Está subdividida en 27 bloques, de 500 km cada uno, para su explotación. Calculan 1.360 millones de barriles de crudo original en sitio. La cantidad de petróleo que se encuentra en el subsuelo de ese campo garantizará oro negro al país por más de 100 años.
La Faja del Orinoco es una de las fuentes de reservas de hidrocarburos más grande del mundo y está ubicada en territorio venezolano: abarca los estados Monagas, Anzoátegui y Guárico.
La cantidad de crudo que se encuentra en el subsuelo de ese campo garantizará oro negro al país por más de 100 años.
Se calculan allí 1.360 millones de barriles de petróleo original en sitio.
La Faja está divida en cuatro grandes áreas: Boyacá, Junín, Ayacucho y Carabobo. Allí se producen 838 mil barriles diarios, según cifras del Pdvsa.
Los primeros resultados. El primer pozo que se perforó en ese reservorio energético es el Canoa-1 en 1935.
El reconocimiento importante del campo petrolero comenzó con el trabajo conjunto del Ministerio de Minas y la compañía estatal Corporación Venezolana del Petróleo para ese entonces.
El estudio formal de la Faja comenzó a realizarse por ingenieros venezolanos en 1960.
Años después, en 1977, la tarea de estudiarla fue repartida por Pdvsa entre las cuatro filiales operadoras: Lagoven, Meneven, Maraven y Corpoven.
El petróleo que se encuentra en esa importante zona es un crudo no convencional, viscoso y pesado, por lo que necesita de un complejo proceso antes de ser refinado, que se lleva a cabo a través de los mejoradores. Estos son infraestructuras que convierten el crudo extrapesado en uno más ligero para hacerlo más rentable en el mercado internacional.
Privados presentes. Luego del fin de la apertura petrolera, el Gobierno acordó nacionalizar, el 1° de mayo de 2007, las extintas asociaciones estratégicas manejadas por las trasnacionales instaladas en la Faja del Orinoco: Ameriven, Sincor, Petrozuata y Cerro Negro, lo cual dio paso a las empresas mixtas Petropiar, Petrocedeño, Petroanzoátegui y Petromonagas, respectivamente.
Con la nacionalización, Pdvsa obtiene el control del negocio al lograr la mayoría accionaria. Este esquema se ejecutó en el marco del Plan Siembra Petrolera, proyecto que prevé importantes inversiones en el sector hasta 2012.
Magna reserva. Al mismo tiempo, se desarrolla en la Faja del Orinoco la certificación y cuantificación de crudo con la participación de países de Asia, Europa y América Latina, los cuales aceptaron el ofrecimiento del Gobierno de incorporarse en el proceso, como parte del proyecto Magna Reserva. Para lograrlo, el reservorio de hidrocarburos ha sido dividido en cuatro grandes áreas, subdivididas en 27 bloques de unos 500 kilómetros cuadrados cada uno.
En 2005 se contaban sólo 10 empresas foráneas instaladas en la Faja. En tres años se duplicó la participación de petroleras estatales al llegar a la cifra de 21 empresas.
Además de la participación de empresas estatales para el desarrollo de proyectos, Venezuela también se asoció con compañías privadas como la noruega Statoil, la francesa Total, la estadounidense Chevron y British Petroleum (BP) del Reino Unido, entre otras.
Las empresas rusas y japonesas, por ejemplo, también han manifestado su intención hacer grandes inversiones.
Pdvsa estima incorporar 179.751 millones de barriles de reservas probadas de crudo adicionales a las contabilizadas este año, con lo que espera ratificar que tiene el mayor inventario de petróleo al contabilizar 314.617 millones de barriles certificados, superando a Arabia Saudita con 216 millardos de barriles de crudo A la par de todos estos proyectos, Pdvsa anunció que desembolsará $25.920 millones para inversiones sociales hasta 2018.
La intención es convertir a la Faja en una nueva región de desarrollo, utilizando el petróleo como motor económico.