El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, vaticinó ayer que, a pesar de las dudas que existen en torno al futuro de la Unasur, el bloque suramericano avanzará hacia la creación de un banco central y una moneda única para la región. «Es un proceso, no es una cosa rápida, pero vamos a caminar […]
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, vaticinó ayer que, a pesar de las dudas que existen en torno al futuro de la Unasur, el bloque suramericano avanzará hacia la creación de un banco central y una moneda única para la región.
«Es un proceso, no es una cosa rápida, pero vamos a caminar hacia un banco central y una moneda unificados», dijo Lula en su programa de radio semanal, en el que comentó la cumbre extraordinaria que la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) celebró el pasado viernes en Brasilia, informa desde la capital de Brasil EFE.
Lula valoró la firma del tratado constitutivo del bloque, que le da bases institucionales y le convierte «en una realidad», pese a que sectores políticos y económicos de los países miembros han expresado algunas dudas, por la superposición de mecanismos de integración que entraña la aparición de un nuevo grupo regional.
«Parecía imposible (constituir la Unasur), porque en Suramérica fuimos adoctrinados para pensar que no somos capaces de hacer nada, que somos pobres, que peleamos mucho entre nosotros y que tenemos que depender de Estados Unidos y la Unión Europea para todo», dijo.
Lula reiteró que su gobierno se propone fomentar la inversión de empresas brasileñas en países más pobres, entre los que citó Bolivia, Paraguay y Uruguay.
«Son los países (de la Unasur) considerados más frágiles», pero el objetivo de todos los miembros del nuevo bloque debe ser «que sean unos países más fuertes y más soberanos», apuntó Lula.
También defendió la propuesta presentada por Brasil en la cumbre de la Unasur, para la creación de un consejo de defensa suramericano.
En la cita presidencial, se acordó formar un grupo de trabajo que, en un plazo de 90 días, deberá presentar un informe técnico sobre el asunto.
Según Lula, esos tres meses permitirán que Brasil, junto a los otros socios, «elabore mejor la propuesta y elimine algunas de las divergencias» surgidas en torno al proyecto, que sólo fue rechazado de plano por Colombia, que se escudó en la situación interna que le supone el combate al terrorismo.
«La verdad es que, de los doce países, sólo Colombia tuvo alguna objeción», en relación al consejo de defensa, indicó Lula.
El presidente brasileño señaló, no obstante, que se propone volver a tratar el asunto con su homólogo colombiano, Álvaro Uribe, el próximo 20 de julio, cuando hará una visita a Colombia.
«Volveré a conversar con Uribe y estoy seguro de que nos pondremos de acuerdo», declaró Lula, quien participará en los actos del aniversario de la independencia de Colombia, a los que ha sido invitado por el jefe de Estado colombiano