America latina en el 2010 se encamina a conmemorar en el continente el bicentenario de la separación del reino español, luego de esa separación vendría una historia de desencuentros y la balcanizaciones fagocitadas por el imperio remplazante; el Británico, que nos mantendría en una relación de dependencia a los nuevos países hispano parlantes, hasta que […]
America latina en el 2010 se encamina a conmemorar en el continente el bicentenario de la separación del reino español, luego de esa separación vendría una historia de desencuentros y la balcanizaciones fagocitadas por el imperio remplazante; el Británico, que nos mantendría en una relación de dependencia a los nuevos países hispano parlantes, hasta que un nuevo poder la desplazara, y el continente quedaría en el área de influencia de la superpotencia surgida de la II Guerra Mundial, los EE.UU., que implementaría un poder político militar nuevo, acompañado de todo un sistema de organizaciones que dictarían las políticas económicas a la región, para ello estableció organismos que le facilitarían su presencia indiscutida, La Organización de los Estados Americanos (OEA), Tratado de Asistencia Reciproca (TIAR), Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Escuela de las Américas – organismo para estandarizar las fuerzas armadas latinoamericanas. Respaldando la presencia de las empresas multinacionales de origen norteamericano en nuestros países. Y con ello se impuso al Dólar como moneda de intercambio.
Pero America Latina siempre intento liberarse de la tutela de los Estados Unidos intentado a principio del siglo XX, el original pacto ABC (Argentina, Brasil y Chile) que representara a los vecinos ante las potencias Europeas y Norteamericana.
Este pacto es recreado por tres gobernantes latinoamericanos que en la década del ’50 se enfrentara al problema del agotamiento del modelo agro-exportador y la necesidad de conformar un mercado ampliado que les permitiera «completar» sus aparatos productivos, en forma mancomunada. Llevados por sus necesidades internas y en un escenario de pos guerra adverso, por la depresión del precio de las materias primas, los líderes nacionalistas populares Perón, Vargas e Ibáñez, recrearon el ABC.
El nuevo ABC sería ajeno al «panamericanismo» y por ello fue destruido ya que no incluía a los Estados Unidos como socio estratégico del acuerdo.
Recién se podría consolidar un nuevo espacio económico en el cono sur a principio de la década del 90 (1991) con el Tratado de Asunción se daba origen al MERCOSUR (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay), es significativo destacar que dicho proceso integracionista se desarrolla en medio de la nueva globalización que impuso la Triada (EE.UU., UE y Japon) luego de la implosión de la Unión Soviética, que marcaría a los países latinoamericanos en un antes y un después de dicho acontecimiento, serian los años perdidos pues se vieron afectados profundamente los países de nuestra región, en un retroceso muy significativo en todos los ordenes: económico, social, cultural industrial y tecnológico y que en definitiva haría colapsar a muchos regimenes políticos «democráticos» que impulsaron esas políticas. El MERCOSUR permitió desarrollar un esquema de mercado ampliado y protegido, y con ello salvar las economías locales, el núcleo duro de dicho mercado común son la Argentina y Brasil (los dos países más grandes y de mayor peso económico del continente), cumpliendo el rol que les cupo a Francia y Alemania en el mercado común europeo.
Desde 1998 a la actualidad, los flujos comerciales intra Mercosur han crecido un 60 %, mientas que los flujos extra bloque se triplicaron.
La demanda de nuestros productos por parte del eje asiático se incremento significativamente. En 1998 Asia participaba en un 23% en las importaciones del bloque del Cono Sur. En 2008 esa participación había aumentado a un 38%. Lo que se manifiesta es un cambio de socios comerciales». Tan es así que China desplazo como principal socio comercial de Brasil a Estados Unidos.
El Mercosur también elimino la grave amenaza que se cernía sobre su supervivencia para poder establecer un nuevo umbral de poder con el armado de un espacio continental industrial de America del Sur, al rechazar en el año 2005 el «Área de Libre comercio de las Américas» (ALCA) que proponía Estados Unidos.
En estos últimos años el Mercosur se ha visto fortalecido con la incorporación de nuevos socios, recientemente el Senado de Brasil aprobó la incorporación como socio pleno a la Republica de Venezuela, siendo estados asociados: Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador y Perú, como podemos apreciar solo no participan los enclaves coloniales europeos de América del sur como socios. Y en un marco de mayor resistencia a la globalización asimétrica que nos fuera impuesta por la triada ya mencionada, se establecen nuevos mecanismos para liberarnos del dólar centrismo, tomando como base la iniciativa de Argentina y Brasil de reducir el peso del dólar como moneda de referencia, utilizando divisas locales entre las transacciones entre los mismos que se instituyo en el 2008 el: Sistema de Pago en Monedas Locales (SML). A fines del 2010 se prevé que se multipliquen por 10 las actuales transacciones intra mercado y es de destacar que el SML se uso en un 80% en el 2009 por parte de las pequeñas y medianas empresas del Mercosur, ahora se sumara Uruguay al sistema y el plan cuenta con el beneplácito de Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela. En el nuevo marco geopolítico y económico que se plantea el continente suramericano frente al mundo policentrista en formación, el Banco del Sur es una pieza clave para poder disponer los suramericanos de nuestros propios recursos financieros, hoy en su mayoría depositados en bancos de USA y Europa (estamos hablando de mas de 164.000 millones de dólares) En principio serán 7000 millones de dólares de capital con que iniciara las operaciones el banco y dentro de sus objetivos podrá: emitir bonos para el financiamiento de actividades crediticias, además de financiar a los entes públicos, empresas mixtas, empresas privadas, cooperativas, empresas asociativas y comunitarias, siempre que ejecuten proyectos de energía, salud y seguridad alimentaria.
La Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA: Bolivia-Venezuela-Cuba-
Como podemos apreciar estos rasgo de nuevo umbral de poder del continente suramericano que intenta eliminar la hegemonía de la triada en nuestra región y que lidera indiscutiblemente Brasil, (potencia emergente integrante del BRIC), también se esta consolidando en nuevos organismos políticos-económicos: La UNASUR (Unión de Naciones Sudamericanas) o el Consejo Sudamericano de Defensa o el mismo Banco del Sur nos esta indicando los nuevos tiempos. EE.UU. no aceptara esta insoburdinación e intentara retomar el control, para ello reactivo la IV Flota, estableció nuevas bases militares en Colombia e intenta «militarizar todo conflicto político» (con los argumentos de la lucha contra el narcoterrorismo funcional a sus intereses).
Igualmente America latina en el 2010 tiene una nueva alternativa de consolidar su nuevo umbral de poder e integración estableciéndose como un nuevo «espacio económico industrial continental auto concentrado«. En el mundo policentrista que se esta construyendo.
Rebelión ha publicado este artículo a petición expresa del autor, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.