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Cuando Colombia se arma y se acusa a Venezuela

Fuentes: Tercera Información

Colombia para el año 2010 va a destinar 11.057 millones de dólares al Ministerio de Defensa, un 14,2% de su presupuesto. El presupuesto que Colombia destina al ejército y otras fuerzas policiales es mayor que el que destina a educación, apenas un 13% de los presupuestos colombianos. Venezuela para el año 2.010 va a destinar […]

Colombia para el año 2010 va a destinar 11.057 millones de dólares al Ministerio de Defensa, un 14,2% de su presupuesto. El presupuesto que Colombia destina al ejército y otras fuerzas policiales es mayor que el que destina a educación, apenas un 13% de los presupuestos colombianos.

Venezuela para el año 2.010 va a destinar 3.042 millones de dólares al Ministerio de Defensa, un 4,1% de su presupuesto. Lo que Venezuela destina a educación quintuplica a lo destinado al ejército y demás fuerzas de seguridad del estado, llegando al 20% de los presupuestos.

El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, apoya las guerras imperialistas que los Estados Unidos de América libran por el mundo, el gobierno que él dirige decide que se publica o no en los medios de comunicación teniendo a los periodistas temerosos de las consecuencias de no seguir sus dictados, ha encarcelado a 7.000 personas por motivos políticos, es responsable de más del 90% de las torturas que se cometen en las cárceles colombianas, sus conexiones con los paramilitares que asesinan a sindicalistas y llevó adelante una matanza en territorio ecuatoriano que ha logrado una crisis diplomática con el país vecino, al violar el derecho internacional y todas las reglas diplomáticas, ocupando ilegalmente territorio de otro país.

Ahora el presidente Colombiano, sin apenas apoyo en el resto de Latinoamérica ha decidido instalar, de espaldas al continente, 7 bases militares norteamericanas en su territorio. Este hecho ha creado una enorme tensión con países como Venezuela, Ecuador, Bolivia, Paraguay, Nicaragua, Argentina, Uruguay y Brasil. El presidente Lula, por ejemplo, culpó a Uribe de la tensión que se vive en Latinoamérica, el presidente Correa afirmó que Uribe tiene las manos manchadas de sangre y el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez expresó que la instalación de bases extranjeras en el país supone una violación de la soberanía nacional.

Mientras tanto, el presidente Chávez se ha opuesto a la guerra de Irak y ha hecho llamamientos en varias ocasiones para que los Estados Unidos retiren sus tropas de los países ocupados. El venezolano es venerado en Palestina por su rechazo al genocidio que el estado de Israel perpetra contra la población palestina.

El presidente venezolano ha establecido por primera vez en la historia de Venezuela buenas relaciones con todos los países africanos y la mayoría de países asiáticos, manteniendolas con los países europeos y los de su propia región. Estas relaciones están basadas en el respeto a la soberanía de los países y el respeto a la paz que promueve el gobierno bolivariano, visible en hechos como la fundición de más de 30.000 armas y destinar el dinero a una fundación que apoya a los niños con cáncer.

Venezuela, como respuesta a la instalación de bases militares en Colombia, está promoviendo las Bases por la Paz en las que el arma más potente lo representa el debate que mantienen los que por allí se pasan.

Otra diferencia entre los presidentes que destacan los valores pacifistas de Chávez y los militares de Uribe lo representan los refugiados. El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha felicitado en varias ocasiones al presidente venezolano por el buen trato dispensado a los cientos de miles de refugiados colombianos que se resguardan en Venezuela de las acciones de Uribe. Mientras tanto la ACNUR ha declarado a Colombia en estado de crisis al superar los 3 millones de exiliados.

Estos exiliados son provocados por el conflicto interno que vive el país, que junto al narcotráfico, suponen los dos puntos en los que el presidente Uribe ha justificado la instalación de estas bases. Sorprende que la lucha contra el narcotráfico sea un motivo para las bases ya que los datos que se observan en Bolivia y Venezuela, indican que cuando la agencia contra el narcotráfico estadounidense (DEA) se retiró de esos paises el narcotráfico descendió y la incautación de drogas junto con el apresamiento de los narcotraficantes se incrementó.

Los hechos demuestran a una Colombia guerrerista que gasta más en armas que en educación para su pueblo, que crea tensiones con sus países vecinos e instala bases militares norteamericanas frente a una Venezuela que se opone a la guerra, gasta poco en armas y mantiene una buena relación diplomática con la inmensa mayoría de los países del mundo.

Evo Morales, presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, ha declarado en varias ocasiones que «donde hay una base militar estadounidense hay golpes de estado«, y atendiendo a los ejemplos históricos como Chile en 1973, Guatemala en 1954, Haití en 1991 o el más reciente golpe de estado en Honduras donde los EEUU permitieron la salida de Zelaya desde una de sus bases, han subvencionado la dictadura instalada por los golpistas y han dicho reconocer las elecciones fraudulentas de esos golpistas, no quedan dudas de la peligrosidad que las bases militares estadounidenses conllevan.

Por este motivo y viendo los últimos acontecimientos, el presidente Chávez ha llamado a prepararse para la defensa frente a un eventual ataque estadounidense desde Colombia. Este legítimo de derecho a defender el propio territorio ha sido tergiversado para transmitirle a la opinión pública la imagen de una Venezuela agresiva que amenaza sin tener justificaciones para ello.

Todos estos argumentos se demuestran cuando es el propio Pentágono el que lo confirma.

Fuente: http://tercerainformacion.es/spip.php?article11123