actuaciones en paraísos fiscales, entre otras prácticas.
El Tribunal Permanente de los Pueblos tendrá en mayo también encima de la mesa acusaciones de «prácticas antihumanitarias en México por la clausura de cuentas de las organizaciones humanitarias como Enlace Civil y Osimech (Chiapas) y de la Comunidad de Paz de San José de Apartadó (Colombia). También se denuncian abusos laborales en el banco; el cobro de altas comisiones por la transferencia de remesas o el «desorbitado salario de su presidente», entre otros. Al final, se pide al BBVA que «se comprometa con la transparencia» y al Estado español «que asuma su responsabilidad».